Conoce todo sobre el año nuevo chino que comienza esta medianoche
China, ABC
El nuevo año para los chinos, se celebra entre finales de enero y principios de febrero, este dato, así como otras curiosidades, son las claves que conocerá en la siguiente nota.
Deseos de prosperidad, fuegos artificiales, y el éxodo de al menos 3.620 millones de personas para esta celebración, son algunas de las características que describen esta ceremonia típica de las naciones asiáticas.
Esta medianoche comienza el año nuevo lunar, la festividad más importante de China y buena parte de Asia. Tras despedir a la serpiente, los chinos dan la bienvenida al año del caballo, estas son las diez principales curiosidades del año del caballo, reseñadas por el diario español ABC:
1. – ¿Por qué ahora y no el 31 de diciembre?
Al contrario que en Occidente, donde rige el calendario gregoriano, China y otros países asiáticos, como Corea, Japón o Vietnam, utilizan el calendario lunar, cuyo fin de año oscila entre finales de enero y mediados de febrero. Esta costumbre milenaria se rige por un almanaque astrológico que, al tener su origen en el calendario lunar, provoca que el primer día de cada año varíe siempre entre finales de enero y mediados de febrero y reciba también el nombre de la Fiesta de la Primavera. A tenor de dicho calendario lunar, las seis décadas que componen su siglo se dividen en ciclos de doce años, cada uno de los cuales está representado por un animal que determina la personalidad de los nacidos bajo su signo. Como para el imaginario cultural chino tiene una importancia trascendental el mito del Emperador Amarillo, considerado el ancestro de esta civilización por ser el primer rey del país allá por el año 2.697 antes de Cristo, su almanaque entra esta noche en el año 4712 (4713 según otras versiones) bajo el signo del caballo de madera.
2 – ¿Qué significa el caballo?
A diferencia de los signos mensuales del zodiaco, el horóscopo chino se basa en ciclos de doce años representados por los animales que, según la leyenda, participaron en la carrera para asistir al banquete organizado por el Emperador de Jade. Gracias a su astucia, el primero fue la rata, que engañó al buey al cruzar sobre sus lomos un río y se adelantó así también al veloz tigre, al conejo, al dragón, a la serpiente y al caballo, séptimo animal del horóscopo chino. Basándose en el «yin» y el «yang» y en los elementos básicos del universo, cada signo está marcado por un ascendente que puede ser de metal (oro), agua, madera, fuego y tierra. A partir de esta madrugada, entraremos en el Año del Caballo de madera, que se corresponde con el año 4712 del calendario lunar.
3 – ¿Cómo se celebra?
Al filo de la medianoche, los chinos se lanzarán a la calle para saludar la llegada del nuevo año con una estruendosa traca de petardos y fuegos artificiales, mientras que luego se quemará dinero de mentira en honor de los ancestros y al día siguiente se visitarán los templos para pedir al caballo lo que estos días se repite por todos los rincones del país: «Gong xi fa cai» («Te deseo que consigas mucho dinero»). Las puertas de las casas lucen adornos con buenos deseos para el año que entra.
4 – ¿Qué se come?
La tradicional cena del Año Nuevo chino está compuesta por el cerdo y el pescado para traer abundancia y buena suerte al hogar. Pero, por encima de ellos, destacan los “dumplings”, unos suculentos “raviolis” rellenos de carne, verdura o marisco que constituyen la comida típica de estas fiestas.
5 – ¿Qué regalos se hacen?
Los chinos se felicitan el año nuevo entonando el ya clásico «gong xi fa cai» («Te deseo que consigas mucho dinero») y repartiendo entre los niños y familiares sobres rojos («hongbao») llenos de billetes cuyo importe, para dar buena suerte, debe ser siempre par, excluyendo al número cuatro, asociado a la muerte porque ambas palabras tienen una pronunciación similar en mandarín. Toda esta fijación por los números demuestra que los chinos son uno de los pueblos más supersticiosos del planeta.
6 – ¿Cuánto duran las vacaciones?
