Casillas, el gran damnificado de la marcha de Mourinho
Madrid, La información.com
Iker Casillas no tiene sólo un problema deportivo. Hay otro personal que está relacionado con el desafecto que le transmite la afición desde la salida del anterior entrenador, José Mourinho.
El portero no es ajeno a la división que hay entre los seguidores con el tema de la portería y que le acusan de no ser buen compañero con Diego López. Lo que peor lleva el mostoleño es que le hayan señalado, incluso culpabilizado, como el artífice de la marcha de Mourinho, un entrenador de perfil alto que conectó con la grada del Bernabéu y al que se le echa de menos por su forma de ser tan directa y pasional.
El primer palo serio que se llevó Iker de un sector del público fue en el mes de agosto, en el Trofeo Santiago Bernabéu, cuando fue pitado. Comprobó, a partir de este momento, que era el señalado por la marcha de Mourinho y que no iba tener una temporada fácil.
Ya nada sería lo mismo, a pesar de que cuenta con una amplia mayoría de aficionados que le idolatran y que, como el sábado contra la Real Sociedad, acuden al estadio con pancartas que dicen: 'Iker, titular'.Tampoco lo está pasando bien con los comentarios despectivos hacia su persona y su trabajo que inundan las redes sociales.
En cierto modo, se reivindica publicando en su cuenta de Instagram fotografías de su época en la cantera del Real Madrid. Son mensajes subliminales en los que pretende dejar claro que nació, se crió y triunfó en el Real Madrid. Que lo ha dado todo por este club y su escudo. Se palpa un Casillas nostálgico y dolido. En este escenario, de desafecto e incertidumbre por su rol en el equipo, Iker ya está mirando a otros países como Inglaterra y Alemania
Iker Casillas no tiene sólo un problema deportivo. Hay otro personal que está relacionado con el desafecto que le transmite la afición desde la salida del anterior entrenador, José Mourinho.
El portero no es ajeno a la división que hay entre los seguidores con el tema de la portería y que le acusan de no ser buen compañero con Diego López. Lo que peor lleva el mostoleño es que le hayan señalado, incluso culpabilizado, como el artífice de la marcha de Mourinho, un entrenador de perfil alto que conectó con la grada del Bernabéu y al que se le echa de menos por su forma de ser tan directa y pasional.
El primer palo serio que se llevó Iker de un sector del público fue en el mes de agosto, en el Trofeo Santiago Bernabéu, cuando fue pitado. Comprobó, a partir de este momento, que era el señalado por la marcha de Mourinho y que no iba tener una temporada fácil.
Ya nada sería lo mismo, a pesar de que cuenta con una amplia mayoría de aficionados que le idolatran y que, como el sábado contra la Real Sociedad, acuden al estadio con pancartas que dicen: 'Iker, titular'.Tampoco lo está pasando bien con los comentarios despectivos hacia su persona y su trabajo que inundan las redes sociales.
En cierto modo, se reivindica publicando en su cuenta de Instagram fotografías de su época en la cantera del Real Madrid. Son mensajes subliminales en los que pretende dejar claro que nació, se crió y triunfó en el Real Madrid. Que lo ha dado todo por este club y su escudo. Se palpa un Casillas nostálgico y dolido. En este escenario, de desafecto e incertidumbre por su rol en el equipo, Iker ya está mirando a otros países como Inglaterra y Alemania