Las cinco propuestas de ley sobre la despenalización del aborto que baraja el Gobierno
Santiago, EP
El pasado 21 de mayo, durante la presentación de su primer balance de Gobierno, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, anunció que presentará un proyecto de ley para despenalizar la interrupción del embarazo en tres supuestos: peligro para la vida de la madre, inviabilidad del feto y violación.
Bachelet, con el fin de acelerar la aprobación de esta controvertida ley, dijo ayer que el Gobierno podría apoyar algunas de las propuestas para despenalizar el aborto que ya se están tramitando en el Congreso, lo que le evitaría a su gabinete la redacción y defensa ante la Cámara de un texto propio.
"Chile es uno de los cinco países del mundo donde está penalizado el aborto terapéutico", recordó la jefa del Estado, quien aseguró que el país y sus ciudadanos tienen la suficiente madurez para afrontar un nuevo debate en relación a esta cuestión.
La Moneda revisará los cinco proyectos que actualmente hay en el Congreso, todos ellos, cuentan con el denominador común de la modificación del artículo 119 del Código Sanitario que impide "ejecutarse acción alguna cuyo fin sea provocar un aborto", ha detallado el periódico chileno 'La Tercera'.
Por otro lado, otros tres proyectos ya han sido rechazados, mientras que once ya han sido archivados al tratarse de iniciativas que llevan más de dos años sin tratarse en ninguna comisión. Cabe destacar que en 2010, la que fuera rival de Bachelet en las elecciones presidenciales, Evelyn Matthei, suscribió, junto al socialista Fulvio Rossi, una propuesta que buscaba también despenalizar la interrupción del embarazo, pero rechazada dos años después.
INICIATIVA GIRARDI
El senador demócrata Guido Girardi presento en julio de 2013 una propuesta que busca "despenalizar la interrupción deliberada del embarazo, cuando se realiza únicamente para salvar la vida de la madre, en la medida que no existan otros medios para ello; cuando el feto presente o se establezca clínicamente que presentará graves taras o malformaciones físicas o psíquicas; o cuando el embarazo sea consecuencia de una violación".
"Para mi el tema no es si la persona va a tener o va a interrumpir el embarazo, para mi lo que importa es que quien decida sea la persona. Lo que pongo sobre en el centro es la autonomía y el derecho de las personas a tomar sus propias decisiones, y no que una visión conservadora, retrógrada y autoritaria decida por ellas", explicó Girardi.
Sin embargo, la intención del senador demócrata es fusionar su iniciativa con la que presentaron dos meses antes los afines Ricardo Lagos Weber, Isabel Allende, Fulvio Rossi, y el hoy ministro de Justicia, José Antonio Gómez. Girardi defiende que esta propuesta es la "más avanzada" y la que "tiene más historia".
LA INICIATIVA DEMOCRISTIANA
Los senadores del Partido Demócrata Cristiano (DC) Walker, Jorge Pizarro, Andrés Zaldívar y Mariano Ruiz-Esquide presentaron en octubre de 2011 una moción que contemplaba la interrupción del embarazo solo en el caso de que se comprobase que existía para la vida de la madre un "riesgo demostrado"
LA INICIATIVA DEL MOVIMIENTO CIUDADANO MILES
Los por entonces diputados María Antonieta Saa, Adriana Muñoz, Clemira Pacheco, Gabriel Ascencio, Aldo Cornejo, Hugo Gutiérrez, Marco Antonio Núñez, Alberto Robles y Gabriel Silber patrocinaron en mayo de 2013 una medida elaborada por el Movimiento por la Interrupción Legal del Embarazo en Chile (Miles).
La propuesta de este movimiento ciudadano contempla la interrupción del embarazo en tres supuestos: "patologías relevantes de la mujer que hagan peligrar su vida y salud, malformaciones fetales congénitas e incompatibles con la vida extrauterina y, por último, por agresión sexual"; aunque en este caso, antes de las doce primeras semanas.
El proyecto del Miles consta a su vez de dos artículos. Uno aboga por la modificación del código penal, suprimiendo las penas de presidio para estos casos. Este mismo punto contempla la potestad y legitimidad de los cirujanos y personal médico para poder realizar este tipo de prácticas, siempre y cuando haya autorización por parte de las madres y con ellos se "evite un peligro para la vida o la salud corporal de la mujer embarazada".
El segundo artículo de esta iniciativa está relacionado con la posibilidad de que el feto o el embrión padezca una "predisposición hereditaria o efectos dañinos anteriores al nacimiento, así como "una patología grave que resulte incompatible con su supervivencia después del nacimiento", siempre y cuando no transcurran más de veintidós semanas de gestación.
INICIATIVA PARA LA REFORMA DEL CÓDIGO SANITARIO
Una serie de diputados presentó en 2009 una iniciativa, que si bien no profundiza demasiado en los supuestos en los que se debería permitir interrumpir la gestación de la mujer, si defiende la modificación del artículo 119 del Código Sanitario como un primer paso esencial para la despenalización del aborto.
"Sólo con fines terapéuticos se podrá interrumpir un embarazo. Para proceder a esta intervención se requerirá la opinión documentada de dos médicos cirujanos", reza el documento.
