En tres meses, 20 operativos de la ANH logran la detención de 120 contrabandistas de combustible
La Paz, Oxígeno
Entre febrero y abril de este año el Grupo de Interdicción de Hidrocarburos (DOIH), de la Agencia Nacional de Hidrocaburos realizó 20 operativos en el altiplano paceño, en zonas fronterizas con el Perú, lugares donde se incautó gasolina, diesel oíl y garrafas de gas licuado de petróleo (GLP), además se aprendió 120 personas y secuestró 550 vehículos, según informó el director ejecutivo, Gary Medrano.
La ANH, en coordinación con Comandos Conjuntos de las Fuerzas Armadas intervino ferias provinciales en las localidades de Achacachi, Charaña, Desaguadero, Carabuco, Escoma, Patamanta, Tiquina, Challapata, Puerto Suárez, Santa Rosa de Taraco, Guaqui y Puerto Acosta, donde se pudo evidenciar la existencia de clanes familiares que se dedican a acopiar el combustible para el contrabando “hormiga” hacía Perú, llevando el producto en bidones y bolsas plásticos, además de habilitar dobles tanques en sus vehículos y espacios debajo de los asientos para introducir el combustible.
Medrano explicó que el precio reducido de los carburantes en Bolivia, gracias a la subvención del Estado boliviano, se convirtió en un “atractivo” para los contrabandistas en el país. En el caso de Perú, dijo que la gasolina y el diesel que tiene un costo de Bs 3.74 y Bs 3.72 el litro, respectivamente, en el país incaico el costo se triplica, en tanto que el Gas Licuado de Petróleo (GLP), el precio en Bolivia es de 22.50 y en Perú el costo es de 100 bolivianos la garrafa.
Contó que en las ferias provinciales en el Altiplano en el filo de la frontera se apuestan camiones bolivianos para transferir los bidones y bolsas de combustible a vehículos peruanos, “donde nosotros ya no podemos hacer nada para recuperar nuestro combustible”, aseguró.
“No se necesita ni cruzar la frontera, con sólo llegar a las zonas fronterizas el costo de los combustibles se eleva. Perú es al país que más sale combustible por contrabando por sus características geográficas, lamentablemente por esta diferencia de precios se han formado clanes organizados”, dijo.
Aseguró que existen mesas de control en las fronteras para evitar la salida de Bolivia y la entrada a Perú de mercadería. Asimismo, dijo que ha disminuido el contrabando de combustible, tomando en cuenta que existe un control diario de las Fuerzas Armadas, a través de las Unidades Militares en Chua, Guaqui y Achacachi.
“La ANH ha firmado un convenio con las Fuerzas Armadas, son nuestros brazos operativos y realizan patrullaje diario, en toda la zona”, anotó.
Medrano dijo que se implementa tecnología de punta para el control del contrabando, tomando en cuenta que los contrabandistas utilizan visores nocturnos y GPS (Sistema de Posicionamiento Global). Además anunció que con la puesta en marcha del B-SISA el control será más efectivo “lo que se pretende es cercar a los contrabandistas, sin embargo la forma más efectiva es la denuncia de los comunarios, por eso nosotros celebramos que los mismos vecinos denuncien los actos ilegales para hacer el seguimiento”, dijo.
Entre febrero y abril de este año el Grupo de Interdicción de Hidrocarburos (DOIH), de la Agencia Nacional de Hidrocaburos realizó 20 operativos en el altiplano paceño, en zonas fronterizas con el Perú, lugares donde se incautó gasolina, diesel oíl y garrafas de gas licuado de petróleo (GLP), además se aprendió 120 personas y secuestró 550 vehículos, según informó el director ejecutivo, Gary Medrano.
La ANH, en coordinación con Comandos Conjuntos de las Fuerzas Armadas intervino ferias provinciales en las localidades de Achacachi, Charaña, Desaguadero, Carabuco, Escoma, Patamanta, Tiquina, Challapata, Puerto Suárez, Santa Rosa de Taraco, Guaqui y Puerto Acosta, donde se pudo evidenciar la existencia de clanes familiares que se dedican a acopiar el combustible para el contrabando “hormiga” hacía Perú, llevando el producto en bidones y bolsas plásticos, además de habilitar dobles tanques en sus vehículos y espacios debajo de los asientos para introducir el combustible.
Medrano explicó que el precio reducido de los carburantes en Bolivia, gracias a la subvención del Estado boliviano, se convirtió en un “atractivo” para los contrabandistas en el país. En el caso de Perú, dijo que la gasolina y el diesel que tiene un costo de Bs 3.74 y Bs 3.72 el litro, respectivamente, en el país incaico el costo se triplica, en tanto que el Gas Licuado de Petróleo (GLP), el precio en Bolivia es de 22.50 y en Perú el costo es de 100 bolivianos la garrafa.
Contó que en las ferias provinciales en el Altiplano en el filo de la frontera se apuestan camiones bolivianos para transferir los bidones y bolsas de combustible a vehículos peruanos, “donde nosotros ya no podemos hacer nada para recuperar nuestro combustible”, aseguró.
“No se necesita ni cruzar la frontera, con sólo llegar a las zonas fronterizas el costo de los combustibles se eleva. Perú es al país que más sale combustible por contrabando por sus características geográficas, lamentablemente por esta diferencia de precios se han formado clanes organizados”, dijo.
Aseguró que existen mesas de control en las fronteras para evitar la salida de Bolivia y la entrada a Perú de mercadería. Asimismo, dijo que ha disminuido el contrabando de combustible, tomando en cuenta que existe un control diario de las Fuerzas Armadas, a través de las Unidades Militares en Chua, Guaqui y Achacachi.
“La ANH ha firmado un convenio con las Fuerzas Armadas, son nuestros brazos operativos y realizan patrullaje diario, en toda la zona”, anotó.
Medrano dijo que se implementa tecnología de punta para el control del contrabando, tomando en cuenta que los contrabandistas utilizan visores nocturnos y GPS (Sistema de Posicionamiento Global). Además anunció que con la puesta en marcha del B-SISA el control será más efectivo “lo que se pretende es cercar a los contrabandistas, sin embargo la forma más efectiva es la denuncia de los comunarios, por eso nosotros celebramos que los mismos vecinos denuncien los actos ilegales para hacer el seguimiento”, dijo.