El Valencia de Pizzi golpeó duro al Betis de Calderón
El festival de juego y tantos del Valencia, en su mejor partido de la temporada, propició una goleada ante el Betis, que nunca tuvo opción de dar réplica a su rival y que se queda con esta derrota muy tocado en la última posición de la tabla.
El partido fue un monólogo del conjunto que dirige el argentino Juan Antonio Pizzi y tuvo en los dos goles de los minutos finales del primer tiempo y en las facilidades defensivas del Betis, que no logra enderezar el también argentino Gabriel Calderón, algunas de las claves del triunfo local.
La reacción visitante al principio del segundo periodo fue insuficiente, no estuvo acompañada de ocasiones de gol y dejó terreno al contragolpe del Valencia para convertir la victoria en goleada.
La primera mitad ya fue un ejercicio de intensidad por parte del Valencia ante un Betis que solo se mostró tímidamente en los primeros diez minutos de juego.
A partir de ese momento, el Valencia tomó la batuta del encuentro y a base de sacrificio, pelea y control del balón fue capaz de meter al rival atrás y acercarse con frecuencia a la portería del conjunto andaluz.
Esta dinámica estaba marcada por el control del balón por parte de Dani Parejo y por la profundidad por las bandas del argelino Sofiane Feghouli y, sobre todo, del argentino Pablo Piatti, que contribuían a las llegadas del Valencia a las proximidades de la meta de Antonio Adán, aunque faltaba claridad en las acciones de los locales para abrir el tanteador.
El dominio del Valencia se intensificó en los diez frenéticos minutos previos al descanso, en los que dispuso de cuatro claras ocasiones de gol, dos de las cuales acabaron con los tantos marcados por el francés Jeremy Mathieu, de cabeza a la salida de un córner, y Paco Alcácer tras una jugada por la derecha tres minutos después.
Además, Adán hizo una gran parada en un remate del chileno Eduardo Vargas y Piatti no marcó pese a regatear al portero del equipo sevillano. Cuando más disfrutaban el Valencia y su público, el árbitro pitó el descanso.
El Betis se fue al vestuario muy castigado por su poca llegada, por la forma en la que el Valencia le arrolló y, sobre todo, por los dos tantos recibidos en los cinco minutos finales del primer periodo.
La entrada de Jorge Molina por el congoleño Cedrick Mabwati en el descanso dio un aire diferente al Betis, que fue capaz de controlar el balón, algo que no había hecho en la primera mitad, y que dispuso en el minuto 50 de su primera ocasión en un cabezazo de Antonio Amaya que repelió Alves.
El Betis estaba obligado a arriesgar y empezó a jugar más cerca de la portería del Valencia, lo que propició algunos contragolpes del conjunto local, que se encontraba cómodo cuando disponía de espacios.
En uno de ellos, una gran jugada entre Parejo y Alcácer fue culminada por Feghouli, que hizo el tercer gol de su equipo, frenó la tibia reacción de los béticos y prácticamente resolvió el partido cinco minutos antes de que Alcácer hiciera el 4-0.
El partido estaba sentenciado, pero faltaba, en una nueva contra, el estreno goleador de Vargas en la Liga española, ya que suyo fue el quinto gol del Valencia.