La Casa Blanca tacha de "aberrante" la ley antigay de Uganda
Washington, EP
La Casa Blanca ha condenado la promulgación de la "aberrante" ley de Uganda que penaliza las relaciones homosexuales y ha reclamado su derogación, toda vez que considera que supone un retroceso tanto en materia de Derechos Humanos como de protección de la salud pública.
El presidente ugandés, Yoweri Museveni, ha firmado este lunes la ley que aumenta las penas de prisión contra los homosexuales, incluyendo la cadena perpetua para aquellos que 'reincidan', y que castiga a familiares y allegados que no denuncien estas prácticas.
El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, ha lamentado en una declaración que Museveni, "en lugar de ponerse del lado de la libertad, la justicia y la igualdad de derechos", lleve a su país un paso atrás con una ley que "criminaliza" la homosexualidad.
En este sentido, Carney ha reiterado las palabras del presidente estadounidense, Barack Obama, y ha calificado la nueva normativa de un "agravio" y un "peligro" para la comunidad gay residente en el país africano.
Esta "aberrante" ley, según Carney, demuestra la falta de compromiso del Gobierno de Uganda con los Derechos Humanos de su población y conlleva perjuicios para la salud pública, especialmente en lo referente la prevención del VIH.
La Casa Blanca ha condenado la promulgación de la "aberrante" ley de Uganda que penaliza las relaciones homosexuales y ha reclamado su derogación, toda vez que considera que supone un retroceso tanto en materia de Derechos Humanos como de protección de la salud pública.
El presidente ugandés, Yoweri Museveni, ha firmado este lunes la ley que aumenta las penas de prisión contra los homosexuales, incluyendo la cadena perpetua para aquellos que 'reincidan', y que castiga a familiares y allegados que no denuncien estas prácticas.
El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, ha lamentado en una declaración que Museveni, "en lugar de ponerse del lado de la libertad, la justicia y la igualdad de derechos", lleve a su país un paso atrás con una ley que "criminaliza" la homosexualidad.
En este sentido, Carney ha reiterado las palabras del presidente estadounidense, Barack Obama, y ha calificado la nueva normativa de un "agravio" y un "peligro" para la comunidad gay residente en el país africano.
Esta "aberrante" ley, según Carney, demuestra la falta de compromiso del Gobierno de Uganda con los Derechos Humanos de su población y conlleva perjuicios para la salud pública, especialmente en lo referente la prevención del VIH.