El ministro de Defensa de Colombia descarta una reducción del presupuesto militar
Bogota, EP
Un eventual acuerdo de paz con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) no llevará al Gobierno colombiano a recortar su presupuesto militar ni a disminuir la cantidad de efectivos en sus Fuerzas Armadas, según el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.
En una entrevista concedida a Reuters, Pinzón ha defendido que ajustar el cinturón de las Fuerzas Armadas sería un "gran error" porque el país sudamericano enfrenta otras amenazas además del conflicto con el grupo rebelde, que lleva casi medio siglo y se ha cobrado la vida de más de 200.000 personas.
En un esfuerzo por acabar con el enfrentamiento, desde hace casi un año el Gobierno colombiano mantiene negociaciones en Cuba con las FARC, pero por ahora no ha habido muchos avances. Los negociadores de la guerrilla han planteado una reducción del número de efectivos de las Fuerzas Armadas y del presupuesto militar para que el Gobierno destine más recursos a inversión social en educación, salud, vivienda y empleo.
"Sería un error en un país como Colombia, de la extensión territorial que tiene y de la dificultad geográfica, reducir la capacidad de las Fuerzas Armadas", ha afirmado Pinzón, un economista de 41 años que ha sido considerado por las FARC como un palo en la rueda para las negociaciones por sus permanentes críticas al grupo que denomina "criminal y terrorista".
El presupuesto militar de Colombia para este año asciende a 25,5 billones de pesos (13.566 millones de dólares), lo que representa un 3,5 por ciento del PIB. Y para el próximo ascendería a 27,7 billones de pesos (14.702 millones de dólares).
OTROS DELITOS
"El hecho que desaparezca una organización terrorista no significa que desaparezcan muchos de los delitos de narcotráfico, de minería criminal, de extorsión, secuestro, lavado de activos, por lo mismo se van a necesitar unas Fuerzas Armadas fuertes, que estén desplegadas por todo el territorio nacional", ha argumentado Pinzón.
Colombia cuenta con 439.000 efectivos en sus Fuerzas Armadas y, según Pinzón, el presupuesto militar del país es similar al que tienen países latinoamericanos con menor territorio y sin amenazas como la guerrilla y el narcotráfico.
Sin embargo, México, un país más grande que Colombia y que también enfrenta la amenaza de las bandas de la droga, tiene un presupuesto militar este año de 6.400 millones de dólares, que se combina con uno de seguridad de 3.200 millones de dólares.
A pesar de todo, Pinzón ha opinado que se necesita aún más dinero para invertir en tecnología militar y comprar aviones de transporte, helicópteros, lanchas y vehículos.
Colombia tiene que lidiar, además de las FARC y los carteles de la droga, con otro grupo guerrillero, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), que ha pedido al Gobierno de Juan Manuel Santos entablar un proceso de negociación como el que hay con las FARC.
Estas amenazas en el frente de seguridad impiden que la economía crezca dos puntos porcentuales adicionales anuales, según cálculos del Gobierno. El PIB colombiano se expandió un 4 por ciento en 2012.
OFENSIVA MILITAR SIN TREGUA
A pesar de las negociaciones de paz, el ministro ha reiterado que la ofensiva militar contra las FARC, considerada una organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, continúa sin tregua.
Durante los más de tres años de Gobierno del presidente Juan Manuel Santos, 47 líderes de las FARC han muerto, incluido Alfonso Cano, mientras que miles de combatientes han desertado, lo que ha provocado un debilitamiento del grupo rebelde.
Se calcula que actualmente las FARC cuentan con unos 7.000 combatientes desde los 17.000 que llegó a tener a finales de la década de 1990. Pero la guerrilla no se ha quedado cruzada de brazos y en las últimas semanas lanzó una escalada de ataques contra la infraestructura petrolera y energética del país, en una aparente estrategia para mostrar su poder militar.
En opinión del ministro, esos ataques son actos "terroristas" y, ha asegurado que en los últimos meses no ha caído ninguno de los siete integrantes de la cúpula de las FARC porque están fuera de Colombia. "La mayoría no vive en Colombia, eso es real (...) muchos de los jefes de orden regional de las FARC han venido cayendo uno a uno", ha afirmado.
"Más o menos cada 45 días ha caído un cabecilla de primer nivel de las FARC y eso demuestra la dinámica de nuestras Fuerzas Militares", ha añadido. Pinzón ha preferido no nombrar los países en donde se encuentran los jefes de las FARC, incluido su máximo líder, Rodrigo Londoño, alias "Timochenko".
Por otra parte, el ministro ha elogiado la cooperación en la lucha contra el narcotráfico y los grupos armados ilegales de países como Panamá, Perú, Ecuador, Brasil y Venezuela, pero admitió que con Caracas existe espacio para mejorar la colaboración en la lucha contra la guerrilla.
En opinión de Pinzón, la guerrilla debe aprovechar el proceso de paz para reintegrarse a la sociedad ante la imposibilidad de acceder al poder por la vía de las armas. "Sólo tienen una oportunidad que es desmovilizarse, entregar sus armas y pedirle perdón al pueblo colombiano", ha concluido.
