Roland Garros: Djokovic superó a Raonic y espera por Gulbis en semis
París, EFE
Con mucho oficio, Novak Djokovic dejó en el camino a Milos Raonic y se instaló en semifinales de Roland Garros por cuarto año consecutivo. El serbio se impuso por 7-5, 7-6 (5) y 6-4, desarticulando los 21 aces del canadiense y prevaleciendo en los momentos calientes del partido. Su último obstáculo de cara a la final será el letón Ernests Gulbis, que arrasó con Tomas Berdych por 6-3, 6-2 y 6-4 y alcanzó su mejor marca en un Grand Slam, catapultándose además al Top 10 por primera vez en su carrera (salvo que Gael Monfils se haga con el título).
Djokovic fue mucho más regular en las dos horas y 22 minutos de partido. Parejos en tiros ganadores a fuerza de los aces de Raonic, el serbio registró la mitad de errores no forzados (19 contra 40), tuvo el control en los peloteos y subió con mayor criterio a la red.
Pero la diferencia se evidenció desde el servicio. Porque si bien el canadiense se hizo fuerte con una veintena de saques directos, cuando no logró poner el primero en cancha la pasó mal: solo 10 puntos sobre 34 ganó con el segundo, mientras que Djokovic no varió los porcentajes (75% y 74%, respectivamente).
Por eso Raonic tuvo apenas dos puntos de quiebre en todo el partido, contra nueve de su rival. Aunque la historia bien podría haber sido otra si el norteamericano hubiese aprovechado el primero del encuentro, cuando Djokovic sacaba 3-3 en el set inicial.
Una mala devolución del canadiense frustró la chance y ya no habría otra ventana semejante en todo el partido. El que pegó luego fue Djokovic, forzó un set point desde el servicio de Raonic en 4-5 y si bien allí no pudo con los saques ganadores del nacido en Montenegro, era un anuncio de su búsqueda.
En el siguiente game de servicio de Raonic, Djokovic volvió a gestarse su chance con un enorme revés paralelo y supo desacomodar una apurada subida a la red de su oponente para cerrar la primera manga por 7-5.
En el segundo parcial, ambos transitaron sin peligro de quiebres y casi por inercia la acción llevó rápido a un desempate. Allí la tendencia se prolongó sin minibreaks durante los primeros nueve puntos. Con Raonic sirviendo 4-5, Djokovic volvió a pisar el acelerador y tuvo premio: defensa frustrada del canadiense, 6-4 para el serbio y dos puntos de set, uno seguro con su saque.
Y así fue: desaprovechada la primera opción, Djokovic se apuntó un saque ganador y desniveló decisivamente el partido. Porque el tercer set se resolvió muy rápido. Pese a la reacción de Raonic en el cierre, cuando logró su primer y único break en el encuentro. El final estaba escrito desde antes...
Con ventaja inicial de 3-0 (dos quiebres), Djokovic no pasó mayores sobresaltos camino a la victoria, pese a lo dicho: cedió por primera vez su saque y sirviendo para partido. Pero de inmediato le llegó la segunda oportunidad y no falló.
En semifinales, entonces, el N°2 del mundo (será N°1 si Rafael Nadal no gana el torneo) se verá con una de las grandes sorpresas del torneo: Gulbis. Lo que llama la atención en el letón no es su nivel ni los rivales a los que se impuso, sino la regularidad mostrada en un torneo grande. Sirva la estadística: desde 2008 que no alcanzaba la segunda semana en un Grand Slam.
Esta vez, Gulbis se deshizo de Berdych en sets corridos con 10 aces, un 81% de puntos ganados desde el primer saque, 31 tiros ganadores (contra 17 del checo), 4/4 en pelotas definidas en la red y cinco quiebres de servicio sobre ocho oportunidades.
Berdych debió jugar una de cada dos pelotas con su segundo saque y allí cedió 22 de 39 puntos. En los intercambios, el checo falló más de la cuenta con su derecha (16 de sus 25 errores no forzados llegaron desde ese golpe) y no pudo inquietar a un Gulbis que por fin se va afianzando entre los mejores.
