Séptima victoria consecutiva de la Juventus ante un flojo Bolonia
La Juventus de Antonio Conte saltó al césped del Renato Dall’Ara de Bolonia con un once compuesto por alguno de los jugadores menos habituales. Además de las bajas obligadas por lesión de Pirlo y Giovinco, el hecho de que el vigente campeón de la Serie A se juegue este martes en Estambul frente al Galatasaray el pase a octavos de final de la Champions League obligó al técnico italiano a dejar en el banquillo de inicio a Bonucci, Tévez y Llorente. Enfrente, el Bolonia partía con el objetivo de sumar algún punto para mantenerse fuera de los puestos de descenso.
Nada más producirse el pitido inicial, los 'bianconeri' se adueñaron del control de la pelota, dando muestras de la mejora que ha experimentado en el último mes tras un inicio de temporada algo dubitativo. Sin crear grandes ocasiones, la Juve ofrecía sensación de peligro cada vez que pisaba el área de Curci, quien se vio obligado a intervenir en el minuto 2 para despejar un peligroso centro raso por la derecha del chileno Mauricio Isla, que reapareció tras haber causado baja las dos últimas semanas.
Diez minutos después Marchisio consiguió superar al portero local, pero la poca velocidad que imprimió al balón permitió que la zaga lograra despejarlo. No obstante el peligro continuaba, lo que aprovechó Arturo Vidal para controlar en el área un gran envío de Federico Peluso desde la frontal y batir por el palo corto a Curci. El chileno celebró su recién anunciada renovación hasta 2017 para conseguir su sexto tanto liguero, undécimo en lo que va de curso tras los cinco que acumula en Europa.
El gol hizo que los visitantes rebajasen su intensidad, lo que permitió que el Bolonia pasase a dominar el choque mediado el primer tiempo. Dos duros disparos de Diamanti resueltos con sendos despejes de Buffon acabaron en saques de esquina para los de Stefano Pioli, quienes reclamaron un penalti por mano de Vucinic. El colegiado Mazzoleni acertó al no señalarlo. Poco después, el propio delantero montenegrino se tuvo que marchar lesionado, saltando Fernando Llorente al verde en su lugar.
Tras la reanudación, el dominio de la Juventus se acrecentó. Pese a la necesidad de los locales por intentar conseguir el empate, según transcurrían los minutos el peligro de los hombres de Conte aumentaba, aprovechando los espacios en la línea defensiva de tres jugadores del Bolonia. Marchisio y Asamoah, quien entró al terreno de juego en sustitución de Peluso, tuvieron buenas ocasiones para lograr un segundo tanto que se resistió hasta casi el final de la contienda.
Sin embargo fue Fernando Llorente el futbolista que más cerca estuvo de conseguirlo. El ex del Athletic cada vez se encuentra más adaptado al esquema de su nuevo equipo, lo que refleja un aumento de su confianza a la hora de intentar encarar a los centrales rivales, ofrecerse como referencia ofensiva y aguantar el balón de espaldas para habilitar a sus compañeros. Curci frustró un zurdazo primero y un remate con la pierna derecha desde el interior del área después al internacional español. Para su frustración, el guardameta transalpino acabaría sacándole un mano a mano a cinco minutos del final tras recibir un pase de Tévez.
Antes de esta última gran ocasión del riojano, se produjeron los dos únicos acercamientos del Bolonia en toda la segunda mitad. Cristaldo con un remate raso que rozó el palo derecho de Buffon y un cabezazo picado de Morleo, quien se adelantó a un despistado Isla, que se marchó por encima del travesaño.
No hubiera resultado justo por lo visto en el campo la igualada local, de igual forma que sí lo fue el definitivo 2-0 de la 'vecchia signora'. Chiellini remató magistralmente un córner botado por Carlos Tévez a cinco minutos del final para consolidar el liderato de su equipo, que ya suma siete triunfos ligueros consecutivos -todos ellos sin encajar goles en contra- y ver de esta manera aumentada su moral de cara al trascendental choque de Liga de Campeones frente al Galatasaray.
