Miles de personas dan su último adiós al militar asesinado en Ottawa
Hamilton, EP
Miles de personas han acudido este martes en la localidad de Hamilton, en la provincia de Ontario, en el sureste de Canadá, al funeral oficiado en memoria del cabo Nathan Cirillo, asesinado la semana pasada en Ottawa por un hombre armado que posteriormente se adentró en el Parlamento.
El cabo Cirillo, de 24 años, fue uno de los dos militares que murieron la semana pasada en dos ataques perpetrados por sendos radicales convertidos al islam. Los dos ataques se registraron en un momento en el que Canadá ha reforzado su participación en la campaña de ataques aéreos contra Estado Islámico en Irak.
Vestidos con faldas escocesas y botas blancas, los compañeros de armas de Cirillo, miembros de la unidad Argyll and Sutherland Highlanders, han llevado a hombros su féretro hasta el interior de la catedral anglicana del Cristo en Hamilton, la localidad natal del fallecido, situada al oeste de Toronto.
El primer ministro canadiense, Stephen Harper, y otros líderes políticos han acompañado a la familia del militar fallecido durante la misa funeral en la catedral, oficiada por el reverendo Rob Fead.
"TU MUERTE NO HA SIDO EN VANO"
"Nathan, tu muerte no ha sido en vano. Por ti, este día, este gran país que es Canadá está más unido y más determinado que nunca a ser lo que está llamado a ser. Un lugar de libertad, de esperanza y de paz", ha afirmado el reverendo", ha asegurado el reverendo.
Los dos ataques de la semana pasada han conmocionado a los canadienses y han puesto a debate el tema de la seguridad en la capital del país, Ottawa. Las fuerzas de seguridad canadienses han advertido de que todos los ciudadanos que adoptan posturas extremistas y deciden tomar las armas contra el Estado representan una "grave" amenaza para la seguridad del país.
Cirillo ejercía de escolta sin armas en el monumento a los militares caídos en acto de servicio cuando fue abatido por los disparos de un hombre armado el pasado 22 de octubre. El hombre que le disparó, que era drogadicto y tenía problemas mentales, se dirigió posteriormente al Parlamento y logró entrar en la cámara, donde murió por disparos de agentes de la Policía, a pocos metros de la sala en la que el primer ministro Harper se reunía con sus compañeros del Partido Conservador.
El funeral de Cirillo es el primero de los dos que se van a oficiar en Canadá. Este sábado tendrá lugar en Longueuil, en Quebec, el funeral por Patrice Vincent, un suboficial de 53 años que murió dos días antes, el 20 de octubre, cuando fue atropellado junto a otro militar por un radical convertido al islam.
La Policía Montada de Canadá mantiene que el supuesto autor del asesinato de Cirillo, Michael Zehaf-Bibeau, hizo un vídeo en el que aseguraba que su ataque tenía como objetivo castigar a Canadá por su política exterior.
Las autoridades canadienses también han definido al autor del atropello de Vincent, Martin Rouleau, de 25 años de edad, como un joven radicalizado. Los dos individuos murieron abatidos por disparos de las fuerzas de seguridad tras perpetrar sus crímenes.
Tras el funeral del cabo Cirillo, Harper tiene previsto reunirse con el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, que viajará a Ottawa para expresar sus condolencias por estos dos ataques.
Cirillo se incorporó a la unidad Argylls en 2007, tras graduarse en el instituto. Amante de los perros, la imagen de sus dos perros mirando desde la valla de su vivienda, como si estuvieran esperando el regreso de su dueño, ha tenido amplia repercusión en las redes sociales.
Miles de personas han acudido este martes en la localidad de Hamilton, en la provincia de Ontario, en el sureste de Canadá, al funeral oficiado en memoria del cabo Nathan Cirillo, asesinado la semana pasada en Ottawa por un hombre armado que posteriormente se adentró en el Parlamento.
El cabo Cirillo, de 24 años, fue uno de los dos militares que murieron la semana pasada en dos ataques perpetrados por sendos radicales convertidos al islam. Los dos ataques se registraron en un momento en el que Canadá ha reforzado su participación en la campaña de ataques aéreos contra Estado Islámico en Irak.
Vestidos con faldas escocesas y botas blancas, los compañeros de armas de Cirillo, miembros de la unidad Argyll and Sutherland Highlanders, han llevado a hombros su féretro hasta el interior de la catedral anglicana del Cristo en Hamilton, la localidad natal del fallecido, situada al oeste de Toronto.
El primer ministro canadiense, Stephen Harper, y otros líderes políticos han acompañado a la familia del militar fallecido durante la misa funeral en la catedral, oficiada por el reverendo Rob Fead.
"TU MUERTE NO HA SIDO EN VANO"
"Nathan, tu muerte no ha sido en vano. Por ti, este día, este gran país que es Canadá está más unido y más determinado que nunca a ser lo que está llamado a ser. Un lugar de libertad, de esperanza y de paz", ha afirmado el reverendo", ha asegurado el reverendo.
Los dos ataques de la semana pasada han conmocionado a los canadienses y han puesto a debate el tema de la seguridad en la capital del país, Ottawa. Las fuerzas de seguridad canadienses han advertido de que todos los ciudadanos que adoptan posturas extremistas y deciden tomar las armas contra el Estado representan una "grave" amenaza para la seguridad del país.
Cirillo ejercía de escolta sin armas en el monumento a los militares caídos en acto de servicio cuando fue abatido por los disparos de un hombre armado el pasado 22 de octubre. El hombre que le disparó, que era drogadicto y tenía problemas mentales, se dirigió posteriormente al Parlamento y logró entrar en la cámara, donde murió por disparos de agentes de la Policía, a pocos metros de la sala en la que el primer ministro Harper se reunía con sus compañeros del Partido Conservador.
El funeral de Cirillo es el primero de los dos que se van a oficiar en Canadá. Este sábado tendrá lugar en Longueuil, en Quebec, el funeral por Patrice Vincent, un suboficial de 53 años que murió dos días antes, el 20 de octubre, cuando fue atropellado junto a otro militar por un radical convertido al islam.
La Policía Montada de Canadá mantiene que el supuesto autor del asesinato de Cirillo, Michael Zehaf-Bibeau, hizo un vídeo en el que aseguraba que su ataque tenía como objetivo castigar a Canadá por su política exterior.
Las autoridades canadienses también han definido al autor del atropello de Vincent, Martin Rouleau, de 25 años de edad, como un joven radicalizado. Los dos individuos murieron abatidos por disparos de las fuerzas de seguridad tras perpetrar sus crímenes.
Tras el funeral del cabo Cirillo, Harper tiene previsto reunirse con el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, que viajará a Ottawa para expresar sus condolencias por estos dos ataques.
Cirillo se incorporó a la unidad Argylls en 2007, tras graduarse en el instituto. Amante de los perros, la imagen de sus dos perros mirando desde la valla de su vivienda, como si estuvieran esperando el regreso de su dueño, ha tenido amplia repercusión en las redes sociales.