Caza al hombre en París tras el tiroteo en el diario Libération
París, AFP
La policía francesa se desplegó este lunes en el centro de París en busca de un hombre armado que huyó tras herir gravemente a un fotógrafo en el diario Libération y que quizá disparó frente a un banco en la periferia de la capital.
Un helicóptero sobrevolaba la avenida de los Campos Elíseos mientras se señalaba la presencia de un sospechoso sucesivamente en las calles y en el metro. "El individuo representa un verdadero peligro", declaró el ministro del Interior francés, Manuel Valls, ante la sede del diario.
La policía francesa se desplegó este lunes en el centro de París en busca de un hombre armado que huyó tras herir gravemente a un fotógrafo en el diario Libération y que quizá disparó frente a un banco en la periferia de la capital.
Un helicóptero sobrevolaba la avenida de los Campos Elíseos mientras se señalaba la presencia de un sospechoso sucesivamente en las calles y en el metro. "El individuo representa un verdadero peligro", declaró el ministro del Interior francés, Manuel Valls, ante la sede del diario.
El hombre, armado con un fusil, entró este lunes por la mañana en el vestíbulo de la sede del matutino y abrió fuego, hiriendo a un colaborador del periódico antes de darse a la fuga. La víctima fue herida en el tórax y en el abdomen y la gravedad de su estado hace temer por su vida.
La policía organizó un perímetro de seguridad alrededor de la sede del diario. Poco después, efectivos de la policía se desplegaron delante de las sedes de los grandes medios de información de París, donde "la seguridad fue reforzada", informaron fuentes policiales.
Se sospecha que el mismo hombre es el autor de una agresión precedente, cometida el viernes en la sede del canal informativo BFMTV, donde profirió amenazas. Según fuentes cercanas al caso, las imágenes del sospechoso que atacó Libération "corresponden" a las del agresor de BFMTV, que amenazó con un arma a un periodista, pero no abrió fuego.
"Llegué y vi a un hombre en el suelo con sangre por todos lados y que se sujetaba el vientre. Me crucé con mis dos colegas de la recepción, que estaban lívidos y que me dijeron: 'acaban de dispararnos, nos escondimos detrás del mostrador de la recepción'", contó a AFP Anastasia Vécrin, una colaboradora de Libération.
El presidente francés,François Hollande pidió al ministro del Interior que "movilice todos los medios" necesarios para detener al o los autores de esta agresión, indicó la presidencia francesa. El ministro del Interior evocó una "escena de guerra" en el vestíbulo de Libération después del tiroteo. "Se están tomando todas las medidas para encontrar a quien ha cometido este acto y para proteger a todos los órganos de prensa de la capital", declaró la ministra francesa de Cultura, Aurélie Filippetti, en los locales del periódico. "Esta es la primera vez que un órgano de prensa es atacado de tal manera", subrayó.
Este lunes, los diarios le Parisien, le Monde, les Echos, le Figaro y la radio Europe 1 indicaron a la AFP que reforzaron sus medidas de seguridad y de acceso a sus locales. Efectivos de la policía eran visibles delante de ciertos medios, como Les Echos, Europe 1 o AFP.
"Somos los testigos horrorizados de un drama. Cuando se entra con un fusil en un periódico, es algo muy grave en una democracia, sea cual sea el estado mental de la persona", declaró a AFP el director de publicación del diario, Nicolas Demorand. "Si los diarios y los medios de información tienen que convertirse en búnkers, es que algo no anda bien en nuestra sociedad", agregó.
La policía está investigando si el sospechoso es también quien disparó este lunes al mediodía delante de un banco del barrio de La Defensa, en la periferia. Según un testigo, ese hombre estaba armado con un fusil del mismo tipo que en la agresión al periódico.
Después de la agresión armada, Libération fue víctima este lunes por la tarde de un ataque informático que impidió la actualización de su portal internet, indicaron directivos del periódico.
Este ataque, llamado de "denegación de servicio", consiste en inundar de pedidos un servidor informático hasta el punto de perturbar o incluso bloquear su funcionamiento.