El Rayo Vallecano pone la posesión y el Villarreal los goles
Villarreal, As
Más vale llegar a tiempo que rondar cien años”, dice uno de los populares refranes patrios. Rayo y Villarreal lo cumplieron ayer en Vallecas al pie de la letra. La posesión del balón fue apabullantemente favorable al equipo franjirrojo, que rondó continuamente la meta de Asenjo. Gálvez mandó el balón al larguero en el saque de una falta en el minuto siete, pero los que estuvieron en el sitio oportuno en el momento justo fueron Uche y Perbet, que en los dos primeros avances del Submario amarillo torpedearon la línea de flotación rayista en un par de minutos, los que van de diez al doce.
El merodear vallecano por el área de Asenjo tuvo continuación inmediata pese al varapalo recibido. Saúl y Lass hicieron lucirse a Asenjo. El meta del Villarreal, sin embargo, volvió a agradecer la ayuda que le prestó la madera cuando Jonathan Viera estrelló el balón en el poste derecho.
“Se han juntado el hambre con las ganas de comer”, afirma otro refrán que se aplicó igualmente a pies juntillas. Y es que el Rayo hizo muchas cosas bien, pero sigue cometiendo errores infantiles a la hora de defender. A eso se unió la efectividad del Villarreal. Baste como ejemplo lo sucedido en el primer tiempo, pues el cuadro amarillo hizo tres goles en cuatro ocasiones. Perbet corrigió en el 41’ el error que había cometido seis minutos antes, para hacer el tercer tanto.
Por si había alguna duda, Uche completó su primer hat-trick en Primera. Los dos goles de Nery Castillo se quedan casi en anecdóticos en un equipo necesitado de mejor puntería ante el marco contrario.
La tradición se cumplió en Vallecas, donde el Villarreal no sabe qué es perder en Primera. Lo negativo para el equipo amarillo fue la lesión de Dorado, al que tuvieron que trasladar al hospital Gregorio Marañón para efectuarles pruebas tras recibir un golpe en la cabeza tras un encontronazo con su compañero Asenjo.
Más vale llegar a tiempo que rondar cien años”, dice uno de los populares refranes patrios. Rayo y Villarreal lo cumplieron ayer en Vallecas al pie de la letra. La posesión del balón fue apabullantemente favorable al equipo franjirrojo, que rondó continuamente la meta de Asenjo. Gálvez mandó el balón al larguero en el saque de una falta en el minuto siete, pero los que estuvieron en el sitio oportuno en el momento justo fueron Uche y Perbet, que en los dos primeros avances del Submario amarillo torpedearon la línea de flotación rayista en un par de minutos, los que van de diez al doce.
El merodear vallecano por el área de Asenjo tuvo continuación inmediata pese al varapalo recibido. Saúl y Lass hicieron lucirse a Asenjo. El meta del Villarreal, sin embargo, volvió a agradecer la ayuda que le prestó la madera cuando Jonathan Viera estrelló el balón en el poste derecho.
“Se han juntado el hambre con las ganas de comer”, afirma otro refrán que se aplicó igualmente a pies juntillas. Y es que el Rayo hizo muchas cosas bien, pero sigue cometiendo errores infantiles a la hora de defender. A eso se unió la efectividad del Villarreal. Baste como ejemplo lo sucedido en el primer tiempo, pues el cuadro amarillo hizo tres goles en cuatro ocasiones. Perbet corrigió en el 41’ el error que había cometido seis minutos antes, para hacer el tercer tanto.
Por si había alguna duda, Uche completó su primer hat-trick en Primera. Los dos goles de Nery Castillo se quedan casi en anecdóticos en un equipo necesitado de mejor puntería ante el marco contrario.
La tradición se cumplió en Vallecas, donde el Villarreal no sabe qué es perder en Primera. Lo negativo para el equipo amarillo fue la lesión de Dorado, al que tuvieron que trasladar al hospital Gregorio Marañón para efectuarles pruebas tras recibir un golpe en la cabeza tras un encontronazo con su compañero Asenjo.