El Supremo rechaza adelantar su pronunciamiento sobre la legalidad del espionaje de la NSA
Washington, EP
El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha rechazado este lunes tramitar una denuncia contra el espionaje de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense a ciudadanos del propio país norteamericano por considerar que antes de recurrir al Supremo debe haber una sentencia del tribunal de apelaciones.
Esta negativa al trámite implica que el caso seguirá adelante en el Tribunal de Apelaciones de Washington en el que se encuentra actualmente pese al recurso de Larry Klayman y Charles Strange. Klayman --abogado conservador-- y Strange --padre de un criptógrafo muerto en Afganistán en 2011-- ya han ganado el caso en primera instancia el pasado mes de diciembre. El juez de distrito Richard Leon dictaminó que el programa de espionaje es "probablemente ilegal", pero el Gobierno recurrió la sentencia.
Klayman y Strange argumentaban que los delitos denunciados suponen una violación de los derechos fundamentales, por lo que el Supremo no debería esperar a agotar el proceso en los tribunales inferiores para pronunciarse. Sin embargo, no es nada frecuente que el Supremo acepte un caso sin que haya una sentencia previa.
El caso se basa en la información filtrada por el extécnico de la NSA Edward Snowden sobre el programa de espionaje estadounidense tanto dentro como fuera de las fronteras norteamericanas para recoger los conocidos como metadatos --destino y duración de las llamadas telefónicas y las conexiones a Internet--. Según los documentos de Snowden, un tribunal de vigilancia estadounidense aprobó este espionaje.
El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha rechazado este lunes tramitar una denuncia contra el espionaje de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense a ciudadanos del propio país norteamericano por considerar que antes de recurrir al Supremo debe haber una sentencia del tribunal de apelaciones.
Esta negativa al trámite implica que el caso seguirá adelante en el Tribunal de Apelaciones de Washington en el que se encuentra actualmente pese al recurso de Larry Klayman y Charles Strange. Klayman --abogado conservador-- y Strange --padre de un criptógrafo muerto en Afganistán en 2011-- ya han ganado el caso en primera instancia el pasado mes de diciembre. El juez de distrito Richard Leon dictaminó que el programa de espionaje es "probablemente ilegal", pero el Gobierno recurrió la sentencia.
Klayman y Strange argumentaban que los delitos denunciados suponen una violación de los derechos fundamentales, por lo que el Supremo no debería esperar a agotar el proceso en los tribunales inferiores para pronunciarse. Sin embargo, no es nada frecuente que el Supremo acepte un caso sin que haya una sentencia previa.
El caso se basa en la información filtrada por el extécnico de la NSA Edward Snowden sobre el programa de espionaje estadounidense tanto dentro como fuera de las fronteras norteamericanas para recoger los conocidos como metadatos --destino y duración de las llamadas telefónicas y las conexiones a Internet--. Según los documentos de Snowden, un tribunal de vigilancia estadounidense aprobó este espionaje.