Aécio Neves acepta casi todas las propuestas de Marina Silva a cambio de sus votos
Río de Janeiro
El candidato opositor a la Presidencia de Brasil, Aécio Neves , aceptó hoy la mayoría de las propuestas formuladas por la ecologista Marina Silva , la tercera más votada el pasado domingo con casi 22 millones de votos, como condición para brindarle su apoyo en la segunda vuelta.
Neves asumió los compromisos ante miembros del Partido Socialista Brasileño (PSB), formación de Silva, en la ciudad de Recife, en el estado de Pernambuco, que es precisamente la capital donde la ecologista tuvo un mayor porcentaje de votos de todo el país, un 63,33 %.
Promesas de la nueva campaña
El documento leído por Neves incluye la protección a los indios, el mantenimiento de los programas sociales, el impulso de una reforma política y el "cuidado de la naturaleza", la principal bandera de Silva, quien todavía no se ha manifestado después del posicionamiento del candidato del PSDB.
Neves prometió expresamente mantener los programas de asistencia a los pobres desarrollados por el Gobierno de Rousseff , su rival en las urnas el próximo día 26, y transformarlos en "política de Estado".
Hay que impulsar la transición a una economía de bajo carbono y reducir a cero la deforestación en la Amazonía
Asimismo reiteró la promesa de acometer una reforma política y acabar con la reelección de los presidentes y de otros cargos públicos, aunque el documento no entró en detalles sobre estas propuestas.
En el terreno medioambiental, asumió como propio el objetivo de impulsar "la transición a una economía de bajo carbono" y reducir a "cero" la deforestación en la Amazonía, para lo que no estableció un plazo determinado.
Respondiendo a otra exigencia de Silva, Neves defendió que el Gobierno mantenga la prerrogativa de delimitar las tierras indígenas y prometió resolver los conflictos entre los pueblos nativos y los terratenientes que, según él, se intensificaron por culpa de la "negligencia" de Rousseff.
La única demanda de Silva que se dejó en el tintero es eliminar de su programa electoral la revisión del Código Penal, para poder juzgar como mayores de edad a jóvenes de 16 años que cometan "crímenes gravísimos", lo que supone uno de los emblemas de la campaña del opositor.
En cambio Neves prometió hoy buscar "soluciones generosas" para "alejar a los jóvenes de la violencia" y no encarar el problema "sólo bajo la óptica del castigo". En los últimos días, ante el silencio de Marina Silva, Neves advirtió que no "abdicaría" de los puntos "esenciales" que constituyen la "espina dorsal" de su programa.
El candidato del PSDB pidió la "unión" de toda la oposición e invitó a todos los partidos a que contribuyan a su causa sin necesidad de que renuncien a sus ideales. "Terminada la primera vuelta de las elecciones las urnas fueron claras: la mayoría del electorado, el 60 %, mostró el deseo del cambio", dijo Neves.
Destacar el legado de Campos
En su discurso, Neves destacó el "legado" de Eduardo Campos, candidato presidencial del PSB fallecido en un accidente aéreo el pasado 13 de agosto, y el "papel" de Silva "en la renovación de la política brasileña y en la afirmación del desarrollo sostenible".
Marina Silva, que obtuvo el 21,1 % de los votos en la primera vuelta, ha condicionado su apoyo a Neves para el próximo día 26 a que el candidato opositor acepte o no una serie de propuestas de su programa.
No obstante, el PSB ya ha manifestado su apoyo expreso a Neves, mientras que la Red Sustentabilidad, movimiento creado por Silva que está en trámites para convertirse en un partido político, sólo ha indicado a sus militantes que el próximo día 26 no voten a la actual mandataria, Dilma Rousseff.
En la primera vuelta del pasado domingo, Rousseff fue la más votada, con el 41,59 % de los sufragios, y Neves también pasó a la segunda vuelta, con el 33,55 %. Según las primeras encuestas de intención de voto para la segunda vuelta, los dos candidatos están técnicamente empatados, con sólo dos puntos de ventaja para el opositor.
