ONU alerta: el cambio climático es innegable, hay que actuar
Yokohama, dpa
“No lo sabíamos”. Ni políticos ni ciudadanos se pueden escudar ahora en estas palabras cuando vean el impacto del cambio climático en la naturaleza y en las personas. Nunca antes un informe había mostrado de forma tan clara las consecuencias de una falta de actuación como el presentado hoy en Yokohama por el el Grupo Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC).
No obstante, los investigadores siguen viendo posibilidades de que se pueda frenar en hasta dos grados el calentamiento global y posteriormente trabajar en la inaplazable adaptación a una subida de las temperaturas.
“No podemos seguir escogiendo entre reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptación. Necesitamos las dos”
“No podemos seguir escogiendo entre reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptación. Necesitamos las dos”, advierte Kaisa Kosonen de Greenpeace International.
Con ello se resume lo que más de 300 autores principales han intentado condensar en la segunda parte del quinto informe sobre el cambio climático. Con todo, la ecologista Kosonen se aferra a la esperanza: “Un creciente número de personas, comunidades, empresas e inversores en todo el mundo ya se están moviendo en tanto y en cuanto emplean energías más limpias, seguras y renovables y exigen a los gobiernos que los apoyen”.
“El informe habla de los costes económicos del cambio climático. Pero los verdaderos costes no se pueden exponer sólo en dinero”, agregó el nepalés Sandeep Chamling Rai de WWF. “No puede haber una clara exposición de costes para la pérdida de un marido, una madre, un hijo o un hija; por la pérdida de un hogar donde nuestros parientes han vivido durante siglos; por la pérdida de un ecosistema, que mantiene nuestra vida en la tierra y que nosotros llamamos hogar”.
Las posibles consecuencias del cambio climático no afectarán al planeta dentro de unos años, como hasta ahora: Ya hoy aumenta la cifra de personas que viven en grandes urbes, sobre todo en la periferia, donde los servicios básicos suelen ser deficientes. Y el ser humano no sólo roba a otras especies su hábitat sino que también explota los mares. “No sólo hay señales climáticas, sino también factores de riesgo sociales y evoluciones sociales que aumentan los riesgos de un impacto negativo“, señala uno de los autores del informe, Joern Birkmann, de la universidad de Naciones Unidas en Bonn.
Y podría afectar muy negativamente sobre todo a las personas más pobres, señala el documento. “Si por ejemplo se registran temporales devastadores en Filipinas, esas personas no tienen la fuerza suficiente ni el dinero para volver a reconstruir edificios”, señala Birkmann. El informe apunta asimismo el futuro peligro de conflictos sociales a raíz del cambio climático.
Pero los investigadores también arrojan algún que otro haz de luz: “Una creciente parte de la población reconoce que apostar siempre por el coche y el avión no es bueno para el medio ambiente ni para la salud propia”, señala Wolfgang Cramer, que desde hace poco trabaja en el instituto de investigación francés CNRS en Aix-en-Provence. Hasta en China se percibe esto.
El cambio climático que ha provocado el ser humano tiene ya consecuencias graves en todos los continentes y los océanos. “Lo que suponíamos hace cinco u ocho años se confirma ahora”, destaca otra de las científicas que ha participado en el informe, Daniela Jacob, del Climate Service Center en Hamburgo, y recuerda las fuertes precitaciones y sequías en Europa.
El argentino Vicente R. Barros, que codirigió el reporte, destacó asimismo que uno de los principales riesgos del cambio climático es la falta de preparación para sus consecuencias.
El cambio climático se está convirtiendo en una amenaza creciente para la humanidad ya que causa daños en viviendas, propiedades, altera el acceso a alimentos y agua y fuerza migraciones, según el IPCC.
“En muchos casos no estamos preparados para hacer frente a los riesgos que estamos enfrentado por el cambio climático. Las inversiones en una mejor preparación pueden reportar dividendos tanto para el presente como para el futuro”.
Y el presidente del IPCC, Rajendra Pachauri, concluye: “Nadie en este planeta se va a librar del impacto del cambio climático”.
