EEUU necesita "hacer lo correcto" por niños inmigrantes: funcionario

Washington, Reuters
Un alto funcionario estadounidense dijo el domingo que la frontera de Estados Unidos no está abierta para la entrada ilegal al país, pero admitió que el Gobierno necesita ser sensible ante la decena de miles de niños inmigrantes que ingresan a centros de detención.


Desde octubre del 2013, más de 52.000 menores procedentes de Guatemala, El Salvador y Honduras y que viajaban sin compañía de adultos han sido sorprendidos tratando de entrar por la frontera entre México y Estados Unidos, el doble que en el mismo período del año pasado.

Miles más han sido detenidos cuando viajaban en compañía de sus padres u otros adultos.

"Tenemos que hacer las cosas bien por los niños, pero al final del día, nuestra frontera no está abierta a la inmigración ilegal y vamos a contener el flujo", declaró el domingo el secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jeh Johnson, en el programa "Meet the Press" de NBC.

Johnson dijo que el Gobierno administra los procedimientos de deportación de inmigrantes ilegales capturados en la frontera, incluyendo a niños, pero agregó que las autoridades están buscando el modo de ser más flexibles con los menores detenidos.

"Estamos buscando formas de crear opciones adicionales para lidiar con los niños, en particular, que sea consistente con nuestras leyes y valores", comentó Johnson.

El funcionario reiteró la postura anunciada por el presidente Barack Obama la semana pasada respecto a que adoptará acciones ejecutivas para reformular al sistema de inmigración estadounidense.

"Hay varias cosas que el presidente y yo, dentro de los confines de la ley vigente, podemos hacer para arreglar al descompuesto sistema de inmigración. Si el Congreso no actúa, lo haremos nosotros", aseguró.

En el programa del domingo, Johnson no respondió a la pregunta sobre si el Gobierno deportará a la ola actual de niños procedentes de Centroamérica y sólo dijo que las autoridades estadounidenses contendrán el flujo.

Funcionarios de inmigración estadounidenses afirman que la crisis se debe a una mezcla de extrema pobreza, bandas y violencia vinculada al narcotráfico en Centroamérica, así como también a rumores propagados por contrabandistas de humanos respecto a que los niños que lleguen a la frontera de Estados Unidos son autorizados a quedarse.

Los críticos sostienen que el Gobierno de Obama no ha actuado lo suficientemente rápido como para abordar el problema.

Entradas populares