Real Madrid – Barcelona: Un homenaje al fútbol
Madrid, Goal.com
Por Alberto Piñero
Por fin llegó esa fecha que lleva rodeada en el calendario desde que se celebró el sorteo de la Liga BBVA. La del primer Clásico de la temporada. La del primer partido entre el Barcelona y el Real Madrid. Toda una constelación de estrellas en un mismo terreno de juego, en torno a un único balón, en lucha por tres puntos que se antojan no vitales pero sí muy importantes para dos de los equipos más poderosos de todo el panorama mundial. 1500 millones de euros en jugadores, más de 150 títulos nacionales e internacionales, los dos últimos Balones de Oro (durante los últimos seis años consecutivos), el Mejor Club del Siglo XX y vigente campeón de Europa, contra el líder imbatido de la Liga y uno de los clubes que amenaza con serlo en el Siglo XXI tras tres Champions League en los últimos nueve años. El cartel es inmejorable, como se puede ver.
En esta ocasión aderezado además porque Luis Enrique regresa al Santiago Bernabéu por primera vez como entrenador culé. Y con él, un equipo renovado en la búsqueda de la inspiración que perdió el último año. Jugadores como Ivan Rakitic, Jeremy Mathieu o Claudio Bravo están encajando a la perfección, y hay que sumarle la contribución de un Luis Suárez que precisamente podría debutar en partido oficial como blaugrana en el Santiago Bernabéu. Son líderes e imbatidos, con un Neymar en racha goleadora y un Lionel Messi que está redescubriéndose como asistente y creador mientras sigue sumando goles para la causa. A punto de batir el récord histórico de la Liga, en poder de Telmo Zarra. Qué mejor escaparate para superarlo que un Clásico en el Santiago Bernabéu, pensará.
Aunque, eso sí, en el coliseo blanco no parecen dispuestos a rendir pleitesías. Ni al nuevo tridente blaugrana. Ni a Lionel Messi en particular. Ni aunque bata el récord histórico de Telmo Zarra. Bastante tienen en el Santiago Bernabéu con los suyos como para pensar en loar a los demás, como dijo Álvaro Arbeloa. No obstante, no es menos cierto que el Real Madrid se siente hoy suficientemente poderoso como para no envidiar a nadie. En una racha de fútbol y resultados encomiable, como bien sufrió el Liverpool este pasado miércoles en sus propias carnes, en plena caza por el liderato de la Liga BBVA. Con unos James Rodríguez, Toni Kroos e Isco Alarcón plenamente adaptados a ese nuevo mediocampo pleno de talento y sacrificio. Con un Karim Benzema en estado de gracia. Pero sobre todo, con un Cristiano Ronaldo apoteósico.
Veinte goles antes de que termine el mes de octubre, con quince de ellos en la Liga, batiendo el récord histórico a estas alturas del campeonato, y a punto de romper la marca absoluta de goles en la historia de la Champions League también. Lleva diez partidos consecutivos marcando gol, y enfila el Balón de Oro 2014 con absoluta firmeza. De ello depende en buena manera este Clásico. Quizás menos que en ediciones anteriores, pero igualmente su duelo particular con Lionel Messi en el Santiago Bernabéu hará saltar chispas durante los noventa minutos.
En lo estrictamente deportivo, de cara al partido del sábado, el Real Madrid recuperará a Sergio Ramos para el Clásico. Pero no así a Gareth Bale, Fabio Coentrao ni Jesé Rodríguez, lesionados. Se espera que Carlo Ancelotti dibuje un once idéntico al de Anfield, con la incursión del zaguero de Camas y Dani Carvajal. Mientras tanto, en el Barcelona no se espera que jueguen ni Thomas Vermaelen (aun con el alta médica) ni Douglas. Y a la novedad de Luis Suárez seguramente se añada la de Sergio Busquets, que se perdió el partido ante el Ajax por unas molestias físicas, pero parece plenamente recuperado para este Clásico que se espera sea un homenaje… al fútbol.