La ONU vaticina 15 años de miseria en Gaza si no se levanta el bloqueo
Las delegaciones de Israel y Palestina continúan en El Cairo tras la extensión de la tregua
Belén Domínguez Cebrián
Madrid, El País
"A no ser que las negociaciones para terminar la ofensiva en Gaza desemboquen en el levantamiento del bloqueo, la situación de los ciudadanos de la Franja no mejorará en los próximos 15 años", ha afirmado este martes en un comunicado la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA, por sus siglas en inglés). El levantamiento del bloqueo económico que sufre la Franja desde 2007 es precisamente el punto clave en el diálogo entre israelíes y palestinos que se han llevado a cabo en El Cairo, tradicional mediador entre ambas partes. Este mismo martes a las 23.00 (hora peninsular española) termina la última tregua del conflicto que se ha cobrado ya 1.973 vidas del lado palestino (2.016, según el Ministerio de Salud de la Franja) y 67 del lado israelí, según datos de la ONU. "La situación no se puede mantener", afirma Pierre Krahenbuhl, jefe de la UNRWA, desde su oficina en Jerusalén.
Las negociaciones, que comenzaron hace varias semanas de manera indirecta, intentan poner fin a los combates en la Franja que comenzaron el pasado 8 de julio. Uno de los puntos clave para que Hamás, grupo islamista que controla Gaza, anuncie un alto el fuego permanente y deje las armas es el levantamiento del bloqueo que tanto Egipto como Israel impusieron sobre la Franja palestina hace ya siete años, cuando el grupo se hizo con el Gobierno en Gaza. Krahenbuhl, en una situación donde "ya no hay nada que perder", se muestra optimista pocas horas antes del fin de la tregua.
Tanto Israel como Egipto han mostrado su disposición a suavizar el bloqueo siempre y cuando la Autoridad Palestina, liderada por Mahmud Abbas, administre la situación. Israel, sin embargo, se muestra mucho más cauteloso a la hora de levantar levemente las restricciones fronterizas (el paso de Erez continúa cerrado excepto para la ayuda humanitaria) puesto que aseguran que los materiales de construcción que entran en la Franja son utilizados por Hamás y su brazo armado —las Brigadas Izzedim al Qassam— para construir túneles y atacar el territorio israelí. El jefe de la UNRWA hace hincapié en la colaboración israelí a la hora de abrir el paso de Erez a los "aproximadamente 200 camiones diarios" de ayuda humanitaria. "Pero la mayor preocupación es ver qué va a pasar con los materiales de construcción", insiste.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró al comenzar la operación Margen Protector sobre la Franja, que el objetivo principal era "neutralizar los túneles que utilizan los terroristas para atacar Israel". Las Fuerzas de Seguridad israelíes confirman haber destruido al menos una treintena de túneles de los cuales 14 desembocaban directamente en su territorio.
El bloqueo, que impide la entrada de materiales de construcción y otros bienes, implica la imposibilidad de un desarrollo económico en la Franja, afirma la ONU en el comunicado. "La cuestión es si este alto el fuego nos devolverá a una vida como la de antes, bajo el bloqueo", declaró Pierre Krahenbuhl en una entrevista a la agencia Reuters en la que añade que "si ese es el caso, la reconstrucción llevará años y años". La organización multinacional ya avisó en un informe publicado en agosto de 2012 que, bajo las circunstancias del bloqueo, Gaza será un lugar inhabitable en 2020.
"Me llama la atención la magnitud de la destrucción en una escala sin precedentes en Gaza en los últimos tiempos", afirma Krahenbuhl. "En el año 2000 [antes del bloqueo], 80.000 gazatíes recibían ayuda de la ONU" explica por teléfono. "Antes del conflicto eran 830.000 personas y hoy, 1.100.000", añade.
Krahenbuhl estima que el coste de la reconstrucción será de "miles de millones" (casi 8.000 millones de euros) para arreglar las carreteras, casas, puentes y otras infraestructuras que han sido derribadas por los ataques por tierra, mar y aire del Ejército israelí. El jefe de la UNRWA matizó, sin embargo, que "la prioridad es atender a la población desplazada" que estima en 425.000 de los 1,8 millones de habitantes que viven en la Franja.
La ONU resalta la dificultad de reconstruir Gaza sin los equipos necesarios, materiales de construcción y otros bienes que tendrían que atravesar los pasos fronterizos de Israel y Egipto. "Gaza debe tener su libertad; libertad de acceso, libertad de movimiento, libertad de importación y exportación, la libertad de la dependencia de la ayuda", defiende Krahenbuhl.
