Líder ucraniano prevé difíciles conversaciones con presidente ruso la próxima semana
Kiev, Reuters
El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, dijo el sábado que prevé que las planeadas conversaciones con su homólogo ruso, Vladimir Putin, la próxima semana en Italia sean difíciles, aunque afirmó que Moscú tiene un papel crucial que desempeñar para llevar la paz a su país.
Kiev y sus aliados en Occidente acusan a Moscú de respaldar una revuelta separatista prorrusa en el este de Ucrania con la entrega de tropas y armamento. Rusia niega las acusaciones, pero dice que tiene el derecho a defender los intereses de la mayoría rusoparlante de la región.
El Kremlin ha dicho que Putin y Poroshenko podrían sostener conversaciones en el marco de una cumbre de líderes de Asia y Europa que se llevará a cabo en Milán el 16 y 17 de octubre.
"No espero que las conversaciones sean fáciles. Estoy acostumbrado a esto, tengo mucha experiencia en sostener reuniones diplomáticas muy difíciles. Pero estoy optimista", declaró Poroshenko a los periodistas, citado por la agencia de noticias ucraniana Interfax.
El presidente ucraniano dijo que algunos líderes europeos también podrían sumarse a sus conversaciones con Putin.
El asesor del Kremlin, Yuri Ushakov, sostuvo que no podría descartarse una "reunión al estilo Normandía", en referencia a las conversaciones en Francia en junio entre Putin, Poroshenko y los líderes de Alemania y Francia.
"La cuestión clave y principal es la paz. El papel de Rusia en el tema de llevar la paz, como comprenderá, es difícil de sobreestimar", dijo Poroshenko. "Y hoy planteamos el asunto de pasar de las declaraciones a medidas concretas", agregó.
Hasta ahora se sabe que Putin y Poroshenko se han reunido dos veces desde la elección del líder ucraniano en mayo, primero en Normandía y luego en agosto en la capital de Bielorrusia, Minsk, cuando concordaron en la necesidad de declarar un cese al fuego entre las fuerzas de Kiev y los rebeldes pro-rusos en el este de Ucrania.
Un cese al fuego entró en vigencia el 5 de septiembre y se ha mantenido, pese a frecuentes violaciones, especialmente alrededor del aeropuerto de Donetsk, la mayor ciudad del este de Ucrania.
La Unión Europea y Estados Unidos han impuesto sanciones económicas contra Rusia por el conflicto en Ucrania, donde Moscú también anexó la Península de Crimea.
En represalia, Rusia ha prohibido la mayoría de las importaciones de alimentos.
La ONU dijo el miércoles que la cifra de fallecidos por el conflicto en el este de Ucrania es de más de 3.660 personas.
Poroshenko afirmó el sábado que también espera un "avance significativo" en Milán para resolver la disputa de larga data por el precio del gas con Rusia.
Rusia interrumpió las entregas de gas a Ucrania en junio por lo que dijo que son más de 5.000 millones de dólares en cuentas impagas.
Ucrania enfrenta la posibilidad de una escasez energética este invierno si no se llega a un acuerdo, lo que arriesgaría a reiterar las interrupciones a los suministros de gas a Europa vistos en 2006 y 2009.
En forma separada, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, y el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, discutirían sobre la situación en Ucrania en una reunión en París el 14 de octubre.
El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, dijo el sábado que prevé que las planeadas conversaciones con su homólogo ruso, Vladimir Putin, la próxima semana en Italia sean difíciles, aunque afirmó que Moscú tiene un papel crucial que desempeñar para llevar la paz a su país.
Kiev y sus aliados en Occidente acusan a Moscú de respaldar una revuelta separatista prorrusa en el este de Ucrania con la entrega de tropas y armamento. Rusia niega las acusaciones, pero dice que tiene el derecho a defender los intereses de la mayoría rusoparlante de la región.
El Kremlin ha dicho que Putin y Poroshenko podrían sostener conversaciones en el marco de una cumbre de líderes de Asia y Europa que se llevará a cabo en Milán el 16 y 17 de octubre.
"No espero que las conversaciones sean fáciles. Estoy acostumbrado a esto, tengo mucha experiencia en sostener reuniones diplomáticas muy difíciles. Pero estoy optimista", declaró Poroshenko a los periodistas, citado por la agencia de noticias ucraniana Interfax.
El presidente ucraniano dijo que algunos líderes europeos también podrían sumarse a sus conversaciones con Putin.
El asesor del Kremlin, Yuri Ushakov, sostuvo que no podría descartarse una "reunión al estilo Normandía", en referencia a las conversaciones en Francia en junio entre Putin, Poroshenko y los líderes de Alemania y Francia.
"La cuestión clave y principal es la paz. El papel de Rusia en el tema de llevar la paz, como comprenderá, es difícil de sobreestimar", dijo Poroshenko. "Y hoy planteamos el asunto de pasar de las declaraciones a medidas concretas", agregó.
Hasta ahora se sabe que Putin y Poroshenko se han reunido dos veces desde la elección del líder ucraniano en mayo, primero en Normandía y luego en agosto en la capital de Bielorrusia, Minsk, cuando concordaron en la necesidad de declarar un cese al fuego entre las fuerzas de Kiev y los rebeldes pro-rusos en el este de Ucrania.
Un cese al fuego entró en vigencia el 5 de septiembre y se ha mantenido, pese a frecuentes violaciones, especialmente alrededor del aeropuerto de Donetsk, la mayor ciudad del este de Ucrania.
La Unión Europea y Estados Unidos han impuesto sanciones económicas contra Rusia por el conflicto en Ucrania, donde Moscú también anexó la Península de Crimea.
En represalia, Rusia ha prohibido la mayoría de las importaciones de alimentos.
La ONU dijo el miércoles que la cifra de fallecidos por el conflicto en el este de Ucrania es de más de 3.660 personas.
Poroshenko afirmó el sábado que también espera un "avance significativo" en Milán para resolver la disputa de larga data por el precio del gas con Rusia.
Rusia interrumpió las entregas de gas a Ucrania en junio por lo que dijo que son más de 5.000 millones de dólares en cuentas impagas.
Ucrania enfrenta la posibilidad de una escasez energética este invierno si no se llega a un acuerdo, lo que arriesgaría a reiterar las interrupciones a los suministros de gas a Europa vistos en 2006 y 2009.
En forma separada, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, y el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, discutirían sobre la situación en Ucrania en una reunión en París el 14 de octubre.