La “peste” de los recuerdos
El presidente de Colombia decretó tres días de duelo nacional por la muerte de García Márquez. El 23 de abril se leerá en todas partes 'El coronel no tiene quien le escriba'
Elizabeth Reyes L., El País
“¡Adiós, maestro Gabo!”, “Por siempre Gabo”, “Gracias Maestro”, “Luto en Macondo”. “Gabo inmortal”. Así titularon los principales diarios de Colombia sus especiales sobre Gabriel García Márquez que murió ayer en Ciudad de México a los 87 años. Pero más que el relato de una dolorosa partida, lo que ocurrió desde el mediodía de ayer fue un emotivo ejercicio de memoria colectiva, una avalancha espontánea de gratos recuerdos.
“Para nosotros, los colombianos, Gabo no inventó el realismo mágico sino que fue el mejor exponente de un país que es –en sí mismo– realismo mágico. Un país que combina alegría y dolor, poesía y conflictos, en el que las mariposas amarillas cruzan los senderos y hermosas niñas de nombre Remedios ascienden entre sábanas al cielo. Un país donde todo es posible, sobre todo la vida. Colombia entera debe tanto a García Márquez…”. Así lo describió el presidente Juan Manuel Santos durante una corta alocución. Luego decretó tres días de duelo nacional.
El Nobel colombiano solía decir que escribía para que sus amigos lo quisieran más, por eso Santos, en su homenaje, dijo que el autor de Cien años de soledad “debe saber hoy –desde el Olimpo de los genios– que 47 millones de colombianos lo queremos mucho, ¡muchísimo!, y que el mundo entero, sin excepción, lo despide con honores”.
El diario El Tiempo, el más importante de Colombia, no dudó en calificar a Gabriel García Márquez como el colombiano más notable de todos los tiempos, y anticipándose a la edición especial que circulará este domingo, publicó en su portal web un emotivo editorial donde recordó que de entre el gran listado de facetas del escritor que muchos recordarán por estos días, hay que destacar que Gabo fue el que más divulgó el nombre de Colombia.
“Él recuperó, además, el sereno orgullo nacional. Cuando nuestro país era sinónimo de narcotráfico, él aportó con su Nobel una refrescante bocanada de prestigio. Y al coronar lo que parecía una utopía, mostró a otras figuras nacionales que era posible alcanzar lo más alto, como lo han hecho, en su campo y a su medida, Fernando Botero, Shakira, Carlos Vives, Rodolfo Llinás, Falcao García, César Rincón y algunos cuantos más”, dice el editorial de El Tiempo, que como es costumbre no circula el Viernes Santo, pero el jueves en la noche sacó un extra de 12 páginas, cuyos 70.000 ejemplares se agotaron en una hora.
El otro diario capitalino, El Espectador, que fue la casa del Nobel a mediados de los años 50 donde publicó su famosa serie de reportajes titulada Relato de un náufrago y en 1947 su primer cuento La tercera resignación, lo describió como un personaje mágico. “Como él mismo lo retrató en la primera parte de su autobiografía Vivir para contarla, donde relató su vida en Aracataca, las tardes en que salía a pasear con su abuelo Nicolás Márquez y la impresión que le dejó Kafka y Faulkner. García Márquez fue su literatura y viceversa”, dice la presentación del especial firmado con el autógrafo del escritor y que se ampliará este fin de semana en una publicación de 120 páginas.
Aunque no está muy claro si tras la incineración en México va a haber honras fúnebres en Colombia, su hermana Aída, quien vive en Barranquilla, ha declarado a medios locales que estas deberían realizarse en Colombia. “Con seguridad él viene”, dijo a las pocas horas de enterarse de su muerte, aunque reconoció que esa decisión la tomarán en México sus demás familiares.
La muerte del Nobel coincide con la visita a Bogotá de más de 1.500 artistas de todo el mundo que se encuentran reunidos hace casi dos semanas viviendo la fiesta más grande del teatro en Iberoamérica. Ellos también se unieron al último adiós del escritor y su directora, Anamarta de Pizarro, calificó al escritor como el mayor creativo de Colombia. “Que las mariposas amarillas de su creación nos sigan iluminando siempre”.
Por ahora, en Colombia, además de los tres días de luto y la bandera a media asta, el Ministerio de Cultura está convocando a los colombianos de todos los rincones a participar de una lectura masiva y en voz alta de El coronel no tiene quien le escriba. La cita es el próximo 23 de abril, cuando se celebra el día del libro, en todas las bibliotecas públicas, plazas y parques del país. La mejor forma de homenajear a Gabo, es leyendo a Gabo.
