El Papa clama contra el tráfico de personas, "un delito de lesa humanidad"
Roma, EP
El Papa ha denunciado hoy que el tráfico de seres humanos es "un delito de lesa humanidad", en un discurso dirigido a los participantes de la Segunda Conferencia Internacional para Combatir el tráfico de personas organizada por la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales y promovida por el Vaticano en colaboración con autoridades judiciales.
En el aula Magna de la Pontifica Academia de las Ciencias, donde se ha celebrado este congreso promovido por el Vaticano en colaboración con autoridades policiales de todo el mundo, Francisco ha subrayado que la trata de seres humanos "es una plaga en el cuerpo de la humanidad contemporánea, una plaga en la carne de Cristo".
Por otro lado, el Pontífice ha elogiado la labor de las autoridades policiales "empeñadas en combatir este triste fenómeno con los instrumentos y el rigor de la ley" y también el trabajo de los operadores humanitarios que ofrecen "asistencia, calor humano y posibilidad de rescate a las víctimas".
Así, ha destacado que son dos tareas distintas pero que ambas "deben ir juntas" al tiempo que ha subrayado que estos encuentros son "de gran utilidad" y muy "necesarios". Por último, ha puesto de manifiesto que es necesario que las estrategias y competencias para luchar con el tráfico de personas estén acompañadas y reforzadas "por la compasión evangélica y la proximidad a hombres y mujeres víctimas de este crimen".
El Papa ha denunciado hoy que el tráfico de seres humanos es "un delito de lesa humanidad", en un discurso dirigido a los participantes de la Segunda Conferencia Internacional para Combatir el tráfico de personas organizada por la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales y promovida por el Vaticano en colaboración con autoridades judiciales.
En el aula Magna de la Pontifica Academia de las Ciencias, donde se ha celebrado este congreso promovido por el Vaticano en colaboración con autoridades policiales de todo el mundo, Francisco ha subrayado que la trata de seres humanos "es una plaga en el cuerpo de la humanidad contemporánea, una plaga en la carne de Cristo".
Por otro lado, el Pontífice ha elogiado la labor de las autoridades policiales "empeñadas en combatir este triste fenómeno con los instrumentos y el rigor de la ley" y también el trabajo de los operadores humanitarios que ofrecen "asistencia, calor humano y posibilidad de rescate a las víctimas".
Así, ha destacado que son dos tareas distintas pero que ambas "deben ir juntas" al tiempo que ha subrayado que estos encuentros son "de gran utilidad" y muy "necesarios". Por último, ha puesto de manifiesto que es necesario que las estrategias y competencias para luchar con el tráfico de personas estén acompañadas y reforzadas "por la compasión evangélica y la proximidad a hombres y mujeres víctimas de este crimen".