Un joven 'revive' tras permanecer 'muerto' 90 minutos
Bogotá, EP
La milagrosa historia bíblica de 'Lázaro, levántate y anda' se repitió una vez más en Bogotá. Esta vez en la localidad de Suba, donde Julio Alberto Melo, un joven de 24 años, luego de recibir una electrocución, permaneció literalmente muerto por un lapso de 90 minutos, después de los cuales sus signos vitales se restablecieron y su corazón volvió a palpitar con regularidad.
El milagroso hecho se produjo en el hospital Nuevo Suba. "El paciente ingresa sin signos vitales al área de urgencias. Es sacado dos o tres veces de paros cardiorrespiratorios. Se le hacen maniobras de reanimación básica y avanzada. La descarga eléctrica atraviesa órganos vitales, dentro de estos órganos estaba afectado el corazón. Este empieza a hacer ritmos anormales. Al cabo de los 90 minutos sus ritmos cardiacos y sus signos vitales se restablecieron. Clínicamente el paciente llegó sin vida", indicó el doctor Gabriel Puello, coordinador del área de urgencias y Atención Prehospitalaria del centro asistencial.
En la tarde del jueves, Julio Alberto Melo se encontraba en la casa de un primo suyo en el barrio Almendros de Suba. Estaba ayudándole a sus familiares a bajar unos elementos para botarlos, entre esos un tubo metálico.
En el momento de manipular dicho elemento, la punta de éste tocó los cables de alta tensión y Julio recibió un descarga cercana a los 11.400 voltios. "A Julio la corriente lo botó como a dos metros y no se volvió a mover. En ese momento él se murió. Fue terrible, porque la corriente le salió por los pies tan fuerte que le rompió la suela de los zapatos", narró su hermana Yolanda Melo.
Los familiares de este hombre llamaron a la Policía. Los uniformados llegaron al lugar, lo alzaron y se lo llevaron hacia el hospital, en donde ingresó sin signos vitales. Llegó muerto.
Un milagro. "Yo sé que Julio se va a recuperar. Y cuando lo haga, él va a ser muy fuerte. Lo que le pasó es un milagro de Dios. Él está para cosas grandes", dijo su hermana con un aire de esperanza que se podía ver en sus brillantes ojos.
Alrededor de este hecho, que muchos catalogan como milagroso y que clínicamente también se puede determinar como un caso extraño, están todos los familiares de Julio rezando para que su recuperación sea completa y así puedan terminar felizmente este hecho que hoy todos catalogan como el segundo 'Lázaro' de Bogotá.
Hace pocos meses, en Kennedy, otro milagro similar despertó la curiosidad de la gente con la historia del 'Zarco', en Corabastos. Un padre de familia que resucitó tras haber estado clínicamente muerto durante 45 minutos a causa de una puñalada en el corazón.
La milagrosa historia bíblica de 'Lázaro, levántate y anda' se repitió una vez más en Bogotá. Esta vez en la localidad de Suba, donde Julio Alberto Melo, un joven de 24 años, luego de recibir una electrocución, permaneció literalmente muerto por un lapso de 90 minutos, después de los cuales sus signos vitales se restablecieron y su corazón volvió a palpitar con regularidad.
El milagroso hecho se produjo en el hospital Nuevo Suba. "El paciente ingresa sin signos vitales al área de urgencias. Es sacado dos o tres veces de paros cardiorrespiratorios. Se le hacen maniobras de reanimación básica y avanzada. La descarga eléctrica atraviesa órganos vitales, dentro de estos órganos estaba afectado el corazón. Este empieza a hacer ritmos anormales. Al cabo de los 90 minutos sus ritmos cardiacos y sus signos vitales se restablecieron. Clínicamente el paciente llegó sin vida", indicó el doctor Gabriel Puello, coordinador del área de urgencias y Atención Prehospitalaria del centro asistencial.
En la tarde del jueves, Julio Alberto Melo se encontraba en la casa de un primo suyo en el barrio Almendros de Suba. Estaba ayudándole a sus familiares a bajar unos elementos para botarlos, entre esos un tubo metálico.
En el momento de manipular dicho elemento, la punta de éste tocó los cables de alta tensión y Julio recibió un descarga cercana a los 11.400 voltios. "A Julio la corriente lo botó como a dos metros y no se volvió a mover. En ese momento él se murió. Fue terrible, porque la corriente le salió por los pies tan fuerte que le rompió la suela de los zapatos", narró su hermana Yolanda Melo.
Los familiares de este hombre llamaron a la Policía. Los uniformados llegaron al lugar, lo alzaron y se lo llevaron hacia el hospital, en donde ingresó sin signos vitales. Llegó muerto.
Un milagro. "Yo sé que Julio se va a recuperar. Y cuando lo haga, él va a ser muy fuerte. Lo que le pasó es un milagro de Dios. Él está para cosas grandes", dijo su hermana con un aire de esperanza que se podía ver en sus brillantes ojos.
Alrededor de este hecho, que muchos catalogan como milagroso y que clínicamente también se puede determinar como un caso extraño, están todos los familiares de Julio rezando para que su recuperación sea completa y así puedan terminar felizmente este hecho que hoy todos catalogan como el segundo 'Lázaro' de Bogotá.
Hace pocos meses, en Kennedy, otro milagro similar despertó la curiosidad de la gente con la historia del 'Zarco', en Corabastos. Un padre de familia que resucitó tras haber estado clínicamente muerto durante 45 minutos a causa de una puñalada en el corazón.