A sus 78 años, el presidente Mujica se vuelve a montar en una moto Vespa
Antes de partir a Estados Unidos, donde hoy inicia una visita oficial, el presidente de Uruguay, José Mujica, de 78 años de edad, se volvió a montar hace unos días en una Vespa, motocicleta con la que se hizo famoso durante su etapa como diputado porque la llevaba a diario al Parlamento.
Según puede verse en un vídeo difundido hoy en el perfil de Twitter de la cadena uruguaya Teledoce, durante un acto público hace unos días el mandatario fue abordado por el periodista del programa de humor “Súbete a mi moto”, que se acercó a él con su Vespa del año 1962 para invitarlo a probarla.
El hecho tuvo lugar cuando el jefe de Estado, que este mes cumplirá 79 años, participaba en un acto público al aire libre en la población de Santa Lucía, a unos 60 kilómetros de Montevideo.
“¿Es de las viejas?”, le preguntó inicialmente el gobernante al reportero, antes de intentar ponerla en marcha sin éxito y espetar con su habitual tono socarrón “La tienes en la reserva, está sin nafta (gasolina)”, entre las risas de los presentes.
Cuando por fin el entrevistador logra encenderla y Mujica se sube a la moto, el periodista le consulta si no se va a poner casco, a lo que el mandatario le responde “No, acá es privado” y da una breve vuelta por un jardín en el vehículo.
“Cómo está (la moto), presi?”, interroga luego el reportero al sonriente presidente.
“Métele mano. Anda porque es noble”, contesta el gobernante, que admite que conducir una Vespa “es una religión”.
Por último, preguntado sobre su moto, Mujica explicó que “es un monumento a los golpes pero anda”, aunque luego aclaró que se la dio a un vecino.
El mandatario y ese modelo de motocicleta tienen una vieja historia en común de los tiempos en los que el exguerrillero, que pasó catorce años en la cárcel por su lucha armada, la mayoría durante la dictadura (1973-1985), llegó a ser diputado con el bloque izquierdista Frente Amplio hace dos décadas.
El primer día en que llegó al Palacio Legislativo uno de los vigilantes del estacionamiento del edificio le preguntó al verlo llegar con la motocicleta si se iba a quedar mucho rato, a lo que él respondió “Si no me sacan antes, espero estar cinco años”, según la anécdota manejada desde entonces por los medios de comunicación.
