El Parlamento ucraniano restringe las protestas en las calles
Kiev, EP
El Parlamento ucraniano ha aprobado este jueves una ley que restringe las protestas en las calles, en una decisión que ha provocado numerosas críticas por parte de la oposición, que también ha lamentado la forma en la que se ha realizado la votación, a mano alzada.
La normativa, respaldada por 235 de los 450 parlamentarios, prohíbe la instalación de tiendas de campaña sin autorizar, escenarios o altavoces en las zonas públicas del país, estableciendo multas de hasta 640 dólares (470 euros) o 15 días de cárcel.
Además, los manifestantes y organizaciones que proporcionen instalaciones o equipamiento para encuentros sin autorizar podrán ser condenados al pago de una multa de 1.275 dólares (937 euros) o enfrentarse a una pena de diez días en prisión.
La negativa del presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, a firmar un tratado de libre comercio con la Unión Europea el pasado mes de noviembre para no afectar a su relación con Rusia, provocó que cientos de miles de ucranianos saliesen a las calles como señal de protesta.
Pese a que el número de manifestantes ha disminuido desde entonces, y a pesar de la celebración del Año Nuevo y la Navidad ortodoxa en el país, centenares de ucranianos continúan acampados en la plaza principal de Kiev o en edificios públicos de las calles adyacentes.
Además, varios políticos opositores suelen emplear un escenario montado en la plaza para lanzar mensajes de apoyo a los manifestantes. La nueva normativa, que presumiblemente será firmada por Yanukovich en los próximos días, convertirá estos actos en ilegales.
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
La decisión del Parlamento ha sido tomada rápidamente, mediante una votación a mano alzada que ha cogido a los miembros de la oposición desprevenidos. La presentación de la normativa ha tenido lugar después de una prohibición judicial sobre las protestas en la capital, por lo que la represión policial ante las manifestaciones podrá ser inminente.
El líder opositor ucraniano, el boxeador Vitali Klitschko, ha criticado que "lo que ha sucedido hoy en el Parlamento es una violación a las leyes. "No tienen ninguna base legal", ha afirmado el político, uno de los principales rivales de Yanukovich.
En la misma línea, el político nacionalista de extrema derecha Oleh Tiahnibok ha afirmado que la votación ha sido "simplemente una usurpación del poder".
La normativa también recoge la prohibición de la difusión de información "extremistas", además de recoger el delito de difamación y calumnias, que podrá obligar a los manifestantes a eliminar los grafiti y pancartas en los que ridiculizan a Yanukovich a los demás miembros de su Gobierno.
A estas críticas se ha unido también el embajador de la Unión Europea en Ucrania, Jan Tombinsky, que ha mostrado su preocupación por la manera en la que ha sido aprobada la normativa, a través de una votación a mano alzada en vez del sistema electrónico habitual.
"Estoy preocupado por la manera en la que se han votado algunas leyes hoy en el Parlamento. Las normas deberían ser adoptadas a través de procedimientos adecuados, de otra manera la credibilidad de las instituciones democráticas y del sistema legal están en juego", ha afirmado Tombinsky mediante un comunicado.
El Parlamento ucraniano ha aprobado este jueves una ley que restringe las protestas en las calles, en una decisión que ha provocado numerosas críticas por parte de la oposición, que también ha lamentado la forma en la que se ha realizado la votación, a mano alzada.
La normativa, respaldada por 235 de los 450 parlamentarios, prohíbe la instalación de tiendas de campaña sin autorizar, escenarios o altavoces en las zonas públicas del país, estableciendo multas de hasta 640 dólares (470 euros) o 15 días de cárcel.
Además, los manifestantes y organizaciones que proporcionen instalaciones o equipamiento para encuentros sin autorizar podrán ser condenados al pago de una multa de 1.275 dólares (937 euros) o enfrentarse a una pena de diez días en prisión.
La negativa del presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, a firmar un tratado de libre comercio con la Unión Europea el pasado mes de noviembre para no afectar a su relación con Rusia, provocó que cientos de miles de ucranianos saliesen a las calles como señal de protesta.
Pese a que el número de manifestantes ha disminuido desde entonces, y a pesar de la celebración del Año Nuevo y la Navidad ortodoxa en el país, centenares de ucranianos continúan acampados en la plaza principal de Kiev o en edificios públicos de las calles adyacentes.
Además, varios políticos opositores suelen emplear un escenario montado en la plaza para lanzar mensajes de apoyo a los manifestantes. La nueva normativa, que presumiblemente será firmada por Yanukovich en los próximos días, convertirá estos actos en ilegales.
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
La decisión del Parlamento ha sido tomada rápidamente, mediante una votación a mano alzada que ha cogido a los miembros de la oposición desprevenidos. La presentación de la normativa ha tenido lugar después de una prohibición judicial sobre las protestas en la capital, por lo que la represión policial ante las manifestaciones podrá ser inminente.
El líder opositor ucraniano, el boxeador Vitali Klitschko, ha criticado que "lo que ha sucedido hoy en el Parlamento es una violación a las leyes. "No tienen ninguna base legal", ha afirmado el político, uno de los principales rivales de Yanukovich.
En la misma línea, el político nacionalista de extrema derecha Oleh Tiahnibok ha afirmado que la votación ha sido "simplemente una usurpación del poder".
La normativa también recoge la prohibición de la difusión de información "extremistas", además de recoger el delito de difamación y calumnias, que podrá obligar a los manifestantes a eliminar los grafiti y pancartas en los que ridiculizan a Yanukovich a los demás miembros de su Gobierno.
A estas críticas se ha unido también el embajador de la Unión Europea en Ucrania, Jan Tombinsky, que ha mostrado su preocupación por la manera en la que ha sido aprobada la normativa, a través de una votación a mano alzada en vez del sistema electrónico habitual.
"Estoy preocupado por la manera en la que se han votado algunas leyes hoy en el Parlamento. Las normas deberían ser adoptadas a través de procedimientos adecuados, de otra manera la credibilidad de las instituciones democráticas y del sistema legal están en juego", ha afirmado Tombinsky mediante un comunicado.