El gobierno argentino se declara a favor de la “no criminalización del consumidor” de drogas
Buenos Aires, Dpa
El jefe de Gabinete argentino, Jorge Capitanich, respaldó hoy el proyecto de ley oficialista a favor de la despenalización del consumo de drogas, que generó controversia y recibió críticas desde la oposición y sectores eclesiásticos.
La iniciativa es impulsada por el secretario de Programación para la Prevención de la Drogadicción (Sedronar), el sacerdote Juan Carlos Molina, quien llamó a “no criminalizar el consumo”.
“Ratifico lo que ha dicho el padre Juan Carlos Molina”, declaró hoy Capitanich, quien planteó que la “no criminalización” del consumo personal de drogas está vinculada con “una política muy activa para garantizar inclusión” y “resolver los problemas desde una mirada omnicomprensiva del Estado”.
“Tiene que ver con ver a nuestro hermano, ver a aquel que padece un problema de adicción, tanto de alcoholismo como el uso de estupefacientes”, explicó.
Molina anunció que trabaja en cuatro proyectos de ley entre los que se encuentra la iniciativa para reformar los artículos de la Ley 23.737 que penalizan el consumo personal de estupefacientes.
“Yo habilitaría el consumo de todo y abriría centros (de contención y asistencia para adictos) pero estamos hablando de la no criminalización. Hay que legalizar lo que hoy es ley, una ley de hecho”, declaró el titular del organismo.
“Una cosa es la despenalización o la legalización. Nosotros preferimos hablar de la no criminalización del consumidor. No se trata de no perseguir más el narcotráfico ni al dealer, sino que exista una ley que no habilite a detener el consumidor”, declaró Molina al diario “Página/12″.
“El problema no es el consumidor, es el narcotraficante. Eso no quiere decir que aliente el consumo, que si es adictivo debe ser tratado. Pero desde la salud y no desde la penalidad, que no lo va a solucionar”, señaló.
El cura José María di Paola, conocido como padre “Pepe” por su lucha contra el consumo de “paco” en los barrios humildes, expresó su rechazo a la iniciativa oficial.
“No estoy de acuerdo con la despenalización y el papa tampoco”, sostuvo el sacerdote, de estrecha llegada al argentino Jorge Bergoglio.
“Me parece que no tienen que ver con lo que nosotros estamos viviendo y trabajando día a día. El tema acá no es si la despenalización está bien o está mal. En este momento, plantearlo está mal. No somos un país pequeño. No somos Holanda, no somos Uruguay. Somos un país que tiene grandes sectores excluidos, entonces hablar en este caso de despenalización en inadecuado”, consideró el cura en declaraciones a radio Vorterix.
La iniciativa también fue cuestionada por el partido de centroderecha PRO y el Frente Renovador, mientras que el Frente Amplio UNEN, de centroizquierda, aguardará a conocer el detalle del proyecto para emitir opinión.
El jefe de Gabinete argentino, Jorge Capitanich, respaldó hoy el proyecto de ley oficialista a favor de la despenalización del consumo de drogas, que generó controversia y recibió críticas desde la oposición y sectores eclesiásticos.
La iniciativa es impulsada por el secretario de Programación para la Prevención de la Drogadicción (Sedronar), el sacerdote Juan Carlos Molina, quien llamó a “no criminalizar el consumo”.
“Ratifico lo que ha dicho el padre Juan Carlos Molina”, declaró hoy Capitanich, quien planteó que la “no criminalización” del consumo personal de drogas está vinculada con “una política muy activa para garantizar inclusión” y “resolver los problemas desde una mirada omnicomprensiva del Estado”.
“Tiene que ver con ver a nuestro hermano, ver a aquel que padece un problema de adicción, tanto de alcoholismo como el uso de estupefacientes”, explicó.
Molina anunció que trabaja en cuatro proyectos de ley entre los que se encuentra la iniciativa para reformar los artículos de la Ley 23.737 que penalizan el consumo personal de estupefacientes.
“Yo habilitaría el consumo de todo y abriría centros (de contención y asistencia para adictos) pero estamos hablando de la no criminalización. Hay que legalizar lo que hoy es ley, una ley de hecho”, declaró el titular del organismo.
“Una cosa es la despenalización o la legalización. Nosotros preferimos hablar de la no criminalización del consumidor. No se trata de no perseguir más el narcotráfico ni al dealer, sino que exista una ley que no habilite a detener el consumidor”, declaró Molina al diario “Página/12″.
“El problema no es el consumidor, es el narcotraficante. Eso no quiere decir que aliente el consumo, que si es adictivo debe ser tratado. Pero desde la salud y no desde la penalidad, que no lo va a solucionar”, señaló.
El cura José María di Paola, conocido como padre “Pepe” por su lucha contra el consumo de “paco” en los barrios humildes, expresó su rechazo a la iniciativa oficial.
“No estoy de acuerdo con la despenalización y el papa tampoco”, sostuvo el sacerdote, de estrecha llegada al argentino Jorge Bergoglio.
“Me parece que no tienen que ver con lo que nosotros estamos viviendo y trabajando día a día. El tema acá no es si la despenalización está bien o está mal. En este momento, plantearlo está mal. No somos un país pequeño. No somos Holanda, no somos Uruguay. Somos un país que tiene grandes sectores excluidos, entonces hablar en este caso de despenalización en inadecuado”, consideró el cura en declaraciones a radio Vorterix.
La iniciativa también fue cuestionada por el partido de centroderecha PRO y el Frente Renovador, mientras que el Frente Amplio UNEN, de centroizquierda, aguardará a conocer el detalle del proyecto para emitir opinión.