Europa verá más casos de ébola tras primer contagio fuera de África
Madrid, Reuters
La Organización Mundial de la Salud dijo el martes que es muy probable que Europa sufra más casos de ébola después de que una enfermera en España se convirtió en la primera persona conocida que se contagia del virus fuera de África.
En medio de la creciente preocupación global de que el ébola pueda extenderse más allá de África Occidental, donde ya ha causado la muerte de más de 3.400 personas en el peor brote de la historia, las autoridades españolas intentaron convencer a la población de que están enfrentando la amenaza.
Asimismo, expertos en salud indicaron que el riesgo de un gran brote fuera de África es pequeño.
Rafael Pérez-Santamarina, director del Hospital Carlos III de Madrid, donde la enfermera infectada trató a dos misioneros españoles que contrajeron la enfermedad en África Occidental, dijo que se están "revisando nuestros protocolos".
Cuatro personas, incluido el marido de la enfermera, fueron ingresados para estar en observación. Una de las cuatro, otra enfermera, que tuvo diarrea pero no fiebre, dio negativo en un examen para detectar el virus, dijo una fuente de la sanidad española.
El Gobierno regional de Madrid ordenó además sacrificar al perro de la enfermera infectada Teresa Romero, pese a que el marido se opuso.
"La existencia de este perro mascota que ha estado en la vivienda en contacto con la paciente afectada por el virus del ébola, de acuerdo con los hallazgos científicos disponibles, supone un posible riesgo de transmisión de la enfermedad al hombre", dijo un comunicado de las autoridades.
La Comunidad de Madrid aseguró que se mataría a "Excálibur", la mascota, sin provocarle sufrimiento y que luego sería incinerado.
Aunque los hospitales de Europa Occidental -a diferencia de las zonas afectadas en África- tienen instalaciones para aislar a pacientes enfermos, la directora europea de la OMS, Zsuzsanna Jakab, aseguró que "es bastante inevitable (...) que tales incidentes sucedan en el futuro por los viajes entre Europa y los países afectados".
No obstante, señaló que "lo más importante para nosotros es que Europa todavía tiene un riesgo bajo y que la parte occidental de la región europea particularmente es la mejor preparada del mundo para responder a las fiebres víricas hemorrágicas como el ébola".
Pese a todo, las autoridades sanitarias del mundo desarrollado se están viendo obligadas a reexaminar sus sistemas de alerta ante una enfermedad que está devastando Guinea, Sierra Leona y Liberia desde marzo, con una mortalidad superior a la mitad de los infectados.
Teresa Romero se fue de vacaciones en Madrid después de que el segundo de sus pacientes de ébola muriera el 25 de septiembre, pero no empezó a sentirse enferma hasta el 30 de septiembre. El sindicato en el que participa dijo que pidió tres veces hacerse la prueba del ébola antes de que se confirmó finalmente la infección el 6 de octubre.
MANIFESTACIÓN DE ENFERMERAS
Decenas de médicos y enfermeras se manifestaron fuera del Hospital La Paz Hospital de Madrid exigiendo más información sobre cómo se contagió Romero de ébola, que no se transmite por vía aérea y sí a través del contacto directo con los fluidos corporales de una persona que, según los expertos, debe estar mostrando ya síntomas.
"Dado que tanto los mecanismos de transmisión como las medidas de prevención son conocidas, es evidente que se ha producido algún error", afirmó el Colegio de Médicos de Madrid en un comunicado.
Los ecos de las críticas por la lenta respuesta llegaron hasta Dallas (Texas), donde el primer paciente de ébola diagnosticado en territorio estadounidense, Thomas Eric Duncan, se encontraba en estado crítico.
Aunque Duncan dijo a una enfermera que acababa de llegar de África Occidental, el hospital le envió inicialmente de vuelta a su departamento con antibióticos, regresando dos días más tarde en ambulancia.
Peter Piot, profesor en la London School of Tropical Medicine y uno de los descubridores del ébola, afirmó en una teleconferencia con un grupo científico de la OMS que "hay diferencias con lo que está ocurriendo en África Occidental. No dará origen a brotes (en Europa)".
El Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés), que vigila la evolución del virus en la Unión Europea, dijo que, aunque existe poco riesgo de que haya viajeros que ingresen con ébola sin saberlo, las autoridades de salud pública "pueden detectar y confirmar eficientemente casos del virus del ébola y, por tanto, evitar su expansión".
MEDICAMENTOS EXPERIMENTALES
En contraste con la gran mayoría de pacientes africanos, algunos en Europa y Estados Unidos han recibido tratamientos experimentales contra el ébola, sin cura probada.
En Madrid, Romero recibió anticuerpos de pacientes que sobrevivieron al virus. Y el Texas Health Presbyterian Hospital de Dallas informó que Duncan recibió el fármaco experimental brincidofovir, desarrollado por Chimerix Inc para ser usado contra un virus respiratorio, pero que no ha sido probado aún en pacientes con ébola.
Las autoridades españolas afirmaron que el esposo de Romero no ha mostrado hasta el momento síntomas de la enfermedad. Los otros ingresados son un trabajador de salud con diarrea pero sin fiebre y un español que viajó desde Nigeria.
Otras 22 personas que entraron en contacto con la enfermera no estaban aislados, pero se les estaba tomando la temperatura dos veces al día.