Totalmente merecida, los chinos tienen fama de currantes infatigables capaces de trabajar siete días a la semana con sus respectivas noches. Pero eso no significa que no tengan vacaciones y hasta puentes. Variando según los casos, el periodo vacacional dura las dos semanas previas y posteriores al año nuevo lunar, cuando la actividad laboral decae bastante en China.
7 – ¿Cuántos chinos viajan por el año nuevo lunar?
Al ser la festividad más importante de China, millones de personas se desplazan para celebrar el año nuevo lunar con sus familiares. El Ministerio de Transportes chino calcula que durante los 40 días que dura este periodo vacacional se efectuarán 3.620 millones de desplazamientos. Sin duda, se trata del mayor éxodo del planeta. El medio más utilizado es el tren, que tomarán más de 258 millones de personas. La línea de alta velocidad más larga del mundo, que une en nueve horas los 2.300 kilómetros que separan Pekín de la ciudad sureña de Cantón, será tomada por casi dos millones y medio de pasajeros. De ellos, la mayoría son emigrantes rurales que trabajan en las ciudades y vuelven a sus casas en sus únicas vacaciones del año. Además de los viajes en coche, que colapsan las carreteras, circularán 860.000 autobuses por todo el país y zarparán 21.000 barcos, mientras que 400.000 chinos volarán en avión durante estas fechas.
8 – ¿Qué ven los chinos por televisión en el año nuevo lunar?
La tradicional gala de la Fiesta de la Primavera de la televisión estatal CCTV es el programa más visto del mundo junto a las ceremonias de inauguración de los Juegos Olímpicos, las finales de los Mundiales de Fútbol y la Superbowl. Aunque ha perdido gran parte de su tirón por la proliferación de cadenas privadas y regionales que emiten sus propias gales, se calcula que la ven una media de 300 millones de espectadores y 770 millones en su momento de máxima audiencia. Controlada por el régimen, se trata de un espacio de cuatro horas de duración al servicio de la propaganda que fomenta el nacionalismo y ensalza al Partido Comunista y al Ejército mediante actuaciones musicales, pero que también incluye algunos números con cierta crítica social y bastante moralina.
9 – ¿Quiénes son caballos y cómo son?
Son caballos los nacidos en 1906, 1918, 1930, 1942, 1954, 1966, 1978, 1990 y 2002. Entre ellos destacan algunos de los principales líderes mundiales, como la canciller alemana, Angela Merkel; el presidente francés, François Hollande; el primer ministro japonés, Shinzo Abe; y el «premier» británico, David Cameron. Además, son caballos el actor estadounidense Harrison Ford, la actriz Halle Berry, la actriz y cantante Barbra Streisand, el cantante británico y exBeatle Paul MacCartney, y el boxeador filipino Manny Pacquiao. El caballo significa sorpresa, aventura y romance. Se supone que los nacidos bajo su signo son buenos comunicadores, amables e independientes, pero también demasiado habladores a veces y muy impacientes.
10 – ¿Qué se espera para este año?
Los maestros de «feng shui» prevén para 2014 un año plagado de conflictos y desastres relacionados con el ascendente de fuego que trae el caballo de madera. Además de predecir catástrofes naturales, como volcanes y terremotos que podrían afectar a Japón, Indonesia y China, los futurólogos alertan de un recrudecimiento de la tensión diplomática entre Pekín y Tokio a cuenta de las disputadas islas Senkaku-Diaoyu. Particularmente turbulentos serán los meses de febrero, mayo y agosto, que podrían ver una escalada militar en Asia. De hecho, los adivinos recuerdan que durante el último año del caballo de madera, que fue en 1954, tuvo lugar la humillante derrota de las tropas francesas en la Batalla de Dien Bien Phu, que finalmente llevó a la independencia de Vietnam. Y en el anterior año del caballo de madera, que fue 1894, empezó la Primera Guerra Chino-Japonesa, un augurio nada prometedor para este 2014. En el terreno económico, los maestros de «feng shui» vaticinan una recuperación de los países occidentales y una ralentización de las potencias emergentes, con notables turbulencias bursátiles pese a las buenas perspectivas que el caballo traerá para los sectores relacionados con la madera.
