UNICEF advierte de "un desastre humanitario" para cerca de un millón de sursudaneses si no llega ayuda
Madrid, EP
El Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) ha advertido este miércoles de que a menos que la situación humanitaria en Sudán del Sur mejore rápida y radicalmente para los niños y sus familias, casi un millón de personas se enfrentará a "una crisis aún mayor", tanto en el interior del país como en los vecinos.
"Con las lluvias anuales acercándose rápidamente, el tiempo corre cada vez más deprisa hacia un desastre humanitario para los niños en Sudán del Sur", ha prevenido la directora adjunta de Programas de Emergencia de UNICEF, Yasmin Haque, que acaba de regresar de Sudán del Sur.
"La gente que conocimos en Nyal, en el estado de Unidad, se había refugiado en pequeñas islas rodeadas de agua. No había tomado una comida decente en 75 días, y sobrevivía con nueces de palma, raíces silvestres y tallos y semillas de lirio", ha explicado en un comunicado.
"Algunos trataban de tejer redes para pescar. Los niños pequeños se encontraban en una situación desesperada, algunos tuvieron que correr para salvar sus vidas y en el proceso quedaron separados de sus familias. Fue muy triste ver eso", ha relatado.
UNICEF ha subrayado que unos 250.000 sursudaneses ya han huido a países vecinos --Uganda, Etiopía, Sudán y Kenia-- para escapar de los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes partidarios del exvicepresidente Riek Machar. Además, hay más de 700.000 desplazados internos. La gran mayoría de todos ellos son mujeres y niños.
La agencia de la ONU ha alertado de que el comienzo de las lluvias hace inaccesible por carretera gran parte del país, a la vez que vuelve más difícil y mucho más costoso la llegada por vía aérea de suministros vitales a las personas cuando los caminos se vuelven intransitables.
Además, el refugio, el saneamiento deficiente y las enfermedades trasmitidas por el agua suponen una mayor presión a las áreas superpobladas de Sudán del Sur y en países vecinos.
"Además de la violencia y las violaciones que han sufrido los niños durante casi 100 días, ahora el riesgo es mayor que nunca por las enfermedades y la desnutrición", ha subrayado Haque. "El tiempo se agota para los niños de la nación más nueva del mundo: necesitamos mejores recursos, mejor acceso, paz y seguridad. Los niños no pueden esperar", ha reclamado.
El Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) ha advertido este miércoles de que a menos que la situación humanitaria en Sudán del Sur mejore rápida y radicalmente para los niños y sus familias, casi un millón de personas se enfrentará a "una crisis aún mayor", tanto en el interior del país como en los vecinos.
"Con las lluvias anuales acercándose rápidamente, el tiempo corre cada vez más deprisa hacia un desastre humanitario para los niños en Sudán del Sur", ha prevenido la directora adjunta de Programas de Emergencia de UNICEF, Yasmin Haque, que acaba de regresar de Sudán del Sur.
"La gente que conocimos en Nyal, en el estado de Unidad, se había refugiado en pequeñas islas rodeadas de agua. No había tomado una comida decente en 75 días, y sobrevivía con nueces de palma, raíces silvestres y tallos y semillas de lirio", ha explicado en un comunicado.
"Algunos trataban de tejer redes para pescar. Los niños pequeños se encontraban en una situación desesperada, algunos tuvieron que correr para salvar sus vidas y en el proceso quedaron separados de sus familias. Fue muy triste ver eso", ha relatado.
UNICEF ha subrayado que unos 250.000 sursudaneses ya han huido a países vecinos --Uganda, Etiopía, Sudán y Kenia-- para escapar de los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes partidarios del exvicepresidente Riek Machar. Además, hay más de 700.000 desplazados internos. La gran mayoría de todos ellos son mujeres y niños.
La agencia de la ONU ha alertado de que el comienzo de las lluvias hace inaccesible por carretera gran parte del país, a la vez que vuelve más difícil y mucho más costoso la llegada por vía aérea de suministros vitales a las personas cuando los caminos se vuelven intransitables.
Además, el refugio, el saneamiento deficiente y las enfermedades trasmitidas por el agua suponen una mayor presión a las áreas superpobladas de Sudán del Sur y en países vecinos.
"Además de la violencia y las violaciones que han sufrido los niños durante casi 100 días, ahora el riesgo es mayor que nunca por las enfermedades y la desnutrición", ha subrayado Haque. "El tiempo se agota para los niños de la nación más nueva del mundo: necesitamos mejores recursos, mejor acceso, paz y seguridad. Los niños no pueden esperar", ha reclamado.