Ucrania: 300 muertos en la batalla de Ilovaisk
Un informe del parlamento ucraniano reveló el lunes que más de 300 soldados murieron durante una batalla de semanas que representó un revés aplastante en la campaña militar para desalojar a los separatistas prorrusos del este del país.
El informe es la primera confirmación oficial sobre la magnitud de la derrota en la ciudad de Ilovaisk que los críticos del comando militar describieron como resultado de un liderazgo desastroso.
Se cree que la cifra de bajas podría ser mayor, y la investigación parlamentaria sobre la batalla en esa ciudad se quejó de que las autoridades militares se han negado a cooperar.
"Ni el Ministerio de Defensa ni el estado mayor han respondido las preguntas del comité investigador acerca de bajas en las fuerzas armadas", dijo el comité en una declaración.
Las fuerzas ucranianas lanzaron un ataque a Ilovaisk a principios de agosto hasta que se encontraron sitiados por los separatistas fuertemente armados.
La ciudad y los pueblos circundantes presentan huellas de cañoneos intensos.
El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, concertó un cese de fuego con el presidente ruso Vladimir Putin y el liderazgo rebelde, que se cumple a medias.
La canciller federal alemana Angela Merkel dijo el lunes que "lamentablemente queda un largo camino para un cese de fuego", dado el número de muertos desde que fue convenido. Europa busca un cumplimiento completo, controles fronterizos despejados y elecciones locales en el este de Ucrania de acuerdo con la ley nacional y no bajo los auspicios de los rebeldes.
En Eslovaquia, donde se reunió con el primer ministro Robert Fico, Merkel dijo que la integridad territorial ucraniana debe ser garantizada "no solamente en papel" y que el plan del cese de fuego debe cumplirse en todos sus detalles.
Las Naciones Unidas calculan que más de 300 personas han muerto desde que se anunció el cese de fuego, y que la cifra de muertos asciende a por lo menos 3.600 en más de seis meses de lucha.