El nuevo año para los chinos, se celebra entre finales de enero y principios de febrero, este dato, así como otras curiosidades, son las claves que conocerá en la siguiente nota.
Deseos de prosperidad, fuegos artificiales, y el éxodo de al menos 3.620 millones de personas para esta celebración, son algunas de las características que describen esta ceremonia típica de las naciones asiáticas.
Esta medianoche comienza el año nuevo lunar, la festividad más importante de China y buena parte de Asia. Tras despedir a la serpiente, los chinos dan la bienvenida al año del caballo, estas son las diez principales curiosidades del año del caballo, reseñadas por el diario español ABC:
1. – ¿Por qué ahora y no el 31 de diciembre?
Al contrario que en Occidente, donde rige el calendario gregoriano, China y otros países asiáticos, como Corea, Japón o Vietnam, utilizan el calendario lunar, cuyo fin de año oscila entre finales de enero y mediados de febrero. Esta costumbre milenaria se rige por un almanaque astrológico que, al tener su origen en el calendario lunar, provoca que el primer día de cada año varíe siempre entre finales de enero y mediados de febrero y reciba también el nombre de la Fiesta de la Primavera. A tenor de dicho calendario lunar, las seis décadas que componen su siglo se dividen en ciclos de doce años, cada uno de los cuales está representado por un animal que determina la personalidad de los nacidos bajo su signo. Como para el imaginario cultural chino tiene una importancia trascendental el mito del Emperador Amarillo, considerado el ancestro de esta civilización por ser el primer rey del país allá por el año 2.697 antes de Cristo, su almanaque entra esta noche en el año 4712 (4713 según otras versiones) bajo el signo del caballo de madera.
2 – ¿Qué significa el caballo?
A diferencia de los signos mensuales del zodiaco, el horóscopo chino se basa en ciclos de doce años representados por los animales que, según la leyenda, participaron en la carrera para asistir al banquete organizado por el Emperador de Jade. Gracias a su astucia, el primero fue la rata, que engañó al buey al cruzar sobre sus lomos un río y se adelantó así también al veloz tigre, al conejo, al dragón, a la serpiente y al caballo, séptimo animal del horóscopo chino. Basándose en el «yin» y el «yang» y en los elementos básicos del universo, cada signo está marcado por un ascendente que puede ser de metal (oro), agua, madera, fuego y tierra. A partir de esta madrugada, entraremos en el Año del Caballo de madera, que se corresponde con el año 4712 del calendario lunar.
3 – ¿Cómo se celebra?
Al filo de la medianoche, los chinos se lanzarán a la calle para saludar la llegada del nuevo año con una estruendosa traca de petardos y fuegos artificiales, mientras que luego se quemará dinero de mentira en honor de los ancestros y al día siguiente se visitarán los templos para pedir al caballo lo que estos días se repite por todos los rincones del país: «Gong xi fa cai» («Te deseo que consigas mucho dinero»). Las puertas de las casas lucen adornos con buenos deseos para el año que entra.
4 – ¿Qué se come?
La tradicional cena del Año Nuevo chino está compuesta por el cerdo y el pescado para traer abundancia y buena suerte al hogar. Pero, por encima de ellos, destacan los “dumplings”, unos suculentos “raviolis” rellenos de carne, verdura o marisco que constituyen la comida típica de estas fiestas.
5 – ¿Qué regalos se hacen?
Los chinos se felicitan el año nuevo entonando el ya clásico «gong xi fa cai» («Te deseo que consigas mucho dinero») y repartiendo entre los niños y familiares sobres rojos («hongbao») llenos de billetes cuyo importe, para dar buena suerte, debe ser siempre par, excluyendo al número cuatro, asociado a la muerte porque ambas palabras tienen una pronunciación similar en mandarín. Toda esta fijación por los números demuestra que los chinos son uno de los pueblos más supersticiosos del planeta.
6 – ¿Cuánto duran las vacaciones?
