El mejor, para la Décima
Diego López recibe un gol cada 71 minutos, mientras a Casillas solo le ha batido Llorente con el Juventus en 195 minutos
Madrid,La Opinión de Zamora
J. M. MATUTE 46 años, exactamente desde el 16 de septiembre de 1967, llevaba el Santiago Bernabeu sin acoger un partido de Liga en el que se marcaran diez goles. De aquel 9-1 a la Real Sociedad al 7-3 al Sevilla de la noche del miércoles que sirvió a Cristiano Ronaldo para reivindicarse con tres tantos ante las burlas ridículas del presidente de la FIFA y para superar ya a un mito del madridismo como Pancho Puskas en la lista de goleadores blancos en la Liga: 157 tantos en 146 partidos el portugués, por los 156 en 180 del húngaro. Para eso y para que Carlo Ancelotti comprobara de primera mano y en casa propia cómo el equipo mejora colocando a los delanteros en su puesto natural después del monumental embrollo que montó en el Camp Nou.
Ahora que el italiano ha asentado el sistema (4-1-3-1) y recuperado a Xabi Alonso, el pivote natural de este equipo y a quien Mourinho quiere para el Chelsea, el siguiente objetivo de Ancelotti no ha de ser otro que calmar a una defensa que concede goles con tremenda alegría. Un 7-3 es siempre de agradecer en bien del espectáculo, pero que al Real Madrid le hayan marcado 14 goles en sólo 11 partidos de Liga (el doble que al Barcelona, y no es por señalar...) deja en muy pobre lugar a su retaguardia. La fragilidad del equipo blanco es tal que Diego López sólo ha sido capaz de finalizar dos de sus encuentros de Liga con la portería imbatida: ante Granada y Málaga, mientras en el banquillo Casillas parece penar sus pecados de sindicalista molesto como en su día Raúl González cargó con el mismo sambenito a ojos de Florentino Pérez. Y así salió de puntillas del Bernabeu teniendo que volver tres años después a recibir su homenaje. A Diego López, que ha jugado los once partidos de Liga y 75 minutos en la Liga de Campeones ante el Galatasary tras la lesión de Casillas, le marcan esta temporada 1,27 goles por partido y un gol cada 71 minutos, en tanto a Íker sólo le ha superado Fernando Llorente (Juventus) en los 195 minutos que ha jugado en los dos partidos completos ante Juventus y Copenhague y los 15 del Galatasaray. Habrá que preguntar dentro de tres meses a Casillas por sus planes de futuro, aunque su futuro esté atado por el contrato que le vincula al Real Madrid hasta 2017. Si Casillas no fuera un canterano blanco, y habiendo sido elegido en cinco ocasiones como el mejor portero del mundo, nadie duda de que Florentino Pérez hubiera tirado de la chequera institucional para incorporarle a su galaxia. Porque vale lo que Bale.
Que Florentino Pérez prescindiera de Vicente del Bosque porque no daba el perfil de entrenador capaz de vender camisetas y que bendiga la titularidad liguera del triste Diego López, un tipo con perfil para ser pintado por El Greco, es otro misterio a resolver. Claro que en el fondo para la suplencia liguera de Casillas sí existe una respuesta sencilla: El primer objetivo del Real Madrid no puede ser otro que la conquista de la Décima, y el mejor portero está reservado por Florentino y Ancelotti a tal fin.
Madrid,La Opinión de Zamora
J. M. MATUTE 46 años, exactamente desde el 16 de septiembre de 1967, llevaba el Santiago Bernabeu sin acoger un partido de Liga en el que se marcaran diez goles. De aquel 9-1 a la Real Sociedad al 7-3 al Sevilla de la noche del miércoles que sirvió a Cristiano Ronaldo para reivindicarse con tres tantos ante las burlas ridículas del presidente de la FIFA y para superar ya a un mito del madridismo como Pancho Puskas en la lista de goleadores blancos en la Liga: 157 tantos en 146 partidos el portugués, por los 156 en 180 del húngaro. Para eso y para que Carlo Ancelotti comprobara de primera mano y en casa propia cómo el equipo mejora colocando a los delanteros en su puesto natural después del monumental embrollo que montó en el Camp Nou.
Ahora que el italiano ha asentado el sistema (4-1-3-1) y recuperado a Xabi Alonso, el pivote natural de este equipo y a quien Mourinho quiere para el Chelsea, el siguiente objetivo de Ancelotti no ha de ser otro que calmar a una defensa que concede goles con tremenda alegría. Un 7-3 es siempre de agradecer en bien del espectáculo, pero que al Real Madrid le hayan marcado 14 goles en sólo 11 partidos de Liga (el doble que al Barcelona, y no es por señalar...) deja en muy pobre lugar a su retaguardia. La fragilidad del equipo blanco es tal que Diego López sólo ha sido capaz de finalizar dos de sus encuentros de Liga con la portería imbatida: ante Granada y Málaga, mientras en el banquillo Casillas parece penar sus pecados de sindicalista molesto como en su día Raúl González cargó con el mismo sambenito a ojos de Florentino Pérez. Y así salió de puntillas del Bernabeu teniendo que volver tres años después a recibir su homenaje. A Diego López, que ha jugado los once partidos de Liga y 75 minutos en la Liga de Campeones ante el Galatasary tras la lesión de Casillas, le marcan esta temporada 1,27 goles por partido y un gol cada 71 minutos, en tanto a Íker sólo le ha superado Fernando Llorente (Juventus) en los 195 minutos que ha jugado en los dos partidos completos ante Juventus y Copenhague y los 15 del Galatasaray. Habrá que preguntar dentro de tres meses a Casillas por sus planes de futuro, aunque su futuro esté atado por el contrato que le vincula al Real Madrid hasta 2017. Si Casillas no fuera un canterano blanco, y habiendo sido elegido en cinco ocasiones como el mejor portero del mundo, nadie duda de que Florentino Pérez hubiera tirado de la chequera institucional para incorporarle a su galaxia. Porque vale lo que Bale.
Que Florentino Pérez prescindiera de Vicente del Bosque porque no daba el perfil de entrenador capaz de vender camisetas y que bendiga la titularidad liguera del triste Diego López, un tipo con perfil para ser pintado por El Greco, es otro misterio a resolver. Claro que en el fondo para la suplencia liguera de Casillas sí existe una respuesta sencilla: El primer objetivo del Real Madrid no puede ser otro que la conquista de la Décima, y el mejor portero está reservado por Florentino y Ancelotti a tal fin.
