El Papa Francisco quiere que el Vaticano sea "un administrador fiel y prudente"
Roma, EP
El Papa Francisco ha instituido una nueva Secretaría de Economía del Vaticano a partir de un Motu Proprio, un decreto titulado 'Fidelis dispensator et prudens', una cita bíblica del Evangelio de Lucas que significa 'Administrador fiel y prudente', que informa sobre un cambio en la gestión y control de los bienes del Vaticano.
En el documento el Papa explica que "como el administrador fiel y prudente tiene el deber de cuidar todo lo que sido confiado", así también "la Iglesia sabe que tiene una responsabilidad de tutelar y gestionar con atención los propios bienes". El Papa remarca que esa gestión tiene que ser "a la luz de la misión de evangelización" y tiene que desarrollarse en particular "hacia los necesitados".
El Motu Proprio, firmado de puño y letra por Francisco, añade que "la gestión económica y financiera de la Santa Sede está íntimamente ligada a la misión específica de la Iglesia" que no sólo implica "el servicio al ministerio universal del Papa" sino que también contempla "el bien común", en la perspectiva "del desarrollo integral de la persona".
El Papa explica que tras haber considerado "atentamente" los resultados del trabajo de la Comisión sobre la estructura económico-administrativa de la Santa Sede y haber "consultado" con el Consejo de cardenales para la reforma apostólica, el grupo de los ocho, y con el Consejo de cardenales para el estudio de los problemas organizativos y económicos de la Santa Sede establece, el grupo de los 15, ha decidido instituir una nueva estructura para coordinar los asuntos económicos del Vaticano.
El Motu Proprio confirma en detalle lo que ya había adelantado el director de la Oficina de Prensa del Vaticano, el padre Federico Lombardi. Concretamente, se crean dos instituciones económicas nuevas: el Consejo para la Economía y la Secretaría para la Economía.
El Consejo para la Economía tiene como función "ofrecer orientaciones sobre la gestión económica y vigilar las estructuras y las actividades administrativas y financieras de los dicasterios de la Curia Romana y de las instituciones de la Santa Sede".
El documento especifica que este Consejo estará compuesto por 15 miembros, 8 de los cuales serán "elegidos entre los cardenales y los obispos" y los otros 7 "son expertos laicos de varias nacionalidades, con competencias financieras y reconocida profesionalidad". Además, detalla que este consejo estará presidido por un cardenal coordinador.
La otra institución económica es la Secretaría para la Economía, que "teniendo en cuenta lo establecido por el Consejo para la Economía", responde directamente ante el Papa y "actúa como control económico y vigilancia" sobre los órganos económicos y sobre los procedimientos políticos de gestión.
El Papa subraya en el Motu Proprio que el cardenal australiano, George Pell, Prefecto de Economía, colaborará con el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, y será ayudado a su vez por un Prelado Secretario General. El documento también hace referencia a la figura de Revisor General, que tendrá que revisar las cuentas y balances del Vaticano.
En cuanto a los estatutos, el Motu Proprio aclara que el cardenal Prefecto, George Pell, será el responsable de las decisiones últimas tomadas por el Consejo de Economía, de la Secretaría para la Economía y del Revisor General.
EL IOR "NO ES EL BANCO DEL VATICANO"
Según ha explicado Lombardi, se confirma además el rol de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA) como Banco Central del Vaticano, con las obligaciones y responsabilidades de las instituciones análogas en el mundo. "El APSA ha sido de hecho siempre --indicó el padre Lombardi-- el banco de la Santa Sede, puesto que administra los bienes muebles e inmuebles" aunque "nunca se haya dicho así, oficialmente".
"Sobre el IOR, por ahora no se han dado informaciones", ha indicado el portavoz, al tiempo que ha precisado que este ente "no es el banco del Vaticano".
El Papa Francisco ha instituido una nueva Secretaría de Economía del Vaticano a partir de un Motu Proprio, un decreto titulado 'Fidelis dispensator et prudens', una cita bíblica del Evangelio de Lucas que significa 'Administrador fiel y prudente', que informa sobre un cambio en la gestión y control de los bienes del Vaticano.
En el documento el Papa explica que "como el administrador fiel y prudente tiene el deber de cuidar todo lo que sido confiado", así también "la Iglesia sabe que tiene una responsabilidad de tutelar y gestionar con atención los propios bienes". El Papa remarca que esa gestión tiene que ser "a la luz de la misión de evangelización" y tiene que desarrollarse en particular "hacia los necesitados".
El Motu Proprio, firmado de puño y letra por Francisco, añade que "la gestión económica y financiera de la Santa Sede está íntimamente ligada a la misión específica de la Iglesia" que no sólo implica "el servicio al ministerio universal del Papa" sino que también contempla "el bien común", en la perspectiva "del desarrollo integral de la persona".
El Papa explica que tras haber considerado "atentamente" los resultados del trabajo de la Comisión sobre la estructura económico-administrativa de la Santa Sede y haber "consultado" con el Consejo de cardenales para la reforma apostólica, el grupo de los ocho, y con el Consejo de cardenales para el estudio de los problemas organizativos y económicos de la Santa Sede establece, el grupo de los 15, ha decidido instituir una nueva estructura para coordinar los asuntos económicos del Vaticano.
El Motu Proprio confirma en detalle lo que ya había adelantado el director de la Oficina de Prensa del Vaticano, el padre Federico Lombardi. Concretamente, se crean dos instituciones económicas nuevas: el Consejo para la Economía y la Secretaría para la Economía.
El Consejo para la Economía tiene como función "ofrecer orientaciones sobre la gestión económica y vigilar las estructuras y las actividades administrativas y financieras de los dicasterios de la Curia Romana y de las instituciones de la Santa Sede".
El documento especifica que este Consejo estará compuesto por 15 miembros, 8 de los cuales serán "elegidos entre los cardenales y los obispos" y los otros 7 "son expertos laicos de varias nacionalidades, con competencias financieras y reconocida profesionalidad". Además, detalla que este consejo estará presidido por un cardenal coordinador.
La otra institución económica es la Secretaría para la Economía, que "teniendo en cuenta lo establecido por el Consejo para la Economía", responde directamente ante el Papa y "actúa como control económico y vigilancia" sobre los órganos económicos y sobre los procedimientos políticos de gestión.
El Papa subraya en el Motu Proprio que el cardenal australiano, George Pell, Prefecto de Economía, colaborará con el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, y será ayudado a su vez por un Prelado Secretario General. El documento también hace referencia a la figura de Revisor General, que tendrá que revisar las cuentas y balances del Vaticano.
En cuanto a los estatutos, el Motu Proprio aclara que el cardenal Prefecto, George Pell, será el responsable de las decisiones últimas tomadas por el Consejo de Economía, de la Secretaría para la Economía y del Revisor General.
EL IOR "NO ES EL BANCO DEL VATICANO"
Según ha explicado Lombardi, se confirma además el rol de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA) como Banco Central del Vaticano, con las obligaciones y responsabilidades de las instituciones análogas en el mundo. "El APSA ha sido de hecho siempre --indicó el padre Lombardi-- el banco de la Santa Sede, puesto que administra los bienes muebles e inmuebles" aunque "nunca se haya dicho así, oficialmente".
"Sobre el IOR, por ahora no se han dado informaciones", ha indicado el portavoz, al tiempo que ha precisado que este ente "no es el banco del Vaticano".