Totalmente merecida, los chinos tienen fama de currantes infatigables capaces de trabajar siete días a la semana con sus respectivas noches. Pero eso no significa que no tengan vacaciones y hasta puentes. Variando según los casos, el periodo vacacional dura las dos semanas previas y posteriores al año nuevo lunar, cuando la actividad laboral decae bastante en China.
7 – ¿Cuántos chinos viajan por el año nuevo lunar?
Al ser la festividad más importante de China, millones de personas se desplazan para celebrar el año nuevo lunar con sus familiares. El Ministerio de Transportes chino calcula que durante los 40 días que dura este periodo vacacional se efectuarán 3.620 millones de desplazamientos. Sin duda, se trata del mayor éxodo del planeta. El medio más utilizado es el tren, que tomarán más de 258 millones de personas. La línea de alta velocidad más larga del mundo, que une en nueve horas los 2.300 kilómetros que separan Pekín de la ciudad sureña de Cantón, será tomada por casi dos millones y medio de pasajeros. De ellos, la mayoría son emigrantes rurales que trabajan en las ciudades y vuelven a sus casas en sus únicas vacaciones del año. Además de los viajes en coche, que colapsan las carreteras, circularán 860.000 autobuses por todo el país y zarparán 21.000 barcos, mientras que 400.000 chinos volarán en avión durante estas fechas.
8 – ¿Qué ven los chinos por televisión en el año nuevo lunar?
La tradicional gala de la Fiesta de la Primavera de la televisión estatal CCTV es el programa más visto del mundo junto a las ceremonias de inauguración de los Juegos Olímpicos, las finales de los Mundiales de Fútbol y la Superbowl. Aunque ha perdido gran parte de su tirón por la proliferación de cadenas privadas y regionales que emiten sus propias gales, se calcula que la ven una media de 300 millones de espectadores y 770 millones en su momento de máxima audiencia. Controlada por el régimen, se trata de un espacio de cuatro horas de duración al servicio de la propaganda que fomenta el nacionalismo y ensalza al Partido Comunista y al Ejército mediante actuaciones musicales, pero que también incluye algunos números con cierta crítica social y bastante moralina.
9 – ¿Quiénes son caballos y cómo son?
Son caballos los nacidos en 1906, 1918, 1930, 1942, 1954, 1966, 1978, 1990 y 2002. Entre ellos destacan algunos de los principales líderes mundiales, como la canciller alemana, Angela Merkel; el presidente francés, François Hollande; el primer ministro japonés, Shinzo Abe; y el «premier» británico, David Cameron. Además, son caballos el actor estadounidense Harrison Ford, la actriz Halle Berry, la actriz y cantante Barbra Streisand, el cantante británico y exBeatle Paul MacCartney, y el boxeador filipino Manny Pacquiao. El caballo significa sorpresa, aventura y romance. Se supone que los nacidos bajo su signo son buenos comunicadores, amables e independientes, pero también demasiado habladores a veces y muy impacientes.
10 – ¿Qué se espera para este año?
Los maestros de «feng shui» prevén para 2014 un año plagado de conflictos y desastres relacionados con el ascendente de fuego que trae el caballo de madera. Además de predecir catástrofes naturales, como volcanes y terremotos que podrían afectar a Japón, Indonesia y China, los futurólogos alertan de un recrudecimiento de la tensión diplomática entre Pekín y Tokio a cuenta de las disputadas islas Senkaku-Diaoyu. Particularmente turbulentos serán los meses de febrero, mayo y agosto, que podrían ver una escalada militar en Asia. De hecho, los adivinos recuerdan que durante el último año del caballo de madera, que fue en 1954, tuvo lugar la humillante derrota de las tropas francesas en la Batalla de Dien Bien Phu, que finalmente llevó a la independencia de Vietnam. Y en el anterior año del caballo de madera, que fue 1894, empezó la Primera Guerra Chino-Japonesa, un augurio nada prometedor para este 2014. En el terreno económico, los maestros de «feng shui» vaticinan una recuperación de los países occidentales y una ralentización de las potencias emergentes, con notables turbulencias bursátiles pese a las buenas perspectivas que el caballo traerá para los sectores relacionados con la madera.