Un eventual acuerdo de paz con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) no llevará al Gobierno colombiano a recortar su presupuesto militar ni a disminuir la cantidad de efectivos en sus Fuerzas Armadas, según el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.
En una entrevista concedida a Reuters, Pinzón ha defendido que ajustar el cinturón de las Fuerzas Armadas sería un "gran error" porque el país sudamericano enfrenta otras amenazas además del conflicto con el grupo rebelde, que lleva casi medio siglo y se ha cobrado la vida de más de 200.000 personas.
En un esfuerzo por acabar con el enfrentamiento, desde hace casi un año el Gobierno colombiano mantiene negociaciones en Cuba con las FARC, pero por ahora no ha habido muchos avances. Los negociadores de la guerrilla han planteado una reducción del número de efectivos de las Fuerzas Armadas y del presupuesto militar para que el Gobierno destine más recursos a inversión social en educación, salud, vivienda y empleo.
"Sería un error en un país como Colombia, de la extensión territorial que tiene y de la dificultad geográfica, reducir la capacidad de las Fuerzas Armadas", ha afirmado Pinzón, un economista de 41 años que ha sido considerado por las FARC como un palo en la rueda para las negociaciones por sus permanentes críticas al grupo que denomina "criminal y terrorista".
El presupuesto militar de Colombia para este año asciende a 25,5 billones de pesos (13.566 millones de dólares), lo que representa un 3,5 por ciento del PIB. Y para el próximo ascendería a 27,7 billones de pesos (14.702 millones de dólares).
OTROS DELITOS
"El hecho que desaparezca una organización terrorista no significa que desaparezcan muchos de los delitos de narcotráfico, de minería criminal, de extorsión, secuestro, lavado de activos, por lo mismo se van a necesitar unas Fuerzas Armadas fuertes, que estén desplegadas por todo el territorio nacional", ha argumentado Pinzón.
Colombia cuenta con 439.000 efectivos en sus Fuerzas Armadas y, según Pinzón, el presupuesto militar del país es similar al que tienen países latinoamericanos con menor territorio y sin amenazas como la guerrilla y el narcotráfico.
Sin embargo, México, un país más grande que Colombia y que también enfrenta la amenaza de las bandas de la droga, tiene un presupuesto militar este año de 6.400 millones de dólares, que se combina con uno de seguridad de 3.200 millones de dólares.
A pesar de todo, Pinzón ha opinado que se necesita aún más dinero para invertir en tecnología militar y comprar aviones de transporte, helicópteros, lanchas y vehículos.
Colombia tiene que lidiar, además de las FARC y los carteles de la droga, con otro grupo guerrillero, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), que ha pedido al Gobierno de Juan Manuel Santos entablar un proceso de negociación como el que hay con las FARC.
Estas amenazas en el frente de seguridad impiden que la economía crezca dos puntos porcentuales adicionales anuales, según cálculos del Gobierno. El PIB colombiano se expandió un 4 por ciento en 2012.
OFENSIVA MILITAR SIN TREGUA
A pesar de las negociaciones de paz, el ministro ha reiterado que la ofensiva militar contra las FARC, considerada una organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, continúa sin tregua.
Durante los más de tres años de Gobierno del presidente Juan Manuel Santos, 47 líderes de las FARC han muerto, incluido Alfonso Cano, mientras que miles de combatientes han desertado, lo que ha provocado un debilitamiento del grupo rebelde.
Se calcula que actualmente las FARC cuentan con unos 7.000 combatientes desde los 17.000 que llegó a tener a finales de la década de 1990. Pero la guerrilla no se ha quedado cruzada de brazos y en las últimas semanas lanzó una escalada de ataques contra la infraestructura petrolera y energética del país, en una aparente estrategia para mostrar su poder militar.
En opinión del ministro, esos ataques son actos "terroristas" y, ha asegurado que en los últimos meses no ha caído ninguno de los siete integrantes de la cúpula de las FARC porque están fuera de Colombia. "La mayoría no vive en Colombia, eso es real (...) muchos de los jefes de orden regional de las FARC han venido cayendo uno a uno", ha afirmado.
"Más o menos cada 45 días ha caído un cabecilla de primer nivel de las FARC y eso demuestra la dinámica de nuestras Fuerzas Militares", ha añadido. Pinzón ha preferido no nombrar los países en donde se encuentran los jefes de las FARC, incluido su máximo líder, Rodrigo Londoño, alias "Timochenko".
Por otra parte, el ministro ha elogiado la cooperación en la lucha contra el narcotráfico y los grupos armados ilegales de países como Panamá, Perú, Ecuador, Brasil y Venezuela, pero admitió que con Caracas existe espacio para mejorar la colaboración en la lucha contra la guerrilla.
En opinión de Pinzón, la guerrilla debe aprovechar el proceso de paz para reintegrarse a la sociedad ante la imposibilidad de acceder al poder por la vía de las armas. "Sólo tienen una oportunidad que es desmovilizarse, entregar sus armas y pedirle perdón al pueblo colombiano", ha concluido.