Insiste Correa en captura de opositor que lo injurió
Santiago, Notimex
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, advirtió hoy que desconoce la sentencia a prisión que pesa sobre el opositor Cléver Jiménez, y calificó como “grave” para el país que los indígenas lo protejan en su territorio.
Durante su programa sabatino, Correa dejó en claro que si no se hace cumplir el fallo, que ordena llevarlo a la cárcel por injuriar al presidente, “pasaríamos de la civilización a la barbarie y no lo vamos a permitir”.
Jiménez y los activistas Fernando Villavicencio y Carlos Figueroa, quienes recibían protección de la comunidad indígena de Sarayaku, cambiaron esta semana de refugio ante la posibilidad de una incursión militar para detenerlos.
“El problema con Sarayaku, es una situación gravísima de la cual todos los ciudadanos debemos estar conscientes y saber claramente quienes son los responsables”, sostuvo este sábado el presidente al rendir el informe de gobierno.
Correa condenó el martes pasado la protección de los indígenas a Jiménez y aseguró que su deber es hacer cumplir la ley para que el ex asambleísta opositor, sentenciado a prisión en marzo pasado, responda ante la justicia.
Jiménez, Villavicencio y Figueroa son buscados para que el primero y el segundo cumplan una condena de 18 meses de prisión, y el tercero una de 180 días de arresto por injurias contra el mandatario.
Correa fue acusado por Jiménez, Villavicencio y Figueroa de ordenar la incursión armada al hospital de la Policía, donde permaneció algunas horas en la revuelta del 30 de septiembre de 2010, que dejó varios muertos y heridos.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, advirtió hoy que desconoce la sentencia a prisión que pesa sobre el opositor Cléver Jiménez, y calificó como “grave” para el país que los indígenas lo protejan en su territorio.
Durante su programa sabatino, Correa dejó en claro que si no se hace cumplir el fallo, que ordena llevarlo a la cárcel por injuriar al presidente, “pasaríamos de la civilización a la barbarie y no lo vamos a permitir”.
Jiménez y los activistas Fernando Villavicencio y Carlos Figueroa, quienes recibían protección de la comunidad indígena de Sarayaku, cambiaron esta semana de refugio ante la posibilidad de una incursión militar para detenerlos.
“El problema con Sarayaku, es una situación gravísima de la cual todos los ciudadanos debemos estar conscientes y saber claramente quienes son los responsables”, sostuvo este sábado el presidente al rendir el informe de gobierno.
Correa condenó el martes pasado la protección de los indígenas a Jiménez y aseguró que su deber es hacer cumplir la ley para que el ex asambleísta opositor, sentenciado a prisión en marzo pasado, responda ante la justicia.
Jiménez, Villavicencio y Figueroa son buscados para que el primero y el segundo cumplan una condena de 18 meses de prisión, y el tercero una de 180 días de arresto por injurias contra el mandatario.
Correa fue acusado por Jiménez, Villavicencio y Figueroa de ordenar la incursión armada al hospital de la Policía, donde permaneció algunas horas en la revuelta del 30 de septiembre de 2010, que dejó varios muertos y heridos.
