Egipto: Muere joven en choques durante protestas
El Cairo, AP
Un adolescente egipcio murió el viernes durante los enfrentamientos entre partidarios del depuesto presidente Mohamed Morsi y fuerzas del gobierno, informó un funcionario de seguridad, elevando a dos el número de muertes durante dos días de violentas protestas en el aniversario del derrocamiento del mandatario islamista.
Los choques en las calles pusieron fin a una semana de actos violentos que incluyeron explosiones pequeñas en la capital y otras ciudades, si bien la Hermandad Musulmana de Morsi y sus seguidores no lograron atraer a las calles una gran cantidad de manifestantes después de un operativo contra los islamistas que dejó cientos de muertos y al menos 22.000 personas detenidas, entre ellas la mayoría de los líderes de alto rango del grupo.
La policía cercó la Plaza Tahrir, que ha fungido como centro de las protestas desde un levantamiento multitudinario que derrocó al autócrata Hosni Mubarak en 2011, y otras plazas por varias horas el viernes para evitar congregaciones masivas. Aun así, decenas de manifestantes a favor de Morsi se reunieron en El Cairo y otras ciudades.
El joven de 15 años murió al recibir un impacto de perdigones durante una protesta en el distrito Zeitoun de El Cairo, indicó un funcionario de seguridad que habló a condición de mantener el anonimato porque no tenía autorización para brindar información. Se desconoce si el joven era un manifestante o un transeúnte.
Otro manifestante resultó seriamente herido por disparos durante una marcha en otra zona de la capital, agregó el funcionario. Mohamed Sultán, funcionario del Ministerio de Salud, dijo que 12 personas fueron lesionadas.
En una protesta en Guiza, ciudad aledaña a El Cairo, los disturbios iniciaron después del funeral realizado en una mezquita para un manifestante que fue muerto en los choques del jueves, dijeron testigos. Los dolientes empezaron a lanzar consignas mientras abandonaban la mezquita y marchaban en protesta en el distrito Haram de Guiza, pero fueron dispersados por la policía con gas lacrimógeno.
Un adolescente egipcio murió el viernes durante los enfrentamientos entre partidarios del depuesto presidente Mohamed Morsi y fuerzas del gobierno, informó un funcionario de seguridad, elevando a dos el número de muertes durante dos días de violentas protestas en el aniversario del derrocamiento del mandatario islamista.
Los choques en las calles pusieron fin a una semana de actos violentos que incluyeron explosiones pequeñas en la capital y otras ciudades, si bien la Hermandad Musulmana de Morsi y sus seguidores no lograron atraer a las calles una gran cantidad de manifestantes después de un operativo contra los islamistas que dejó cientos de muertos y al menos 22.000 personas detenidas, entre ellas la mayoría de los líderes de alto rango del grupo.
La policía cercó la Plaza Tahrir, que ha fungido como centro de las protestas desde un levantamiento multitudinario que derrocó al autócrata Hosni Mubarak en 2011, y otras plazas por varias horas el viernes para evitar congregaciones masivas. Aun así, decenas de manifestantes a favor de Morsi se reunieron en El Cairo y otras ciudades.
El joven de 15 años murió al recibir un impacto de perdigones durante una protesta en el distrito Zeitoun de El Cairo, indicó un funcionario de seguridad que habló a condición de mantener el anonimato porque no tenía autorización para brindar información. Se desconoce si el joven era un manifestante o un transeúnte.
Otro manifestante resultó seriamente herido por disparos durante una marcha en otra zona de la capital, agregó el funcionario. Mohamed Sultán, funcionario del Ministerio de Salud, dijo que 12 personas fueron lesionadas.
En una protesta en Guiza, ciudad aledaña a El Cairo, los disturbios iniciaron después del funeral realizado en una mezquita para un manifestante que fue muerto en los choques del jueves, dijeron testigos. Los dolientes empezaron a lanzar consignas mientras abandonaban la mezquita y marchaban en protesta en el distrito Haram de Guiza, pero fueron dispersados por la policía con gas lacrimógeno.