Bacca y Gameiro elevan al Sevilla hasta el segundo puesto
Sevilla, As
El Sevilla acaba la jornada segundo en la tabla, por delante de Real Madrid, Valencia y Atlético. Hecho incontestable. A partir de ahí todo es matizable. Que el primer gol de Bacca llegó en fuera de juego, que hubo dos penaltis a favor del Elche que no pitó el árbitro o que el planteamiento de Unai Emery más parecía de un equipo que lucha por la salvación que de uno que pelea por la Champions. Pero ganó el Sevilla en Elche. Y además marcó Gameiro, que volvió a jugar después de varios meses lesionado. Motivos para salir con una sonrisa del Martínez Valero.
Quien no salió tan risueño fue el Elche. Rema y rema con todo lo que tiene. Es un grupo que ha heredado la solidaridad y el orden del curso pasado. Pero le falta fútbol. Mucho. Difícilmente se puede ganar si no se tira entre los tres palos en todo el partido. Está en descenso y sigue sin hacerse fuerte en casa, que fue lo que le dio la vida la temporada pasada. Y si encima no tiene suerte con los arbitrajes....
Emery tuvo claro el planteamiento desde el inicio. Se trataba de entregarle el balón al Elche y esperar agazapado un fallo para lanzar sus cuatro flechas: Deulofeu, Denis, Vidal y Bacca. Y a punto estuvo de salirle en la primera mitad. Un fallo en el pase de Damián acabó con Aleix Vidal delante de Manu. Su quiebro lo adivinó Álvaro para evitar el 0-1. Poco después, jugada calcada aunque con fallo de Mosquera. De nuevo Aleix mano a mano, aunque algo más escorado. Manu le ganó la partida.
En la segunda parte todo cambió con el gol de Bacca que embocó, en fuera de juego, tras un rechazo irregular de Manu a tiro de Deulofeu. El Elche quiso levantarse, pero enseguida llegó el gol de Gameiro, tras un gran centro de Denis Suárez. Los franjiverdes ya nunca se levantaron de la lona y Gameiro incluso tuvo el tercero que evitó Manu con otra gran intervención.
El Sevilla acaba la jornada segundo en la tabla, por delante de Real Madrid, Valencia y Atlético. Hecho incontestable. A partir de ahí todo es matizable. Que el primer gol de Bacca llegó en fuera de juego, que hubo dos penaltis a favor del Elche que no pitó el árbitro o que el planteamiento de Unai Emery más parecía de un equipo que lucha por la salvación que de uno que pelea por la Champions. Pero ganó el Sevilla en Elche. Y además marcó Gameiro, que volvió a jugar después de varios meses lesionado. Motivos para salir con una sonrisa del Martínez Valero.
Quien no salió tan risueño fue el Elche. Rema y rema con todo lo que tiene. Es un grupo que ha heredado la solidaridad y el orden del curso pasado. Pero le falta fútbol. Mucho. Difícilmente se puede ganar si no se tira entre los tres palos en todo el partido. Está en descenso y sigue sin hacerse fuerte en casa, que fue lo que le dio la vida la temporada pasada. Y si encima no tiene suerte con los arbitrajes....
Emery tuvo claro el planteamiento desde el inicio. Se trataba de entregarle el balón al Elche y esperar agazapado un fallo para lanzar sus cuatro flechas: Deulofeu, Denis, Vidal y Bacca. Y a punto estuvo de salirle en la primera mitad. Un fallo en el pase de Damián acabó con Aleix Vidal delante de Manu. Su quiebro lo adivinó Álvaro para evitar el 0-1. Poco después, jugada calcada aunque con fallo de Mosquera. De nuevo Aleix mano a mano, aunque algo más escorado. Manu le ganó la partida.
En la segunda parte todo cambió con el gol de Bacca que embocó, en fuera de juego, tras un rechazo irregular de Manu a tiro de Deulofeu. El Elche quiso levantarse, pero enseguida llegó el gol de Gameiro, tras un gran centro de Denis Suárez. Los franjiverdes ya nunca se levantaron de la lona y Gameiro incluso tuvo el tercero que evitó Manu con otra gran intervención.