El pasado 21 de mayo, durante la presentación de su primer balance de Gobierno, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, anunció que presentará un proyecto de ley para despenalizar la interrupción del embarazo en tres supuestos: peligro para la vida de la madre, inviabilidad del feto y violación.
Bachelet, con el fin de acelerar la aprobación de esta controvertida ley, dijo ayer que el Gobierno podría apoyar algunas de las propuestas para despenalizar el aborto que ya se están tramitando en el Congreso, lo que le evitaría a su gabinete la redacción y defensa ante la Cámara de un texto propio.
"Chile es uno de los cinco países del mundo donde está penalizado el aborto terapéutico", recordó la jefa del Estado, quien aseguró que el país y sus ciudadanos tienen la suficiente madurez para afrontar un nuevo debate en relación a esta cuestión.
La Moneda revisará los cinco proyectos que actualmente hay en el Congreso, todos ellos, cuentan con el denominador común de la modificación del artículo 119 del Código Sanitario que impide "ejecutarse acción alguna cuyo fin sea provocar un aborto", ha detallado el periódico chileno 'La Tercera'.
Por otro lado, otros tres proyectos ya han sido rechazados, mientras que once ya han sido archivados al tratarse de iniciativas que llevan más de dos años sin tratarse en ninguna comisión. Cabe destacar que en 2010, la que fuera rival de Bachelet en las elecciones presidenciales, Evelyn Matthei, suscribió, junto al socialista Fulvio Rossi, una propuesta que buscaba también despenalizar la interrupción del embarazo, pero rechazada dos años después.
INICIATIVA GIRARDI
El senador demócrata Guido Girardi presento en julio de 2013 una propuesta que busca "despenalizar la interrupción deliberada del embarazo, cuando se realiza únicamente para salvar la vida de la madre, en la medida que no existan otros medios para ello; cuando el feto presente o se establezca clínicamente que presentará graves taras o malformaciones físicas o psíquicas; o cuando el embarazo sea consecuencia de una violación".
"Para mi el tema no es si la persona va a tener o va a interrumpir el embarazo, para mi lo que importa es que quien decida sea la persona. Lo que pongo sobre en el centro es la autonomía y el derecho de las personas a tomar sus propias decisiones, y no que una visión conservadora, retrógrada y autoritaria decida por ellas", explicó Girardi.
Sin embargo, la intención del senador demócrata es fusionar su iniciativa con la que presentaron dos meses antes los afines Ricardo Lagos Weber, Isabel Allende, Fulvio Rossi, y el hoy ministro de Justicia, José Antonio Gómez. Girardi defiende que esta propuesta es la "más avanzada" y la que "tiene más historia".
LA INICIATIVA DEMOCRISTIANA
Los senadores del Partido Demócrata Cristiano (DC) Walker, Jorge Pizarro, Andrés Zaldívar y Mariano Ruiz-Esquide presentaron en octubre de 2011 una moción que contemplaba la interrupción del embarazo solo en el caso de que se comprobase que existía para la vida de la madre un "riesgo demostrado"
LA INICIATIVA DEL MOVIMIENTO CIUDADANO MILES
Los por entonces diputados María Antonieta Saa, Adriana Muñoz, Clemira Pacheco, Gabriel Ascencio, Aldo Cornejo, Hugo Gutiérrez, Marco Antonio Núñez, Alberto Robles y Gabriel Silber patrocinaron en mayo de 2013 una medida elaborada por el Movimiento por la Interrupción Legal del Embarazo en Chile (Miles).
La propuesta de este movimiento ciudadano contempla la interrupción del embarazo en tres supuestos: "patologías relevantes de la mujer que hagan peligrar su vida y salud, malformaciones fetales congénitas e incompatibles con la vida extrauterina y, por último, por agresión sexual"; aunque en este caso, antes de las doce primeras semanas.
El proyecto del Miles consta a su vez de dos artículos. Uno aboga por la modificación del código penal, suprimiendo las penas de presidio para estos casos. Este mismo punto contempla la potestad y legitimidad de los cirujanos y personal médico para poder realizar este tipo de prácticas, siempre y cuando haya autorización por parte de las madres y con ellos se "evite un peligro para la vida o la salud corporal de la mujer embarazada".
El segundo artículo de esta iniciativa está relacionado con la posibilidad de que el feto o el embrión padezca una "predisposición hereditaria o efectos dañinos anteriores al nacimiento, así como "una patología grave que resulte incompatible con su supervivencia después del nacimiento", siempre y cuando no transcurran más de veintidós semanas de gestación.
INICIATIVA PARA LA REFORMA DEL CÓDIGO SANITARIO
Una serie de diputados presentó en 2009 una iniciativa, que si bien no profundiza demasiado en los supuestos en los que se debería permitir interrumpir la gestación de la mujer, si defiende la modificación del artículo 119 del Código Sanitario como un primer paso esencial para la despenalización del aborto.
"Sólo con fines terapéuticos se podrá interrumpir un embarazo. Para proceder a esta intervención se requerirá la opinión documentada de dos médicos cirujanos", reza el documento.