Lanús pasó de golear a sufrir
Buenos Aires, Olé
Lanús, con diez suplentes, venció 3-2 a Tigre en Victoria. Lo ganaba cómodo pero el local, con uno menos, metió dos goles en el final y el Grana terminó cortando clavos.
El Melli Guillermo priorizó la Sudamericana y mandó a nueve suplentes en Victoria: sólo el arquero Marchesín y el delantero Lautaro Acosta, de los que habitualmente se pueden considerar titulares, arrancaron contra Tigre. Le alcanzó para un triunfo muy importante que lo dejó a seis puntos del líder Newell's. Todo en un partido muy atrapante, con un final inesperado: con uno menos, Tigre metió dos goles en los últimos minutos y lo que parecía victoria asegurada fue con bastante angustia.
Los primeros minutos fueron de bastante estudio, aunque la formación alternativa llevó a Lanús a tomar más precauciones. Había pocas emociones hasta que Pasquini tuvo una buena definición y marcó el uno a cero para el Granate. Más tarde, un fallo clave: Castaño cometió un foul bastante violento sobre el Laucha Acosta y recibió roja directa. Tigre la tuvo que remar con diez. La misión parecía difícil y Lanús quedó bien perfilado para ampliar de contraataque. Fue muy buena la jugada del 2-0: Blanco definió tras un pase de Acosta, gambeteó al arquero y facturó. Fue una síntesis de lo que era el partido.
Los pibes no tan pibes del Melli parecían los más experimentados: no había reacción ni personalidad de Tigre para plantearse como dominador claro. Aún con la pelota, quedaba expuesto. El 3-0 de Barrientos parecía la sentencia. Hubo partido más tarde por el golazo de Matías Pérez García, el tercero que convierte en el Inicial. Luego, Facundo Sánchez metió su primer gol en 17 partidos en Primera División, a los 42', y el final fue lo más emotivo.
Pero la reacción no fue suficiente para los de Alegre, que perdió su primer partido de local en Tigre. Para Lanús, negocio redondo: reservó energía de los principales jugadores y obtuvo un triunfo de visitante.
Lanús, con diez suplentes, venció 3-2 a Tigre en Victoria. Lo ganaba cómodo pero el local, con uno menos, metió dos goles en el final y el Grana terminó cortando clavos.
El Melli Guillermo priorizó la Sudamericana y mandó a nueve suplentes en Victoria: sólo el arquero Marchesín y el delantero Lautaro Acosta, de los que habitualmente se pueden considerar titulares, arrancaron contra Tigre. Le alcanzó para un triunfo muy importante que lo dejó a seis puntos del líder Newell's. Todo en un partido muy atrapante, con un final inesperado: con uno menos, Tigre metió dos goles en los últimos minutos y lo que parecía victoria asegurada fue con bastante angustia.
Los primeros minutos fueron de bastante estudio, aunque la formación alternativa llevó a Lanús a tomar más precauciones. Había pocas emociones hasta que Pasquini tuvo una buena definición y marcó el uno a cero para el Granate. Más tarde, un fallo clave: Castaño cometió un foul bastante violento sobre el Laucha Acosta y recibió roja directa. Tigre la tuvo que remar con diez. La misión parecía difícil y Lanús quedó bien perfilado para ampliar de contraataque. Fue muy buena la jugada del 2-0: Blanco definió tras un pase de Acosta, gambeteó al arquero y facturó. Fue una síntesis de lo que era el partido.
Los pibes no tan pibes del Melli parecían los más experimentados: no había reacción ni personalidad de Tigre para plantearse como dominador claro. Aún con la pelota, quedaba expuesto. El 3-0 de Barrientos parecía la sentencia. Hubo partido más tarde por el golazo de Matías Pérez García, el tercero que convierte en el Inicial. Luego, Facundo Sánchez metió su primer gol en 17 partidos en Primera División, a los 42', y el final fue lo más emotivo.
Pero la reacción no fue suficiente para los de Alegre, que perdió su primer partido de local en Tigre. Para Lanús, negocio redondo: reservó energía de los principales jugadores y obtuvo un triunfo de visitante.