Partidos - 03/06 - Cuartos de final
[2] Novak Djokovic (SRB) a [8] Milos Raonic (CAN) por 7-5, 7-6 (5) y 6-2
[18] Ernests Gulbis (LAT) a [6] Tomas Berdych (CZE) por 6-3, 6-2 y 6-4
Con mucho oficio, Novak Djokovic dejó en el camino a Milos Raonic y se instaló en semifinales de Roland Garros por cuarto año consecutivo. El serbio se impuso por 7-5, 7-6 (5) y 6-4, desarticulando los 21 aces del canadiense y prevaleciendo en los momentos calientes del partido. Su último obstáculo de cara a la final será el letón Ernests Gulbis, que arrasó con Tomas Berdych por 6-3, 6-2 y 6-4 y alcanzó su mejor marca en un Grand Slam, catapultándose además al Top 10 por primera vez en su carrera (salvo que Gael Monfils se haga con el título).
Djokovic fue mucho más regular en las dos horas y 22 minutos de partido. Parejos en tiros ganadores a fuerza de los aces de Raonic, el serbio registró la mitad de errores no forzados (19 contra 40), tuvo el control en los peloteos y subió con mayor criterio a la red.
Pero la diferencia se evidenció desde el servicio. Porque si bien el canadiense se hizo fuerte con una veintena de saques directos, cuando no logró poner el primero en cancha la pasó mal: solo 10 puntos sobre 34 ganó con el segundo, mientras que Djokovic no varió los porcentajes (75% y 74%, respectivamente).
Por eso Raonic tuvo apenas dos puntos de quiebre en todo el partido, contra nueve de su rival. Aunque la historia bien podría haber sido otra si el norteamericano hubiese aprovechado el primero del encuentro, cuando Djokovic sacaba 3-3 en el set inicial.
Una mala devolución del canadiense frustró la chance y ya no habría otra ventana semejante en todo el partido. El que pegó luego fue Djokovic, forzó un set point desde el servicio de Raonic en 4-5 y si bien allí no pudo con los saques ganadores del nacido en Montenegro, era un anuncio de su búsqueda.
En el siguiente game de servicio de Raonic, Djokovic volvió a gestarse su chance con un enorme revés paralelo y supo desacomodar una apurada subida a la red de su oponente para cerrar la primera manga por 7-5.
En el segundo parcial, ambos transitaron sin peligro de quiebres y casi por inercia la acción llevó rápido a un desempate. Allí la tendencia se prolongó sin minibreaks durante los primeros nueve puntos. Con Raonic sirviendo 4-5, Djokovic volvió a pisar el acelerador y tuvo premio: defensa frustrada del canadiense, 6-4 para el serbio y dos puntos de set, uno seguro con su saque.
Y así fue: desaprovechada la primera opción, Djokovic se apuntó un saque ganador y desniveló decisivamente el partido. Porque el tercer set se resolvió muy rápido. Pese a la reacción de Raonic en el cierre, cuando logró su primer y único break en el encuentro. El final estaba escrito desde antes...
Con ventaja inicial de 3-0 (dos quiebres), Djokovic no pasó mayores sobresaltos camino a la victoria, pese a lo dicho: cedió por primera vez su saque y sirviendo para partido. Pero de inmediato le llegó la segunda oportunidad y no falló.
En semifinales, entonces, el N°2 del mundo (será N°1 si Rafael Nadal no gana el torneo) se verá con una de las grandes sorpresas del torneo: Gulbis. Lo que llama la atención en el letón no es su nivel ni los rivales a los que se impuso, sino la regularidad mostrada en un torneo grande. Sirva la estadística: desde 2008 que no alcanzaba la segunda semana en un Grand Slam.
Esta vez, Gulbis se deshizo de Berdych en sets corridos con 10 aces, un 81% de puntos ganados desde el primer saque, 31 tiros ganadores (contra 17 del checo), 4/4 en pelotas definidas en la red y cinco quiebres de servicio sobre ocho oportunidades.
Berdych debió jugar una de cada dos pelotas con su segundo saque y allí cedió 22 de 39 puntos. En los intercambios, el checo falló más de la cuenta con su derecha (16 de sus 25 errores no forzados llegaron desde ese golpe) y no pudo inquietar a un Gulbis que por fin se va afianzando entre los mejores.
Partidos - 03/06 - Cuartos de final
[2] Novak Djokovic (SRB) a [8] Milos Raonic (CAN) por 7-5, 7-6 (5) y 6-2
[18] Ernests Gulbis (LAT) a [6] Tomas Berdych (CZE) por 6-3, 6-2 y 6-4