Belén Domínguez Cebrián
Madrid, El País
"A no ser que las negociaciones para terminar la ofensiva en Gaza desemboquen en el levantamiento del bloqueo, la situación de los ciudadanos de la Franja no mejorará en los próximos 15 años", ha afirmado este martes en un comunicado la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA, por sus siglas en inglés). El levantamiento del bloqueo económico que sufre la Franja desde 2007 es precisamente el punto clave en el diálogo entre israelíes y palestinos que se han llevado a cabo en El Cairo, tradicional mediador entre ambas partes. Este mismo martes a las 23.00 (hora peninsular española) termina la última tregua del conflicto que se ha cobrado ya 1.973 vidas del lado palestino (2.016, según el Ministerio de Salud de la Franja) y 67 del lado israelí, según datos de la ONU. "La situación no se puede mantener", afirma Pierre Krahenbuhl, jefe de la UNRWA, desde su oficina en Jerusalén.
Las negociaciones, que comenzaron hace varias semanas de manera indirecta, intentan poner fin a los combates en la Franja que comenzaron el pasado 8 de julio. Uno de los puntos clave para que Hamás, grupo islamista que controla Gaza, anuncie un alto el fuego permanente y deje las armas es el levantamiento del bloqueo que tanto Egipto como Israel impusieron sobre la Franja palestina hace ya siete años, cuando el grupo se hizo con el Gobierno en Gaza. Krahenbuhl, en una situación donde "ya no hay nada que perder", se muestra optimista pocas horas antes del fin de la tregua.
Tanto Israel como Egipto han mostrado su disposición a suavizar el bloqueo siempre y cuando la Autoridad Palestina, liderada por Mahmud Abbas, administre la situación. Israel, sin embargo, se muestra mucho más cauteloso a la hora de levantar levemente las restricciones fronterizas (el paso de Erez continúa cerrado excepto para la ayuda humanitaria) puesto que aseguran que los materiales de construcción que entran en la Franja son utilizados por Hamás y su brazo armado —las Brigadas Izzedim al Qassam— para construir túneles y atacar el territorio israelí. El jefe de la UNRWA hace hincapié en la colaboración israelí a la hora de abrir el paso de Erez a los "aproximadamente 200 camiones diarios" de ayuda humanitaria. "Pero la mayor preocupación es ver qué va a pasar con los materiales de construcción", insiste.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró al comenzar la operación Margen Protector sobre la Franja, que el objetivo principal era "neutralizar los túneles que utilizan los terroristas para atacar Israel". Las Fuerzas de Seguridad israelíes confirman haber destruido al menos una treintena de túneles de los cuales 14 desembocaban directamente en su territorio.
El bloqueo, que impide la entrada de materiales de construcción y otros bienes, implica la imposibilidad de un desarrollo económico en la Franja, afirma la ONU en el comunicado. "La cuestión es si este alto el fuego nos devolverá a una vida como la de antes, bajo el bloqueo", declaró Pierre Krahenbuhl en una entrevista a la agencia Reuters en la que añade que "si ese es el caso, la reconstrucción llevará años y años". La organización multinacional ya avisó en un informe publicado en agosto de 2012 que, bajo las circunstancias del bloqueo, Gaza será un lugar inhabitable en 2020.
"Me llama la atención la magnitud de la destrucción en una escala sin precedentes en Gaza en los últimos tiempos", afirma Krahenbuhl. "En el año 2000 [antes del bloqueo], 80.000 gazatíes recibían ayuda de la ONU" explica por teléfono. "Antes del conflicto eran 830.000 personas y hoy, 1.100.000", añade.
Krahenbuhl estima que el coste de la reconstrucción será de "miles de millones" (casi 8.000 millones de euros) para arreglar las carreteras, casas, puentes y otras infraestructuras que han sido derribadas por los ataques por tierra, mar y aire del Ejército israelí. El jefe de la UNRWA matizó, sin embargo, que "la prioridad es atender a la población desplazada" que estima en 425.000 de los 1,8 millones de habitantes que viven en la Franja.
La ONU resalta la dificultad de reconstruir Gaza sin los equipos necesarios, materiales de construcción y otros bienes que tendrían que atravesar los pasos fronterizos de Israel y Egipto. "Gaza debe tener su libertad; libertad de acceso, libertad de movimiento, libertad de importación y exportación, la libertad de la dependencia de la ayuda", defiende Krahenbuhl.