Petrobras deberá entregar a la justicia brasileña documentos sobre “secretos bancarios”
Río de Janeiro, DpaLa Justicia Federal del estado brasileño de Paraná decretó hoy el levantamiento del secreto bancario del ente estatal Petrobras, a raíz de denuncias de irregularidades en los contratos con empresas vinculadas a las obras de la refinería Abreu e Lima, localizada en el estado de Pernambuco.
El juez federal Sergio Moro le dio al ente 20 días para presentar la información, que se limita al periodo entre el 1 de enero de 2009 y el 31 de diciembre de 2013, y refiere exclusivamente a las transferencias bancarias y contratos del ente con las empresas Consorcio Nacional Camargo Correa (CNCC), Construcciones Camargo y Correa S.A, Sanko Sider Ltda y Sanko Servicios de Investigación y Mapeo.
También pide detalles sobre pagos realizados a las empresas MO Consultora y Laudos Estadísticos y GFD.
La refinería iba a costar 2.000 millones de dólares y abriría en 2011, pero recién será inaugurada este año a un costo de 18.000 millones de dólares
Según el portal del diario “O Estado de Sao Paulo”, los investigadores de la Policía Federal sospechan que Sanko era usada como puente para transferir dinero de Petrobras a políticos vinculados al fraude.
El magistrado también autorizó el levantamiento del secreto bancario del ex director de Petrobras Paulo Roberto Costa, quien está preso bajo sospecha de haber desviado dinero de la estatal.
Costa fue director de distribución y abastecimiento de Petrobras entre 2004 y 2012, además de ser responsable de proyectos técnicos de la refinería, y está bajo sospecha de haber sobrefacturado un contrato con el consorcio CNCC, por valores de entre 208 y 426,2 millones de reales (entre unos 94,5 y 193,7 millones de dólares).
La construcción de la Refinería Abreu e Lima comenzó a estar bajo sospecha de fraude debido a que por la propuesta original iba a costar 2.000 millones de dólares y a estar operativa en 2011, pero recién será inaugurada este año a un costo de 18.000 millones de dólares.
La planta empezó a ser construida en base a un acuerdo firmado entre los entonces presidentes de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y de Venezuela, Hugo Chávez, por el cual la petrolera venezolana PDVSA aportaría un 40% de su costo.
No obstante, el acuerdo jamás se concretó y Petrobras debió financiar la totalidad del proyecto, además de adaptarlo a las necesidades brasileñas de refinación de crudo.
La Policía Federal, que lleva adelante las investigaciones, sospecha que los recursos desviados a instancias de la construcción de la refinería habrían abastecido un millonario esquema de lavado de dinero y evasión de divisas comandado por el cambista Alberto Yousseff, quien también está preso.
