Ledesma no apareció por Boca, tendría el rostro golpeado
Buenos Aires, Olé
La primera consecuencia tras los golpes entre Agustín Orion y Pablo Ledesma fue la ausencia del volante en la práctica del sábado y que se decidió que será liberado hasta el martes…
No se lo vio. En la práctica matutina del sábado en Casa Amarilla junto con los otros no concentrados, Pablo Ledesma no apareció, al igual que ocurrió el viernes tras el cruce. La primera consecuencia tras los golpes de puño entre Agustín Orion y el volante, luego de la conferencia de prensa del viernes, fue ésa: en Boca se preocuparon por evitar que se viera el rostro del jugador, que no quedó bien tras el encontronazo y por esa razón no asistirá al club hasta el martes. La foto de Ledesma golpeado, además de la confirmación de todo lo contado, sería un golpe más para Boca.
En su encuentro con la prensa del viernes antes de la práctica vespertina, el volante cordobés señaló al arquero como el posible alcahuete del plantel. Orion no se bancó la acusación y encaró a su compañero a los golpes. Luego, llegaron las palabras de Riquelme y el asado nocturno del plantel. Y este sábado, en la práctica, las primeras consecuencias.
La primera consecuencia tras los golpes entre Agustín Orion y Pablo Ledesma fue la ausencia del volante en la práctica del sábado y que se decidió que será liberado hasta el martes…
No se lo vio. En la práctica matutina del sábado en Casa Amarilla junto con los otros no concentrados, Pablo Ledesma no apareció, al igual que ocurrió el viernes tras el cruce. La primera consecuencia tras los golpes de puño entre Agustín Orion y el volante, luego de la conferencia de prensa del viernes, fue ésa: en Boca se preocuparon por evitar que se viera el rostro del jugador, que no quedó bien tras el encontronazo y por esa razón no asistirá al club hasta el martes. La foto de Ledesma golpeado, además de la confirmación de todo lo contado, sería un golpe más para Boca.
En su encuentro con la prensa del viernes antes de la práctica vespertina, el volante cordobés señaló al arquero como el posible alcahuete del plantel. Orion no se bancó la acusación y encaró a su compañero a los golpes. Luego, llegaron las palabras de Riquelme y el asado nocturno del plantel. Y este sábado, en la práctica, las primeras consecuencias.