Elizabeth Reyes L., El País
“¡Adiós, maestro Gabo!”, “Por siempre Gabo”, “Gracias Maestro”, “Luto en Macondo”. “Gabo inmortal”. Así titularon los principales diarios de Colombia sus especiales sobre Gabriel García Márquez que murió ayer en Ciudad de México a los 87 años. Pero más que el relato de una dolorosa partida, lo que ocurrió desde el mediodía de ayer fue un emotivo ejercicio de memoria colectiva, una avalancha espontánea de gratos recuerdos.
“Para nosotros, los colombianos, Gabo no inventó el realismo mágico sino que fue el mejor exponente de un país que es –en sí mismo– realismo mágico. Un país que combina alegría y dolor, poesía y conflictos, en el que las mariposas amarillas cruzan los senderos y hermosas niñas de nombre Remedios ascienden entre sábanas al cielo. Un país donde todo es posible, sobre todo la vida. Colombia entera debe tanto a García Márquez…”. Así lo describió el presidente Juan Manuel Santos durante una corta alocución. Luego decretó tres días de duelo nacional.
El Nobel colombiano solía decir que escribía para que sus amigos lo quisieran más, por eso Santos, en su homenaje, dijo que el autor de Cien años de soledad “debe saber hoy –desde el Olimpo de los genios– que 47 millones de colombianos lo queremos mucho, ¡muchísimo!, y que el mundo entero, sin excepción, lo despide con honores”.
El diario El Tiempo, el más importante de Colombia, no dudó en calificar a Gabriel García Márquez como el colombiano más notable de todos los tiempos, y anticipándose a la edición especial que circulará este domingo, publicó en su portal web un emotivo editorial donde recordó que de entre el gran listado de facetas del escritor que muchos recordarán por estos días, hay que destacar que Gabo fue el que más divulgó el nombre de Colombia.
“Él recuperó, además, el sereno orgullo nacional. Cuando nuestro país era sinónimo de narcotráfico, él aportó con su Nobel una refrescante bocanada de prestigio. Y al coronar lo que parecía una utopía, mostró a otras figuras nacionales que era posible alcanzar lo más alto, como lo han hecho, en su campo y a su medida, Fernando Botero, Shakira, Carlos Vives, Rodolfo Llinás, Falcao García, César Rincón y algunos cuantos más”, dice el editorial de El Tiempo, que como es costumbre no circula el Viernes Santo, pero el jueves en la noche sacó un extra de 12 páginas, cuyos 70.000 ejemplares se agotaron en una hora.
El otro diario capitalino, El Espectador, que fue la casa del Nobel a mediados de los años 50 donde publicó su famosa serie de reportajes titulada Relato de un náufrago y en 1947 su primer cuento La tercera resignación, lo describió como un personaje mágico. “Como él mismo lo retrató en la primera parte de su autobiografía Vivir para contarla, donde relató su vida en Aracataca, las tardes en que salía a pasear con su abuelo Nicolás Márquez y la impresión que le dejó Kafka y Faulkner. García Márquez fue su literatura y viceversa”, dice la presentación del especial firmado con el autógrafo del escritor y que se ampliará este fin de semana en una publicación de 120 páginas.
Aunque no está muy claro si tras la incineración en México va a haber honras fúnebres en Colombia, su hermana Aída, quien vive en Barranquilla, ha declarado a medios locales que estas deberían realizarse en Colombia. “Con seguridad él viene”, dijo a las pocas horas de enterarse de su muerte, aunque reconoció que esa decisión la tomarán en México sus demás familiares.
La muerte del Nobel coincide con la visita a Bogotá de más de 1.500 artistas de todo el mundo que se encuentran reunidos hace casi dos semanas viviendo la fiesta más grande del teatro en Iberoamérica. Ellos también se unieron al último adiós del escritor y su directora, Anamarta de Pizarro, calificó al escritor como el mayor creativo de Colombia. “Que las mariposas amarillas de su creación nos sigan iluminando siempre”.
Por ahora, en Colombia, además de los tres días de luto y la bandera a media asta, el Ministerio de Cultura está convocando a los colombianos de todos los rincones a participar de una lectura masiva y en voz alta de El coronel no tiene quien le escriba. La cita es el próximo 23 de abril, cuando se celebra el día del libro, en todas las bibliotecas públicas, plazas y parques del país. La mejor forma de homenajear a Gabo, es leyendo a Gabo.