Análisis DPA: Ancelotti y Martino, dos técnicos exigidos ante la lupa del Clásico
El “superclásico” del domingo pondrá su lupa más gigante sobre los banquillos, donde Carlo Ancelotti y Gerardo Martino afrontan un duelo de estrategas bajo la imperiosa necesidad de obtener un triunfo que arroje luz sobre sus diferentes urgencias.
Si Ancelotti necesita la victoria para reivindicarse al frente del banquillo del Real Madrid, a Martino le urge el triunfo en un momento en el que se duda hasta de su vínculo con el Barcelona para la próxima temporada. El resultado dejará “tocado” al perdedor.
El italiano fue muy claro el martes al ser preguntado por el equipo ante el nuevo “superclásico”: “No voy a complicar las cosas”.
Pero sin duda nadie aparece más exigido que Martino. No sólo porque el Barcelona afronta el riesgo de quedar casi sin opciones al título de la Liga española, pues una derrota le situaría a siete puntos de los blancos, sino porque la confianza en el argentino quedaría seriamente dañada entre sus hinchas.
“Ahora mismo hay serias dudas sobre la continuidad para la próxima temporada del entrenador de Rosario. Ni siquiera tener un contrato firmado hasta 2015 es garantía de que siga porque el acuerdo se puede rescindir por ambas partes hasta el 31 de mayo. Las últimas informaciones apuntan a que en junio abandonará el club”, explicó esta semana el diario “El País”.
Son días muy duros para Martino, quien ya comenzó a escuchar los nombres de eventuales sustitutos para la próxima temporada. Comenzó recibiendo críticas por su forma de vestir nada más llegar a Barcelona y ahora los análisis se centran en su forma de dirigir a su equipo.
Por ejemplo, está la gestión de su plantel y las famosas “rotaciones”. Y ahora llega la hora de tomar decisiones trascendentes en las alineaciones, con la duda de Neymar. Parece que será titular ante el Real Madrid, aunque en diversas encuestas de los medios su hinchada pidió abrumadoramente la inclusión en el once de Pedro o Alexis Sánchez.
En estos tiempos de “entreguerras”, Martino varió su apuesta inicial del 4-3-3 para pasar a jugar con un 4-4-2, con Cesc Fábregas en la medular y con Messi junto a un único acompañante. Así jugó los últimos partidos importantes del Barcelona y seguramente repita tal apuesta en el “superclásico”.
El resultado del sorteo de Liga de Campeones celebrado hoy, con el Atlético de Madrid como rival en cuartos, no hizo sino dar más motivos de preocupación para el entrenador argentino.
Al menos, Martino siente el apoyo incondicional del vestuario y hoy el arquero Víctor Valdés defendió su capacidad: “Además de que me identifico mucho con su forma de ser y con su forma de entrenar, sería un acierto que siguiera. Aunque eso lo tengan que decidir el club y él. Pero sería una grata noticia el hecho de que siga”.
Muy diferente es la situación de Ancelotti, quien no tiene dudas para el duelo porque hace meses que encontró la alineación y el esquema que le gustan. Y el tiempo -que en fútbol se mide en resultados- parece darle la razón.
Precisamente, el Real Madrid perdió su último partido de la temporada en el duelo disputado el 26 de octubre ante el Barcelona en el Camp Nou. Entonces el equipo blanco cayó por 2-1 y las críticas a Ancelotti fueron feroces por “experimentos” que no funcionaron, como poner a Sergio Ramos de mediocentro o a Gareth Bale de delantero.
El italiano fue muy claro el martes al ser preguntado por el equipo ante el nuevo “superclásico”: “No voy a complicar las cosas”.
Sin embargo, Ancelotti necesita el respaldo del triunfo en el partido del domingo, pues el equipo arrojó dudas sobre su capacidad para ganar a rivales “grandes”.
Así, las únicas dos derrotas que sumó en la Liga española fueron ante el Barcelona y el Atlético de Madrid. Además, a este último tampoco fue capaz de vencerlo el 2 de marzo (2-2), con lo que perdió el “goal-average” particular.
Su estadística personal ante el Barcelona tampoco le deja en buen lugar, pues en su carrera profesional sólo ganó un partido de los siete disputados ante el conjunto azulgrana.
