Suspensión interactiva: la clave del éxito de Sebastian Vettel
Suspensión interactiva: la clave del éxito de Sebastian Vettel Ampliar La superioridad de los Red Bull está siendo manifiesta también en el espectacular circuito de Yas Marina, donde Vettel vuela de nuevo.
Abu Dhabi, El País
Las pantallas de la sala de prensa del circuito de Abu Dhabi muestran un coche azul moviéndose de un lado a otro del trazado sin apenas dificultad. En ese instante tengo que salir fuera, a ver la pista real, el ruido, los coches que van rodando al límite y los pilotos jugándose la vida. De otra manera pareciera que estamos en un videojuego y un niño maneja los hilos de este deporte. Parece fácil. Llevar ese Red Bull de Vettel, ganar título tras título. No lo es. Pero pocos pueden afirmar que el monoplaza del alemán no tiene algo con lo que los demás sueñan, algo que le permite disponer de una cifra que es parte de su éxito: veinte metros.
Durante el año, sobre todo después del GP de Singapur, los equipos y analistas han intentado encontrar el secreto. Hay distintas versiones y pudimos analizar otra más, que ya había recogido 'Auto Motor und Sport' y que fue confirmada a este diario por ingenieros de otras escuderías: la suspensión hidráulica interactiva.
Gracias a ese invento de Newey y los suyos, Vettel ha dispuesto de veinte metros de diferencia con el resto, distancia que le ofrece una extraordinaria capacidad de tracción. Ya lo dijo Hamilton en Corea: "El coche de Vettel sale veinte metros antes que el mío, algo que sólo podíamos hacer cuando había el control de tracción". Y ahora lo ha afirmado Grosjean, después de que el francés estuviera tras Seb en Japón e India: "Vettel y Webber podían acelerar unos veinte metros antes que los demás". Así, me vienen a la memoria conversaciones con Jaime Alguersuari, el piloto que siempre daba como favoritos a los Red Bull: "¿No te das cuenta de que pueden acelerar mucho antes que el resto? El secreto son esos veinte o treinta metros, si vieras lo que puedo hacer cuando estoy en el simulador", decía. Y es así. El invento de Red Bull no es electrónico y por tanto es legal, el coche ha pasado los controles de la FIA.
La suspensión interactiva dispone de un circuito hidráulico que conecta la suspensión de las cuatro ruedas y optimiza la aerodinámica con distintos niveles de carga. Para rentabilizar sus ventajas se necesitaban unos neumáticos resistentes y no tan blandos como los de principio de año, por eso el regreso a los Pirelli de 2012 le ha venido tan bien a este equipo, cambiar los neumáticos era vital para que el monoplaza pudiese demostrar su velocidad.
Una mejor aerodinámica, mapas de motor, cambios en los cilindros... todo eso ha ayudado, pero también el chasis y la supensión interactiva que permite que no sólo se evite el balanceo delante y detrás sino también en el eje longitudinal. Además, al estilo de pilotaje de Vettel le viene perfecto este coche, de ahí la diferencia con Webber.
Las pantallas de la sala de prensa del circuito de Abu Dhabi muestran un coche azul moviéndose de un lado a otro del trazado sin apenas dificultad. En ese instante tengo que salir fuera, a ver la pista real, el ruido, los coches que van rodando al límite y los pilotos jugándose la vida. De otra manera pareciera que estamos en un videojuego y un niño maneja los hilos de este deporte. Parece fácil. Llevar ese Red Bull de Vettel, ganar título tras título. No lo es. Pero pocos pueden afirmar que el monoplaza del alemán no tiene algo con lo que los demás sueñan, algo que le permite disponer de una cifra que es parte de su éxito: veinte metros.
Durante el año, sobre todo después del GP de Singapur, los equipos y analistas han intentado encontrar el secreto. Hay distintas versiones y pudimos analizar otra más, que ya había recogido 'Auto Motor und Sport' y que fue confirmada a este diario por ingenieros de otras escuderías: la suspensión hidráulica interactiva.
Gracias a ese invento de Newey y los suyos, Vettel ha dispuesto de veinte metros de diferencia con el resto, distancia que le ofrece una extraordinaria capacidad de tracción. Ya lo dijo Hamilton en Corea: "El coche de Vettel sale veinte metros antes que el mío, algo que sólo podíamos hacer cuando había el control de tracción". Y ahora lo ha afirmado Grosjean, después de que el francés estuviera tras Seb en Japón e India: "Vettel y Webber podían acelerar unos veinte metros antes que los demás". Así, me vienen a la memoria conversaciones con Jaime Alguersuari, el piloto que siempre daba como favoritos a los Red Bull: "¿No te das cuenta de que pueden acelerar mucho antes que el resto? El secreto son esos veinte o treinta metros, si vieras lo que puedo hacer cuando estoy en el simulador", decía. Y es así. El invento de Red Bull no es electrónico y por tanto es legal, el coche ha pasado los controles de la FIA.
La suspensión interactiva dispone de un circuito hidráulico que conecta la suspensión de las cuatro ruedas y optimiza la aerodinámica con distintos niveles de carga. Para rentabilizar sus ventajas se necesitaban unos neumáticos resistentes y no tan blandos como los de principio de año, por eso el regreso a los Pirelli de 2012 le ha venido tan bien a este equipo, cambiar los neumáticos era vital para que el monoplaza pudiese demostrar su velocidad.
Una mejor aerodinámica, mapas de motor, cambios en los cilindros... todo eso ha ayudado, pero también el chasis y la supensión interactiva que permite que no sólo se evite el balanceo delante y detrás sino también en el eje longitudinal. Además, al estilo de pilotaje de Vettel le viene perfecto este coche, de ahí la diferencia con Webber.
