A Casillas le sobran los tres últimos minutos

Madrid, AFP
Iker Casillas sigue sin perder un derbi ante el Atlético como titular de la portería del Real Madrid. El capitán merengue suma ya 28 enfrentamientos contra el archirrival esquivando la derrota, aunque no lo pudo celebrar con un triunfo que vio esfumarse en el último suspiro. El de Móstoles se mostró lento a la hora de reaccionar en el gol de Raúl García en el minuto 87. Un fallo en cadena de la defensa merengue terminó dando un valioso empate a los de Simeone en la ida de la Supercopa de España disputada en el Bernabéu.


Casillas, ensalzado por uno y denostado por otros, parecía haber dejado en el olvido su mal partido frente a los de Simeone en la pasada final de la Champions en Lisboa, pero Raúl García le hizo revivir viejos fantasmas al batirle con un remate dentro de un área pequeña también muy mal defendida por los zagueros merengues, a quien su capitán les recriminó con gestos notorios su total falta de atención. Iker, sin embargo, vuelve a reavivar el 'eterno' debate de la portería merengue.

Con su buena actuación ante el Sevilla en la Supercopa de Europa, con tres intervenciones de gran nivel, Iker se desquitó de sus decepcionantes actuaciones tanto en la final de la Champions como durante el Mundial de Brasil. A Casillas le sobraron los tres últimos minutos del duelo contra los colchoneros y quién sabe si en la vuelta en el Calderón, Keylor Navas será el titular de la portería merengue.

Con el meta costarricense apretando al máximo desde la suplencia, Casillas fue de nuevo examinado con lupa ante el Atlético. Todas las miradas volvía a estar puestas en él. El de Móstoles tuvo poco trabajo en este primer 'Superderbi' de la temporada. Se defendió bien ante los primeros disparos de Mandzukic y Saúl en el primer cuarto de hora de partido. Tuvo problemas con Godín en un balón alto, pero blocó bien el remate posterior de Mandzukic.

Poco antes de encajar el tanto de Raúl García, Iker desvió providencialmente a córner un trallazo de Koke. Casillas también había dejado unos segundos sin respiración al público del Bernabéu después de un comprometido recorte ante el croata Mandzukic. Al final, Iker salió del coliseo merengue lamentándose por un gol que no parece que le vaya a dejar fuera de la vuelta del próximo viernes en el Calderón. Ancelotti le eximió en su rueda de prensa de toda culpa en el tanto de Raúl García, una jugada que, según el italiano, estuvo mal defendida en el primer palo.



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