Piden declarar a vicepresidente de Argentina por supuesto tráfico de influencias
Buenos Aires, AFP
El fiscal Jorge Di Lello solicitó al juez que el vicepresidente de Argentina, Amado Boudou, declare como acusado en la llamada causa Ciccone por supuestas "negociaciones incompatibles" con la función pública.
La causa judicial contra el vicepresidente lo ha colocado bajo un intenso escrutinio público debido al supuesto trato de favor que dio a una imprenta de dinero.
Boudou es sospechoso de haber intercedido para que una compañía impresora de dinero que había quebrado, Ciccone Calcográfica, fuera condonada por el fisco y quedase en manos de un empresario acusado de ser su testaferro.
El fiscal también pidió la declaración del jefe de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray.
Ahora el juez que lleva la causa, Ariel Lijo, tendrá que decidir si acepta la solicitud, en su totalidad o en parte, aunque también podría no pronunciarse sobre el pedido.
Según el corresponsal de BBC Mundo en Buenos Aires, Ignacio de los Reyes, los niveles de popularidad de Boudou han caído vertiginosamente en los últimos años por los escándalos de supuesta corrupción y tratos de favor.
"El número dos de Cristina Fernández, exministro de Economía y conocido por su meteórico ascenso en política, apenas participa ya en actos públicos y es uno de los objetivos preferidos de los críticos del gobierno", dice De los Reyes.
"Otras figuras del ejecutivo, como el jefe de gabinete Jorge Capitanich o el ministro de Economía, Axel Kicillof, parecen haber asumido la agenda de la administración Kirchner y son quienes acompañan a menudo a la mandataria en sus grandes anuncios”, asegura el corresponsal.
El fiscal Jorge Di Lello solicitó al juez que el vicepresidente de Argentina, Amado Boudou, declare como acusado en la llamada causa Ciccone por supuestas "negociaciones incompatibles" con la función pública.
La causa judicial contra el vicepresidente lo ha colocado bajo un intenso escrutinio público debido al supuesto trato de favor que dio a una imprenta de dinero.
Boudou es sospechoso de haber intercedido para que una compañía impresora de dinero que había quebrado, Ciccone Calcográfica, fuera condonada por el fisco y quedase en manos de un empresario acusado de ser su testaferro.
El fiscal también pidió la declaración del jefe de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray.
Ahora el juez que lleva la causa, Ariel Lijo, tendrá que decidir si acepta la solicitud, en su totalidad o en parte, aunque también podría no pronunciarse sobre el pedido.
Según el corresponsal de BBC Mundo en Buenos Aires, Ignacio de los Reyes, los niveles de popularidad de Boudou han caído vertiginosamente en los últimos años por los escándalos de supuesta corrupción y tratos de favor.
"El número dos de Cristina Fernández, exministro de Economía y conocido por su meteórico ascenso en política, apenas participa ya en actos públicos y es uno de los objetivos preferidos de los críticos del gobierno", dice De los Reyes.
"Otras figuras del ejecutivo, como el jefe de gabinete Jorge Capitanich o el ministro de Economía, Axel Kicillof, parecen haber asumido la agenda de la administración Kirchner y son quienes acompañan a menudo a la mandataria en sus grandes anuncios”, asegura el corresponsal.