Transportan a Holanda a víctimas de avión malasio
Hrabove, AP
Dos aviones de carga transportaron otros 38 féretros con víctimas del desastre aéreo de Malaysia Airlines a un centro forense en Holanda para su identificación e investigación.
Los aviones despegaron el sábado de Járkiv, una ciudad controlada por el gobierno central, donde fueron trasladados los cadáveres desde el lugar donde cayó el avión en territorio controlado por separatistas pro rusos. Funcionarios de Estados Unidos y Ucrania dicen que el avión fue derribado por un misil disparado desde territorio rebelde, probablemente por error.
Las autoridades dijeron que los vuelos se llevaron a la última de las víctimas que habían sido traídas a Járkiv. Los observadores internacionales sostienen que todavía hay restos humanos en el lugar del derribamiento. El acceso al lugar ha sido limitado debido a interferencias de los rebeldes y preocupaciones por la seguridad.
Por otra parte, los padres de una mujer que murió en el vuelo 17 de la aerolínea malasia viajaron desde Perth, Australia, para conmemorar a su hija en el lugar del hecho en el este de Ucrania.
Jerzy Dyczynski y Angela Rudhart-Dyczynski, padres de Fátima, de 25 años, entraron en territorio ocupado por los rebeldes hasta los campos donde cayó el avión en las afueras del pueblo de Hrabove. Las 298 personas que iban a bordo murieron.
El último contacto que tuvieron con su hija fue cuando abordó el avión en Ámsterdam, con destino a Kuala Lumpur, el 17 de julio.
Dos aviones de carga transportaron otros 38 féretros con víctimas del desastre aéreo de Malaysia Airlines a un centro forense en Holanda para su identificación e investigación.
Los aviones despegaron el sábado de Járkiv, una ciudad controlada por el gobierno central, donde fueron trasladados los cadáveres desde el lugar donde cayó el avión en territorio controlado por separatistas pro rusos. Funcionarios de Estados Unidos y Ucrania dicen que el avión fue derribado por un misil disparado desde territorio rebelde, probablemente por error.
Las autoridades dijeron que los vuelos se llevaron a la última de las víctimas que habían sido traídas a Járkiv. Los observadores internacionales sostienen que todavía hay restos humanos en el lugar del derribamiento. El acceso al lugar ha sido limitado debido a interferencias de los rebeldes y preocupaciones por la seguridad.
Por otra parte, los padres de una mujer que murió en el vuelo 17 de la aerolínea malasia viajaron desde Perth, Australia, para conmemorar a su hija en el lugar del hecho en el este de Ucrania.
Jerzy Dyczynski y Angela Rudhart-Dyczynski, padres de Fátima, de 25 años, entraron en territorio ocupado por los rebeldes hasta los campos donde cayó el avión en las afueras del pueblo de Hrabove. Las 298 personas que iban a bordo murieron.
El último contacto que tuvieron con su hija fue cuando abordó el avión en Ámsterdam, con destino a Kuala Lumpur, el 17 de julio.