Biógrafo y portavoz defienden a Juan Pablo II
Ciudad del Vaticano, AP
El biógrafo del papa Juan Pablo II y su portavoz por mucho tiempo salieron el viernes en defensa del fallecido pontífice, frente a la evidencia de que él apenas comprendió la magnitud del escándalo de abusos sexuales dentro de la Iglesia católica al final de su papado.
El biógrafo oficial George Weigel y Joaquín Navarro Valls, vocero del Vaticano durante buena parte del papado de Juan Pablo II, argumentaron que la decisión del pontífice en 2002 —14 años después de su elección como jefe de la Iglesia católica— de convocar a los cardenales estadounidenses a Roma demuestra que actuó con decisión una vez que se enteró del problema.
Sin embargo, hay evidencia de que los obispos de Estados Unidos le pidieron desde finales de 1980 a la Santa Sede que buscara medios más rápidos para destituir a los curas pederastas.
El cardenal Joseph Ratzinger —quien más tarde fue designado como el papa Benedicto XVI— pidió permisos similares la oficina legal del Vaticano para que acelerara el proceso en 1988.
Navarro Valls dijo debido a la "pureza de su pensamiento", al fallecido papa le resultaba difícil aceptar que algunos sacerdotes pudiesen abusar sexualmente de menores de edad.
El biógrafo del papa Juan Pablo II y su portavoz por mucho tiempo salieron el viernes en defensa del fallecido pontífice, frente a la evidencia de que él apenas comprendió la magnitud del escándalo de abusos sexuales dentro de la Iglesia católica al final de su papado.
El biógrafo oficial George Weigel y Joaquín Navarro Valls, vocero del Vaticano durante buena parte del papado de Juan Pablo II, argumentaron que la decisión del pontífice en 2002 —14 años después de su elección como jefe de la Iglesia católica— de convocar a los cardenales estadounidenses a Roma demuestra que actuó con decisión una vez que se enteró del problema.
Sin embargo, hay evidencia de que los obispos de Estados Unidos le pidieron desde finales de 1980 a la Santa Sede que buscara medios más rápidos para destituir a los curas pederastas.
El cardenal Joseph Ratzinger —quien más tarde fue designado como el papa Benedicto XVI— pidió permisos similares la oficina legal del Vaticano para que acelerara el proceso en 1988.
Navarro Valls dijo debido a la "pureza de su pensamiento", al fallecido papa le resultaba difícil aceptar que algunos sacerdotes pudiesen abusar sexualmente de menores de edad.