“No lo sabíamos”. Ni políticos ni ciudadanos se pueden escudar ahora en estas palabras cuando vean el impacto del cambio climático en la naturaleza y en las personas. Nunca antes un informe había mostrado de forma tan clara las consecuencias de una falta de actuación como el presentado hoy en Yokohama por el el Grupo Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC).
No obstante, los investigadores siguen viendo posibilidades de que se pueda frenar en hasta dos grados el calentamiento global y posteriormente trabajar en la inaplazable adaptación a una subida de las temperaturas.
“No podemos seguir escogiendo entre reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptación. Necesitamos las dos”
“No podemos seguir escogiendo entre reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptación. Necesitamos las dos”, advierte Kaisa Kosonen de Greenpeace International.
Con ello se resume lo que más de 300 autores principales han intentado condensar en la segunda parte del quinto informe sobre el cambio climático. Con todo, la ecologista Kosonen se aferra a la esperanza: “Un creciente número de personas, comunidades, empresas e inversores en todo el mundo ya se están moviendo en tanto y en cuanto emplean energías más limpias, seguras y renovables y exigen a los gobiernos que los apoyen”.
“El informe habla de los costes económicos del cambio climático. Pero los verdaderos costes no se pueden exponer sólo en dinero”, agregó el nepalés Sandeep Chamling Rai de WWF. “No puede haber una clara exposición de costes para la pérdida de un marido, una madre, un hijo o un hija; por la pérdida de un hogar donde nuestros parientes han vivido durante siglos; por la pérdida de un ecosistema, que mantiene nuestra vida en la tierra y que nosotros llamamos hogar”.
Las posibles consecuencias del cambio climático no afectarán al planeta dentro de unos años, como hasta ahora: Ya hoy aumenta la cifra de personas que viven en grandes urbes, sobre todo en la periferia, donde los servicios básicos suelen ser deficientes. Y el ser humano no sólo roba a otras especies su hábitat sino que también explota los mares. “No sólo hay señales climáticas, sino también factores de riesgo sociales y evoluciones sociales que aumentan los riesgos de un impacto negativo“, señala uno de los autores del informe, Joern Birkmann, de la universidad de Naciones Unidas en Bonn.
Y podría afectar muy negativamente sobre todo a las personas más pobres, señala el documento. “Si por ejemplo se registran temporales devastadores en Filipinas, esas personas no tienen la fuerza suficiente ni el dinero para volver a reconstruir edificios”, señala Birkmann. El informe apunta asimismo el futuro peligro de conflictos sociales a raíz del cambio climático.
Pero los investigadores también arrojan algún que otro haz de luz: “Una creciente parte de la población reconoce que apostar siempre por el coche y el avión no es bueno para el medio ambiente ni para la salud propia”, señala Wolfgang Cramer, que desde hace poco trabaja en el instituto de investigación francés CNRS en Aix-en-Provence. Hasta en China se percibe esto.
El cambio climático que ha provocado el ser humano tiene ya consecuencias graves en todos los continentes y los océanos. “Lo que suponíamos hace cinco u ocho años se confirma ahora”, destaca otra de las científicas que ha participado en el informe, Daniela Jacob, del Climate Service Center en Hamburgo, y recuerda las fuertes precitaciones y sequías en Europa.
El argentino Vicente R. Barros, que codirigió el reporte, destacó asimismo que uno de los principales riesgos del cambio climático es la falta de preparación para sus consecuencias.
El cambio climático se está convirtiendo en una amenaza creciente para la humanidad ya que causa daños en viviendas, propiedades, altera el acceso a alimentos y agua y fuerza migraciones, según el IPCC.
“En muchos casos no estamos preparados para hacer frente a los riesgos que estamos enfrentado por el cambio climático. Las inversiones en una mejor preparación pueden reportar dividendos tanto para el presente como para el futuro”.
Y el presidente del IPCC, Rajendra Pachauri, concluye: “Nadie en este planeta se va a librar del impacto del cambio climático”.