Sergio García lidera el asalto al fortín de San Mamés
Bilbao, As
El Athletic ya no es imbatible en su nuevo campo. El Espanyol, con un imperial Sergio García a la cabeza, ganó con justicia un partido en el que supo imponer su orden e intensidad ante un rival que no supo cómo hincarle el diente. Los leones perdieron una oportunidad de oro de escaparse en su lucha por la Champions.
Sergio García sembró el pánico desde el inicio. Armó su zurda para avisar a Iraizoz y a la segunda puso el 0-1 tras un derroche de clase. Hizo un gran control en carrera a pase de Simao y definió con categoría de disparo cruizado. Los periquitos maniataron al Athletic con una fuerte presión arriba y obligaron a Iraizoz a golpear en largo. La sombra del ausente Iturraspe fue alargada.
Hubo dos postes antes del descanso, uno de Aduriz, que expulsado por el quisquilloso Undiano, y otro de Stuani. Gurpegui, coreado en el minuto 18 por el maltrato en el lío con Cristiano, hizo el 1-1 en un remate de fe. Pero Colotto acabó con el fortín en un córner.
El Athletic ya no es imbatible en su nuevo campo. El Espanyol, con un imperial Sergio García a la cabeza, ganó con justicia un partido en el que supo imponer su orden e intensidad ante un rival que no supo cómo hincarle el diente. Los leones perdieron una oportunidad de oro de escaparse en su lucha por la Champions.
Sergio García sembró el pánico desde el inicio. Armó su zurda para avisar a Iraizoz y a la segunda puso el 0-1 tras un derroche de clase. Hizo un gran control en carrera a pase de Simao y definió con categoría de disparo cruizado. Los periquitos maniataron al Athletic con una fuerte presión arriba y obligaron a Iraizoz a golpear en largo. La sombra del ausente Iturraspe fue alargada.
Hubo dos postes antes del descanso, uno de Aduriz, que expulsado por el quisquilloso Undiano, y otro de Stuani. Gurpegui, coreado en el minuto 18 por el maltrato en el lío con Cristiano, hizo el 1-1 en un remate de fe. Pero Colotto acabó con el fortín en un córner.