Piden que se derrumben los búnkeres de droga en Rosario
Buenos Aires, EP
El secretario de Seguridad de Argentina, Sergio Berni, ha pedido que los búnkeres de droga que existen en la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe (Argentina), sean derribados con topadoras para la lucha contra el narcotráfico.
El Gobierno nacional exigió a las autoridades de la provincia "que cada día derrumben con topadoras nueve búnkeres de droga" donde se encuentran los 3.000 efectivos de fuerzas nacionales custodiando las zonas más humildes.
"Se analiza que tras la destrucción de los búnkeres se planten árboles en los terrenos que sean apropiados", explicó el ministro de Seguridad de Santa Fe, Raúl Lamberto.
"Sabíamos que no iba a ser fácil ni que se iba a bajar la violencia de la noche a la mañana", declaró Berni tras los hechos violentos del fin de semana donde hubo cinco homicidios.
La intendenta de la ciudad de Rosario, Mónica Fein, pidió "que en los barrios donde se localicen y se desocupen búnkeres de venta de drogas se puedan tirar abajo porque en estos espacios se toma cautivos a chicos y se generan encadenamientos de violencia".
"Hace más de un año que se plantea que la existencia de quioscos de venta de droga rompe la lógica de convivencia en los barrios de la ciudad, captando a los jóvenes más vulnerables", declaró Fein según publica el diario La Nación.
MÁS DE 3.000 EFECTIVOS DE SEGURIDAD EN ROSARIO
Cerca de 3.000 efectivos policiales han llevado a cabo el pasado miércoles un megaoperativo contra el narcotráfico, la intervención "más grande de la historia argentina" en lo que respecta a la lucha contra el tráfico de drogas.
Durante esta operación se han realizado más de 90 redadas en diferentes zonas de la ciudad, con el objetivo de controlar a algunos de los narcotraficantes más peligrosos del país.
Así, se han registrado los domicilios donde supuestamente operan los integrantes de varios cárteles locales de la droga, incluida la banda de 'Los Monos', responsable de una gran cantidad de homicidios.
DENUNCIA DE LA IGLESIA ARGENTINA
La polémica en torno al narcotráfico en Argentina saltó con fuerza a los medios el pasado mes de noviembre, cuando los obispos argentinos presentaron el informe 'El drama de la droga y el narcotráfico', declarando que "si la diligencia política y social no toma medidas urgentes para combatir el narcotráfico, costará mucho tiempo y mucha sangre erradicar estas mafias que han ido ganando cada vez más espacio".
Tras señalar que "perseguir el delito es tarea exclusiva e irrenunciable del Estado", los obispos dijeron que escuchan de la gente "la preocupación por la desprotección de las fronteras y por la demora en dotar de adecuados sistemas de radar las zonas más vulnerables".
El presidente del Episcopado, monseñor José María Arancedo, y el titular de la comisión de Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano, advirtieron entonces de que se escuchaba decir "con frecuencia" en la calle que "a esta situación de desborde se ha llegado con la complicidad y la corrupción de algunos dirigentes".
El secretario de Seguridad de Argentina, Sergio Berni, ha pedido que los búnkeres de droga que existen en la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe (Argentina), sean derribados con topadoras para la lucha contra el narcotráfico.
El Gobierno nacional exigió a las autoridades de la provincia "que cada día derrumben con topadoras nueve búnkeres de droga" donde se encuentran los 3.000 efectivos de fuerzas nacionales custodiando las zonas más humildes.
"Se analiza que tras la destrucción de los búnkeres se planten árboles en los terrenos que sean apropiados", explicó el ministro de Seguridad de Santa Fe, Raúl Lamberto.
"Sabíamos que no iba a ser fácil ni que se iba a bajar la violencia de la noche a la mañana", declaró Berni tras los hechos violentos del fin de semana donde hubo cinco homicidios.
La intendenta de la ciudad de Rosario, Mónica Fein, pidió "que en los barrios donde se localicen y se desocupen búnkeres de venta de drogas se puedan tirar abajo porque en estos espacios se toma cautivos a chicos y se generan encadenamientos de violencia".
"Hace más de un año que se plantea que la existencia de quioscos de venta de droga rompe la lógica de convivencia en los barrios de la ciudad, captando a los jóvenes más vulnerables", declaró Fein según publica el diario La Nación.
MÁS DE 3.000 EFECTIVOS DE SEGURIDAD EN ROSARIO
Cerca de 3.000 efectivos policiales han llevado a cabo el pasado miércoles un megaoperativo contra el narcotráfico, la intervención "más grande de la historia argentina" en lo que respecta a la lucha contra el tráfico de drogas.
Durante esta operación se han realizado más de 90 redadas en diferentes zonas de la ciudad, con el objetivo de controlar a algunos de los narcotraficantes más peligrosos del país.
Así, se han registrado los domicilios donde supuestamente operan los integrantes de varios cárteles locales de la droga, incluida la banda de 'Los Monos', responsable de una gran cantidad de homicidios.
DENUNCIA DE LA IGLESIA ARGENTINA
La polémica en torno al narcotráfico en Argentina saltó con fuerza a los medios el pasado mes de noviembre, cuando los obispos argentinos presentaron el informe 'El drama de la droga y el narcotráfico', declarando que "si la diligencia política y social no toma medidas urgentes para combatir el narcotráfico, costará mucho tiempo y mucha sangre erradicar estas mafias que han ido ganando cada vez más espacio".
Tras señalar que "perseguir el delito es tarea exclusiva e irrenunciable del Estado", los obispos dijeron que escuchan de la gente "la preocupación por la desprotección de las fronteras y por la demora en dotar de adecuados sistemas de radar las zonas más vulnerables".
El presidente del Episcopado, monseñor José María Arancedo, y el titular de la comisión de Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano, advirtieron entonces de que se escuchaba decir "con frecuencia" en la calle que "a esta situación de desborde se ha llegado con la complicidad y la corrupción de algunos dirigentes".