Casillas, otra vez pieza clave

Madrid, EFE
Sorprende que Iker Casillas, en el peor año de su carrera, tanto con el Real Madrid como con la selección, haya sido preseleccionado como uno de los mejores porteros de 2014, con aspiraciones a formar parte del once ideal de la FIFA, aunque el gran favorito a repetir trofeo sea Manuel Neuer, campeón del mundo en Brasil, donde el alemán ya fue reconocido como el guardameta más destacado. Sin embargo, al haber sido invitados a votar todos los futbolistas profesionales del planeta, ya no resulta tan extraño que Casillas haya sido elegido, junto a Neuer, el belga Thibaut Courtois, el chileno Claudio Bravo y el italiano Gianluigi Buffon, uno de los nominados a un galardón que el madrileño ya se adjudicó durante cinco años consecutivos, entre 2008 y 2012.


En la preselección del sindicato de futbolistas (FIFPro) no se encuentra el costarricense Keylor Navas, después de que el suplente de Casillas fuese reconocido como uno de los mejores del Mundial, mientras el capitán del Real Madrid alimentaba el debate de la portería con sus errores ante Holanda y Chile, posteriores al clamoroso fallo en la final de la Liga de Campeones que a punto estuvo de costar la ‘décima’, y previos al amistoso ante el Manchester United (tres goles) en pretemporada, a principios de agosto. Sin embargo, el portero que tenía al enemigo en casa, ya que llegó a ser pitado por su propia afición en el Bernabéu, ha reaccionado, ha recuperado la confianza y, dado que el proceso de elección a mejor portero del año, y al resto de demarcaciones, comenzó en septiembre, Casillas está en el ‘top cinco’ mundial bajo palos y es de nuevo indiscutible.

Revitalizado con la camiseta blanca, y también con ‘La Roja’, Casillas vuelve a tener ángel -lo demostró una vez más ante el Eibar-, sólo ha encajado un gol en los últimos nueve partidos, y se ha convertido en una pieza clave en el Real Madrid de Carlo Ancelotti que el miércoles puede igualar el récord de 15 victorias consecutivas que sumaron el equipo de Miguel Muñoz (temporada 1960-61) y el de José Mourinho (2011-2012). De momento, además de ser el Madrid el más goleador en la historia de la Liga después de 12 jornadas (46 tantos), gracias a las 20 dianas de Cristiano Ronaldo en tan sólo 11 partidos, ya que el portugués se perdió el de Anoeta, también es el segundo equipo menos goleado del campeonato. Los blancos llevan 11 dianas en contra, igualados con el Valencia y sólo superados por el Barça (seis). Sin embargo, el guardameta de Móstoles ha encajado nueve de esas dianas, en 10 partidos de Liga, porque fue Keylor Navas quien defendió la portería ante el Elche y el Rayo, saldados curiosamente por el mismo resultado: 5-1.

Después de que en la última temporada de Mourinho, en plena guerra con Casillas, la web oficial del Real Madrid ni siquiera destacase la designación del portero como el mejor del mundo por quinto año seguido, sino que, en un acto considerado de desprecio colocó entonces su premio como cuarta noticia del día, este lunes el medio oficial sí resaltó su nominación al once mundial de FIFA FiFPro, pese a su pésimo 2014. Con su sitio recuperado y, tras habérsele faltado al respeto y ser acusado de no entrenarse como debía, en cabecera está de nuevo Casillas, junto a Cristiano, «histórico en la Liga», y Benzema, en su «año más goleador» (33 tantos con el Real Madrid y con la selección francesa).

Además de ser Cristiano el único futbolista que ha llegado a marcar 20 goles en las 12 primeras jornadas de la competición liguera, al delantero portugués del Real Madrid se le presenta también el miércoles en Basilea la oportunidad de superar el récord de Raúl en la Copa de Europa. Raúl y Messi se encuentran igualados con 71 tantos, y Cristiano está a uno de ambos. Al día siguiente de que el argentino del Barça intente batir la plusmarca en Chipre ante el Apoel de Nicosia, Cristiano lo intentará en el St. Jakob Park de Basilea, donde Carlo Ancelotti tiene previsto hacer rotaciones una vez asegurado el pasaporte a octavos de final y el liderato de grupo en la Champions, donde Casillas también se ha encargado de echar el cerrojo, como se le reclamaba.