Al menos 3.360 muertos en el conflicto en el este de Ucrania, 330 después del alto el fuego, según la ONU
Ginebra, EP
Al menos 3.660 personas han muerto y 8.756 han resultado heridas en el conflicto en el este de Ucrania desde mediados de abril hasta comienzos de septiembre, según datos recopilados por la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas, que ha asegurado que 331 de las víctimas mortales han fallecido después del último alto el fuego.
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Zeid Raad al Husein, ha advertido de que el conflicto sigue matando y dejando heridos a civiles y ha privado a cinco millones de personas que viven en las zonas afectadas por la violencia de sus derechos más básicos.
La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos ha asegurado que, aunque ha habido una "ausencia de acciones ofensivas a gran escala desde el alto el fuego anunciado el 5 de septiembre, "en algunas áreas el intercambio de disparos de artillería, carros de combate y armamento ligero ha continuado casi a diario". En concreto, asegura que ha seguido registrándose actividad armada en el aeropuerto de Donetsk, en la zona de Debaltseve en Donetsk y en la localidad de Shchastia, en Lugansk.
Desde mediados de abril de 2014 hasta el pasado 6 de octubre, la ONU ha contabilizado un total de 3.660 personas muertas y 8.756 heridos en el conflicto en el este de Ucrania. Entre el 6 de septiembre y el 6 de octubre, desde la entrada en vigor del alto el fuego, el número de muertos se sitúa en 331 personas aunque la ONU ha admitido que algunos de ellos podrían haber muerto antes.
PIDE RESPETO ALTO EL FUEGO
"Además de celebrar el alto el fuego para poner fin a los combates en el este de Ucrania, pido a todas las partes que lo respeten y lo mantengan y que dejen de atacar a los civiles y sus infraestructuras de una vez por todas", ha afirmado Zeid.
"Durante casi un año, los residentes de las zonas afectadas por el conflicto armado han estado privados de sus derechos fundamentales a la educación, al tratamiento sanitario adecuado, la vivienda y a las oportunidades de ganarse la vida. Una mayor prolongación de la crisis hará que la situación sea insostenible para millones de personas cuyas vidas ya han resultado gravemente afectadas", ha asegurado.
40.000 EMPRESAS CERRADAS POR EL CONFLICTO
Según los cálculos de la ONU, cerca de 40.000 pequeñas y medianas empresas en las regiones de Donetsk y Lugansk se han visto obligadas a cerrar sus puertas por los combates, lo que deja a miles de personas sin ingresos económicos.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha explicado que, según datos del Servicio de Emergencia Estatal ucraniano, hasta el 2 de octubre había en el país 375.792 desplazados internos y aquellos que han decidido volver a sus hogares "afrontan graves dificultades" por la "frágil situación de seguridad". "La previsible escasez de gas es particularmente preocupante por la llegada del invierno y con muchos desplazados internos viviendo en refugios temporales mal equipados", ha advertido.
COMBATIENTES EXTRANJEROS
El informe elaborado por la Misión de la ONU de Supervisión de Derechos Humanos en Ucrania, que abarca del 18 de agosto al 16 de septiembre, pone de manifiesto que del 24 de agosto al 5 de septiembre los milicianos separatistas prorrusos de Lugansk y Donetsk fueron reforzados con "combatientes extranjeros" que se cree que proceden de Rusia.
"Durante este periodo, el derecho internacional humanitario, incluidos los principios de necesidad militar, distinción, proporcionalidad y precaución han seguido siendo violados por grupos armados y algunas unidades y batallones de voluntarios bajo el control bajo control de las Fuerzas Armadas ucranianas", sostiene el documento, que asegura que ha habido enfrentamientos, bombardeos y combates.
"Los grupos armados continúan aterrorizando a la población en las zonas bajo su control, impulsando los asesinatos, los secuestros, las torturas, el maltrato y otros graves abusos de los Derechos Humanos, incluidas la destrucción de viviendas y la confiscación de propiedades", ha explicado la ONU en su informe. "Ha habido continuas acusaciones de violaciones de Derechos Humanos cometidas por algunos batallones de voluntarios bajo control gubernamental", ha subrayado.
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos ha señalado que del 24 de agosto al 5 de septiembre se ha registrado un claro incremento de las detenciones realizadas por grupos armados, con denuncias de torturas y maltrato a klos detenidos, incluidas prácticas como la violencia sexual y las ejecuciones simuladas. En este periodo, también ha habido informes sobre maltrato a detenidos por parte de las Fuerzas Armadas y la Policía ucranianas.
El Alto Comisionado Zeid ha hecho hincapié en que todos los abusos y violaciones del derecho internacional humanitario deben ser "escrupulósamente investigadas y perseguidas", incluido el "bombardeo indiscriminado de civiles, los asesinatos y las acusaciones de violencia sexual.
"Esto es un llamamiento a la justicia, no al castigo. Todas las partes deben garantizar que no hay represalias por supuesta colaboración o afiliación al bando contrario", ha subrayado. "Es crucial que las autoridades rebajen estas tensiones", ha concluido.
