Costa Rica con ropa nueva: de sorpresa a favorita
Sao Paulo, EFE
Cuando despertó, Costa Rica todavía estaba allí. Parafraseando al legendario cuento de una oración de un centroamericano, el hondureño Augusto Monterroso, "El dinosaurio", Costa Rica está allí, en octavos de final, favorita como nunca, ante un enigma llamado Grecia.
Es que el seleccionado de los "ticos" entrenado por el colombiano Jorge Luis Pinto ha dejado de ser la sorpresa del Mundial tras vencer el Grupo de la Muerte y superar a Uruguay (3-1) e Italia (1-0) y empatar con Inglaterra.
En octavos de final, y contra la enigmática Grecia, Costa Rica, gracias a los dioses del fútbol que se han posado desde el 12 de junio en Brasil, es la favorita para pasar a cuartos de final por primera vez en su historia.
El partido se juega el domingo en la Arena Pernambuco de los suburbios de Recife, de donde en la primera fase salió aclamada tras derrotar en una batalla con 36 grados de calor a Italia por 1-0, con gol de su estratega, Bryan Ruiz.
Fue ese partido en Recife que cambió a esta "Cenicienta" en uno de los animadores más serios del Mundial, ya que la victoria ante Italia ratificó su potencial.
Una maraña táctica de una línea de cinco con un medio del campo liderado por Yeltsin Tejeda como primer recuperador y la creación y el toque a cargo de Bryan Ruiz y Christian Bolaños y un punta afilado como Joel Campbell, conocedor de los griegos por su último año en el Olympiakos de Atenas.
En la sede del club Santos, donde está instalado el búnker de los "ticos", Pinto mandó al equipo a practicar penaltis confiando en otro de sus pilares, el portero Keylor Navas.
Pero, también, consciente de que la Grecia del director técnico portugués Fernando Santos puede esperar todo el partido agazapado a la espera de alguna genialidad del espigado Georgios Samaras, el delantero todo corazón y el gran empuje técnico de los helénicos.
"Costa Grande" tituló un diario brasileño tras la victoria frente a Italia para mostrar a la revelación del Mundial en el país de los pentacampeones, cuyos hinchas ya se animan a pronunciar nombres hasta antes del Mundial desconocidos de clubes costarricenses, como Saprissa o Alajuelense.
Para superar a la generación que en Italia 1990 llegó a octavos de final, la Costa Rica modelo 2014 debe jugar como favorito, una situación de presión inédita para quien era tratado como la primera víctima del Grupo de la Muerte y que, en cambio, terminó enviando a casa a dos campeones mundiales como Italia e Inglaterra.
Cuando despertó, Costa Rica todavía estaba allí. Parafraseando al legendario cuento de una oración de un centroamericano, el hondureño Augusto Monterroso, "El dinosaurio", Costa Rica está allí, en octavos de final, favorita como nunca, ante un enigma llamado Grecia.
Es que el seleccionado de los "ticos" entrenado por el colombiano Jorge Luis Pinto ha dejado de ser la sorpresa del Mundial tras vencer el Grupo de la Muerte y superar a Uruguay (3-1) e Italia (1-0) y empatar con Inglaterra.
En octavos de final, y contra la enigmática Grecia, Costa Rica, gracias a los dioses del fútbol que se han posado desde el 12 de junio en Brasil, es la favorita para pasar a cuartos de final por primera vez en su historia.
El partido se juega el domingo en la Arena Pernambuco de los suburbios de Recife, de donde en la primera fase salió aclamada tras derrotar en una batalla con 36 grados de calor a Italia por 1-0, con gol de su estratega, Bryan Ruiz.
Fue ese partido en Recife que cambió a esta "Cenicienta" en uno de los animadores más serios del Mundial, ya que la victoria ante Italia ratificó su potencial.
Una maraña táctica de una línea de cinco con un medio del campo liderado por Yeltsin Tejeda como primer recuperador y la creación y el toque a cargo de Bryan Ruiz y Christian Bolaños y un punta afilado como Joel Campbell, conocedor de los griegos por su último año en el Olympiakos de Atenas.
En la sede del club Santos, donde está instalado el búnker de los "ticos", Pinto mandó al equipo a practicar penaltis confiando en otro de sus pilares, el portero Keylor Navas.
Pero, también, consciente de que la Grecia del director técnico portugués Fernando Santos puede esperar todo el partido agazapado a la espera de alguna genialidad del espigado Georgios Samaras, el delantero todo corazón y el gran empuje técnico de los helénicos.
"Costa Grande" tituló un diario brasileño tras la victoria frente a Italia para mostrar a la revelación del Mundial en el país de los pentacampeones, cuyos hinchas ya se animan a pronunciar nombres hasta antes del Mundial desconocidos de clubes costarricenses, como Saprissa o Alajuelense.
Para superar a la generación que en Italia 1990 llegó a octavos de final, la Costa Rica modelo 2014 debe jugar como favorito, una situación de presión inédita para quien era tratado como la primera víctima del Grupo de la Muerte y que, en cambio, terminó enviando a casa a dos campeones mundiales como Italia e Inglaterra.