Knox asegura que no volverá a Italia de forma voluntaria
La joven estadounidense recibió la noticia como un mazazo y dice que luchará hasta el final por su inocencia y libertad
Yolanda Monge
Washington, El País
Amanda Knox solo volverá a Italia obligada por la fuerza para cumplir la condena de 28 años y seis meses de cárcel impuesta el jueves por un tribunal italiano por el asesinato de la británica Meredith Kercher en 2007 en Perugia (Italia), donde ambas eran estudiantes. Sin poder reprimir la angustia e intentando controlar un acceso de llanto, Knox declaró en el programa matinal de ABC Good Morning America que no era “justo” lo que estaba pasando y que no volverá “voluntariamente”. "Lucharé hasta el final" por mi libertad e inocencia, añadió.
Se definió “triste” y “asustada” tras conocer la nueva sentencia –Knox ya fue encontrada culpable del crimen en 2009 y dejada en libertad en 2011-, que dijo fue como "un mazazo". “No contaba con ello, esperaba mucho más de la justicia italiana, que ya me encontró inocente antes”, prosiguió en una entrevista en la que le costó mantener la calma. “¿Cómo pueden decir que hay culpabilidad más allá de cualquier duda razonable”, preguntó frente a su entrevistadora. La condena del Tribunal de Apelaciones de Florencia también declaró culpable al exnovio de Knox, Raffaele Sollecito, del asesinato de Kercher.
Según sus abogados, Knox recibió la noticia en su ciudad natal de Seattle (oeste de EEUU) “sin llorar, ni hablar”, se mantuvo “impertérrita”, declaró el letrado Carlo Dalla Vedova. El abogado aseguró que recurrirán la sentencia ante el Supremo. La nueva condena abre las puertas a una posible extradición de Knox si Italia así lo quisiera.
Pero tanto Knox como Sollecito pueden volver a pelear por su libertad e inocencia frente a la máxima corte italiana, ya que ningún caso es considerado final hasta que el Supremo dicta su veredicto. Hasta ese momento, la joven estadounidense de 26 años puede esperar la decisión en su casa en el Estado de Washington sin temor a ser detenida, pero si el Supremo de Italia confirma su condena tendrá muy difícl luchar contra la extradición, en un caso que además será muy mediático.
Yolanda Monge
Washington, El País
Amanda Knox solo volverá a Italia obligada por la fuerza para cumplir la condena de 28 años y seis meses de cárcel impuesta el jueves por un tribunal italiano por el asesinato de la británica Meredith Kercher en 2007 en Perugia (Italia), donde ambas eran estudiantes. Sin poder reprimir la angustia e intentando controlar un acceso de llanto, Knox declaró en el programa matinal de ABC Good Morning America que no era “justo” lo que estaba pasando y que no volverá “voluntariamente”. "Lucharé hasta el final" por mi libertad e inocencia, añadió.
Se definió “triste” y “asustada” tras conocer la nueva sentencia –Knox ya fue encontrada culpable del crimen en 2009 y dejada en libertad en 2011-, que dijo fue como "un mazazo". “No contaba con ello, esperaba mucho más de la justicia italiana, que ya me encontró inocente antes”, prosiguió en una entrevista en la que le costó mantener la calma. “¿Cómo pueden decir que hay culpabilidad más allá de cualquier duda razonable”, preguntó frente a su entrevistadora. La condena del Tribunal de Apelaciones de Florencia también declaró culpable al exnovio de Knox, Raffaele Sollecito, del asesinato de Kercher.
Según sus abogados, Knox recibió la noticia en su ciudad natal de Seattle (oeste de EEUU) “sin llorar, ni hablar”, se mantuvo “impertérrita”, declaró el letrado Carlo Dalla Vedova. El abogado aseguró que recurrirán la sentencia ante el Supremo. La nueva condena abre las puertas a una posible extradición de Knox si Italia así lo quisiera.
Pero tanto Knox como Sollecito pueden volver a pelear por su libertad e inocencia frente a la máxima corte italiana, ya que ningún caso es considerado final hasta que el Supremo dicta su veredicto. Hasta ese momento, la joven estadounidense de 26 años puede esperar la decisión en su casa en el Estado de Washington sin temor a ser detenida, pero si el Supremo de Italia confirma su condena tendrá muy difícl luchar contra la extradición, en un caso que además será muy mediático.