Estado Islámico decapita a 2do soldado libanés
Beirut, AP
La madre de un soldado libanés secuestrado por el grupo extremista Estado Islámico dijo que parecen ser genuinas unas fotografías subidas el sábado en internet y que parecen mostrar la decapitación de su hijo.
Zeinab Noun dijo que su hijo de 20 años, Abás Medlej, fue "sacrificado" luego que el Estado Islámico publicó fotos que parecen mostrar a un soldado libanés antes y después de ser decapitado.
"Mi hijo fue sacrificado", dijo Noun, mostrando una foto tamaño de pasaporte de su joven hijo.
El tío materno de Medlej, Abu Alí Noun, dijo también que las fotos parecen mostrar a su sobrino. Un portavoz del ejército libanés dijo que el incidente está siendo investigado.
Medlej sería el segundo soldado cautivo libanés en ser decapitado por el Estado Islámico, lo que resalta los graves retos que enfrenta el mal equipado ejército libanés mientras trata de repeler la amenaza yihadi de extremistas basados en Siria.
Alrededor de una veintena de elementos de las fuerzas de seguridad del país siguen cautivos en manos de los militantes. Fueron capturados en agosto cuando varios grupos, incluyendo el Estado Islámico y el Frente Nusra, se apoderaron de un pueblo fronterizo libanés matando y secuestrando a soldados y policías.
Familiares de los cautivos han bloqueado carreteras y realizado manifestaciones para presionar al gobierno libanés a negociar con las milicias.
La prensa local ha reportado que hay negociaciones en curso y que los extremistas están exigiendo dinero y la libertad de islamistas detenidos en Líbano. Una declaración publicada en internet por partidarios del estado Islámico señala que Medlej fue ejecutado después de que trató de escapar.
Medlej provenía de un clan chií de la ciudad oriental libanesa de Baalbak.
Los soldados y policías libaneses capturados son de diversas sectas religiosas libanesas: el primer soldado decapitado, Ali Sayid, era un musulmán suní. Los extremistas tienen cautivos también a soldados cristianos y otros suníes.
El Estado Islámico ha atraído atención mundial particularmente desde junio, cuando tomó control rápidamente de vastas áreas en el norte y el oeste de Irak desde sus bastiones en Siria.
Sigue una violenta interpretación del islam y ha sido acusado por grupos de derechos humanos y la ONU de cometer crímenes de guerra, incluyendo masacres de soldados, chiítas y seguidores de la ancestral fe Yazidi, en Irak. Ha decapitado también a dos periodistas estadounidenses secuestrados, Steven Sotloff y James Foley.
La madre de un soldado libanés secuestrado por el grupo extremista Estado Islámico dijo que parecen ser genuinas unas fotografías subidas el sábado en internet y que parecen mostrar la decapitación de su hijo.
Zeinab Noun dijo que su hijo de 20 años, Abás Medlej, fue "sacrificado" luego que el Estado Islámico publicó fotos que parecen mostrar a un soldado libanés antes y después de ser decapitado.
"Mi hijo fue sacrificado", dijo Noun, mostrando una foto tamaño de pasaporte de su joven hijo.
El tío materno de Medlej, Abu Alí Noun, dijo también que las fotos parecen mostrar a su sobrino. Un portavoz del ejército libanés dijo que el incidente está siendo investigado.
Medlej sería el segundo soldado cautivo libanés en ser decapitado por el Estado Islámico, lo que resalta los graves retos que enfrenta el mal equipado ejército libanés mientras trata de repeler la amenaza yihadi de extremistas basados en Siria.
Alrededor de una veintena de elementos de las fuerzas de seguridad del país siguen cautivos en manos de los militantes. Fueron capturados en agosto cuando varios grupos, incluyendo el Estado Islámico y el Frente Nusra, se apoderaron de un pueblo fronterizo libanés matando y secuestrando a soldados y policías.
Familiares de los cautivos han bloqueado carreteras y realizado manifestaciones para presionar al gobierno libanés a negociar con las milicias.
La prensa local ha reportado que hay negociaciones en curso y que los extremistas están exigiendo dinero y la libertad de islamistas detenidos en Líbano. Una declaración publicada en internet por partidarios del estado Islámico señala que Medlej fue ejecutado después de que trató de escapar.
Medlej provenía de un clan chií de la ciudad oriental libanesa de Baalbak.
Los soldados y policías libaneses capturados son de diversas sectas religiosas libanesas: el primer soldado decapitado, Ali Sayid, era un musulmán suní. Los extremistas tienen cautivos también a soldados cristianos y otros suníes.
El Estado Islámico ha atraído atención mundial particularmente desde junio, cuando tomó control rápidamente de vastas áreas en el norte y el oeste de Irak desde sus bastiones en Siria.
Sigue una violenta interpretación del islam y ha sido acusado por grupos de derechos humanos y la ONU de cometer crímenes de guerra, incluyendo masacres de soldados, chiítas y seguidores de la ancestral fe Yazidi, en Irak. Ha decapitado también a dos periodistas estadounidenses secuestrados, Steven Sotloff y James Foley.