La Organización Mundial de la Salud dijo el martes que es muy probable que Europa sufra más casos de ébola después de que una enfermera en España se convirtió en la primera persona conocida que se contagia del virus fuera de África.
En medio de la creciente preocupación global de que el ébola pueda extenderse más allá de África Occidental, donde ya ha causado la muerte de más de 3.400 personas en el peor brote de la historia, las autoridades españolas intentaron convencer a la población de que están enfrentando la amenaza.
Asimismo, expertos en salud indicaron que el riesgo de un gran brote fuera de África es pequeño.
Rafael Pérez-Santamarina, director del Hospital Carlos III de Madrid, donde la enfermera infectada trató a dos misioneros españoles que contrajeron la enfermedad en África Occidental, dijo que se están "revisando nuestros protocolos".
Cuatro personas, incluido el marido de la enfermera, fueron ingresados para estar en observación. Una de las cuatro, otra enfermera, que tuvo diarrea pero no fiebre, dio negativo en un examen para detectar el virus, dijo una fuente de la sanidad española.
El Gobierno regional de Madrid ordenó además sacrificar al perro de la enfermera infectada Teresa Romero, pese a que el marido se opuso.
"La existencia de este perro mascota que ha estado en la vivienda en contacto con la paciente afectada por el virus del ébola, de acuerdo con los hallazgos científicos disponibles, supone un posible riesgo de transmisión de la enfermedad al hombre", dijo un comunicado de las autoridades.
La Comunidad de Madrid aseguró que se mataría a "Excálibur", la mascota, sin provocarle sufrimiento y que luego sería incinerado.
Aunque los hospitales de Europa Occidental -a diferencia de las zonas afectadas en África- tienen instalaciones para aislar a pacientes enfermos, la directora europea de la OMS, Zsuzsanna Jakab, aseguró que "es bastante inevitable (...) que tales incidentes sucedan en el futuro por los viajes entre Europa y los países afectados".
No obstante, señaló que "lo más importante para nosotros es que Europa todavía tiene un riesgo bajo y que la parte occidental de la región europea particularmente es la mejor preparada del mundo para responder a las fiebres víricas hemorrágicas como el ébola".
Pese a todo, las autoridades sanitarias del mundo desarrollado se están viendo obligadas a reexaminar sus sistemas de alerta ante una enfermedad que está devastando Guinea, Sierra Leona y Liberia desde marzo, con una mortalidad superior a la mitad de los infectados.
Teresa Romero se fue de vacaciones en Madrid después de que el segundo de sus pacientes de ébola muriera el 25 de septiembre, pero no empezó a sentirse enferma hasta el 30 de septiembre. El sindicato en el que participa dijo que pidió tres veces hacerse la prueba del ébola antes de que se confirmó finalmente la infección el 6 de octubre.
MANIFESTACIÓN DE ENFERMERAS
Decenas de médicos y enfermeras se manifestaron fuera del Hospital La Paz Hospital de Madrid exigiendo más información sobre cómo se contagió Romero de ébola, que no se transmite por vía aérea y sí a través del contacto directo con los fluidos corporales de una persona que, según los expertos, debe estar mostrando ya síntomas.
"Dado que tanto los mecanismos de transmisión como las medidas de prevención son conocidas, es evidente que se ha producido algún error", afirmó el Colegio de Médicos de Madrid en un comunicado.
Los ecos de las críticas por la lenta respuesta llegaron hasta Dallas (Texas), donde el primer paciente de ébola diagnosticado en territorio estadounidense, Thomas Eric Duncan, se encontraba en estado crítico.
Aunque Duncan dijo a una enfermera que acababa de llegar de África Occidental, el hospital le envió inicialmente de vuelta a su departamento con antibióticos, regresando dos días más tarde en ambulancia.
Peter Piot, profesor en la London School of Tropical Medicine y uno de los descubridores del ébola, afirmó en una teleconferencia con un grupo científico de la OMS que "hay diferencias con lo que está ocurriendo en África Occidental. No dará origen a brotes (en Europa)".
El Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés), que vigila la evolución del virus en la Unión Europea, dijo que, aunque existe poco riesgo de que haya viajeros que ingresen con ébola sin saberlo, las autoridades de salud pública "pueden detectar y confirmar eficientemente casos del virus del ébola y, por tanto, evitar su expansión".
MEDICAMENTOS EXPERIMENTALES
En contraste con la gran mayoría de pacientes africanos, algunos en Europa y Estados Unidos han recibido tratamientos experimentales contra el ébola, sin cura probada.
En Madrid, Romero recibió anticuerpos de pacientes que sobrevivieron al virus. Y el Texas Health Presbyterian Hospital de Dallas informó que Duncan recibió el fármaco experimental brincidofovir, desarrollado por Chimerix Inc para ser usado contra un virus respiratorio, pero que no ha sido probado aún en pacientes con ébola.
Las autoridades españolas afirmaron que el esposo de Romero no ha mostrado hasta el momento síntomas de la enfermedad. Los otros ingresados son un trabajador de salud con diarrea pero sin fiebre y un español que viajó desde Nigeria.
Otras 22 personas que entraron en contacto con la enfermera no estaban aislados, pero se les estaba tomando la temperatura dos veces al día.