Al menos 3.660 personas han muerto y 8.756 han resultado heridas en el conflicto en el este de Ucrania desde mediados de abril hasta comienzos de septiembre, según datos recopilados por la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas, que ha asegurado que 331 de las víctimas mortales han fallecido después del último alto el fuego.
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Zeid Raad al Husein, ha advertido de que el conflicto sigue matando y dejando heridos a civiles y ha privado a cinco millones de personas que viven en las zonas afectadas por la violencia de sus derechos más básicos.
La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos ha asegurado que, aunque ha habido una "ausencia de acciones ofensivas a gran escala desde el alto el fuego anunciado el 5 de septiembre, "en algunas áreas el intercambio de disparos de artillería, carros de combate y armamento ligero ha continuado casi a diario". En concreto, asegura que ha seguido registrándose actividad armada en el aeropuerto de Donetsk, en la zona de Debaltseve en Donetsk y en la localidad de Shchastia, en Lugansk.
Desde mediados de abril de 2014 hasta el pasado 6 de octubre, la ONU ha contabilizado un total de 3.660 personas muertas y 8.756 heridos en el conflicto en el este de Ucrania. Entre el 6 de septiembre y el 6 de octubre, desde la entrada en vigor del alto el fuego, el número de muertos se sitúa en 331 personas aunque la ONU ha admitido que algunos de ellos podrían haber muerto antes.
PIDE RESPETO ALTO EL FUEGO
"Además de celebrar el alto el fuego para poner fin a los combates en el este de Ucrania, pido a todas las partes que lo respeten y lo mantengan y que dejen de atacar a los civiles y sus infraestructuras de una vez por todas", ha afirmado Zeid.
"Durante casi un año, los residentes de las zonas afectadas por el conflicto armado han estado privados de sus derechos fundamentales a la educación, al tratamiento sanitario adecuado, la vivienda y a las oportunidades de ganarse la vida. Una mayor prolongación de la crisis hará que la situación sea insostenible para millones de personas cuyas vidas ya han resultado gravemente afectadas", ha asegurado.
40.000 EMPRESAS CERRADAS POR EL CONFLICTO
Según los cálculos de la ONU, cerca de 40.000 pequeñas y medianas empresas en las regiones de Donetsk y Lugansk se han visto obligadas a cerrar sus puertas por los combates, lo que deja a miles de personas sin ingresos económicos.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha explicado que, según datos del Servicio de Emergencia Estatal ucraniano, hasta el 2 de octubre había en el país 375.792 desplazados internos y aquellos que han decidido volver a sus hogares "afrontan graves dificultades" por la "frágil situación de seguridad". "La previsible escasez de gas es particularmente preocupante por la llegada del invierno y con muchos desplazados internos viviendo en refugios temporales mal equipados", ha advertido.
COMBATIENTES EXTRANJEROS
El informe elaborado por la Misión de la ONU de Supervisión de Derechos Humanos en Ucrania, que abarca del 18 de agosto al 16 de septiembre, pone de manifiesto que del 24 de agosto al 5 de septiembre los milicianos separatistas prorrusos de Lugansk y Donetsk fueron reforzados con "combatientes extranjeros" que se cree que proceden de Rusia.
"Durante este periodo, el derecho internacional humanitario, incluidos los principios de necesidad militar, distinción, proporcionalidad y precaución han seguido siendo violados por grupos armados y algunas unidades y batallones de voluntarios bajo el control bajo control de las Fuerzas Armadas ucranianas", sostiene el documento, que asegura que ha habido enfrentamientos, bombardeos y combates.
"Los grupos armados continúan aterrorizando a la población en las zonas bajo su control, impulsando los asesinatos, los secuestros, las torturas, el maltrato y otros graves abusos de los Derechos Humanos, incluidas la destrucción de viviendas y la confiscación de propiedades", ha explicado la ONU en su informe. "Ha habido continuas acusaciones de violaciones de Derechos Humanos cometidas por algunos batallones de voluntarios bajo control gubernamental", ha subrayado.
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos ha señalado que del 24 de agosto al 5 de septiembre se ha registrado un claro incremento de las detenciones realizadas por grupos armados, con denuncias de torturas y maltrato a klos detenidos, incluidas prácticas como la violencia sexual y las ejecuciones simuladas. En este periodo, también ha habido informes sobre maltrato a detenidos por parte de las Fuerzas Armadas y la Policía ucranianas.
El Alto Comisionado Zeid ha hecho hincapié en que todos los abusos y violaciones del derecho internacional humanitario deben ser "escrupulósamente investigadas y perseguidas", incluido el "bombardeo indiscriminado de civiles, los asesinatos y las acusaciones de violencia sexual.
"Esto es un llamamiento a la justicia, no al castigo. Todas las partes deben garantizar que no hay represalias por supuesta colaboración o afiliación al bando contrario", ha subrayado. "Es crucial que las autoridades rebajen estas tensiones", ha concluido.