Aun hay riesgo de otro alud en Morochata

La Paz, ABI
El vicepresidente Álvaro García Linera alertó este lunes que aún hay riesgo de deslizamiento en el municipio de Morochata, departamento de Cochabamba, donde el sábado parte de un cerro que cayó sepultó a 14 personas, destruyó viviendas y se llevó cultivos y animales.


“En la zona llueve y hay riesgos de que continúe el deslizamiento es un pedazo de cerro que se desprendió y como está húmedo y está lloviendo, aún hay riesgo”, dijo en una breve conferencia de prensa en la ciudad de Oruro.

El Vicepresidente confirmó que el Jefe de Estado Evo Morales se dirigió personalmente a esa zona para realizar un sobrevuelo, llevar ayuda a las familias damnificadas y activar el rescate de las víctimas del deslizamiento.

Por esa razón pidió “comprensión” al pueblo orureño, por la ausencia de Morales en los actos oficiales por los 233 años de la gesta libertaria de esa región altiplánica del país, a los que se prevé -dijo- se sumará a media mañana.

“Desde las 5 de la mañana el presidente Evo se trasladó a Cochabamba para coordinar personalmente el sistema de ayuda a la población que ha sido afectada por el derrumbe en Morochata donde hubo cuatro decesos confirmados”, mencionó.

Informó que quienes ayudaban en Morochata a “sacar” los cuerpos con las manos detuvieron su trabajo, pero de acuerdo con el comportamiento del clima deberán reanudar su labor para dar con los desaparecidos.

De manera general, García Linera reportó que las lluvias continúan castigando al país, en particular a Cochabamba, Beni y el Norte de La Paz, “que serían los tres departamentos que han presentado mayores dificultades”.

La premisa señaló es “salvar la vida”, por lo que Defensa Civil se encuentra movilizada y lleva ayuda, alimentos, medicamentos, entre otros, a las familias afectadas.

Posteriormente, señaló, tendrá que venir la reposición de los cultivos dañados, de las vías, las viviendas 'pero eso vendrá después', ya que el objetivo es 'socorrer a los hermanos que están en desgracia'.

Agregó que son cerca a 44.000 familias afectadas en distintas circunstancias en el país.

En el caso de Trinidad afirmó que 'estamos muy atentos' porque el río sigue creciendo y como la superficie es gredosa no absorbe el agua, a lo que se suma el caudal que baja de la cordillera.

“Estamos haciendo seguimiento a los problemas que pudieran haber en Rurrenabaque, Reyes y Guayaramerín y Riberalta porque el agua de los ríos convergen”, finalizó.

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